necking and misery | tokyo revengers

inui seishu.

EVEN THOUGHT HE WASN'T YOURS.

— ¡Bye, bye!

Despediste a Koko que estaba saliendo de la biblioteca. El chico te sonrió mientras se alejaba.

Inmediatamente te volteaste para observar al chico que estaba sentado a tu lado. A diferencia de ti, el no tenía libros sobre la mesa ni mucho menos estaba leyendo. Sonreíste y hablaste nuevamente.

— ¿No vas a ir con Koko?

Inui negó su cabeza — Creo que quiero quedarme un poco más en la biblioteca.

Las comisuras de tus labios se elevaron y colocaste tu mano en tu mentón para poder observarlo, notaste como te miro de reojo pero de inmediato apartó la mirada.

— ¿Es porque quieres quedarte conmigo?

Inui se tomó un momento para mirar tu rostro, al cabo de los segundos se dio cuenta que el suyo estaba enrojecido — Por supuesto que no— se paró del asiento y se dirigió al estante más cercano, tomó el libro y lo colocó sobre la mesa — Vengo a leer.

Reíste en bajo y te giraste hacia tu libro para poder seguir estudiando — Creo que es lindo que Inupi ya esté leyendo sobre el embarazo.

Inui se puso rígido mientras miraba la portada del libro. 'Guía de embarazo' escrito en letras grandes en la portada, maldijo en bajo y volviste a reír cuando Inui dejó su asiento para buscar otro libro.

Con eso, los presentes volvieron a concentrarse en sus libros. Realizabas algo de álgebra cuando miraste nuevamente a Inui por el rabillo del ojo.

El estaba frunciendo el ceño. Aprovechaste la oportunidad para inclinarte hacia el silenciosamente, acercaste tu silla con cuidado y segundos después tu rostro hacia él, parecía no notar tu cercanía.

— ¿Qué pasa? — susurraste cerca de su oído, las manos de Inui se quedaron quietas en el libro mientras trataba de no girar para ver tu rostro de cerca. Uno de sus dedos señaló una palabra del libro.

— No puedo leer este kanji...

Te inclinaste más cerca, sus hombros se tocaron y Inui no movió ningún músculo, su corazón martillaba en su pecho al igual que el tuyo — Está palabra está escrita como hikouki. Es un avión.

Sonreíste y lo volviste a observar, algo en tu estómago se revolvió al ver sus pestañas; eran largas y rubias — ¿Entendido?

Él asintió rígidamente mientras volvías a tu sitio y volvías a concentrarte en tus libros, dejando a Inui Seishu muy rojo.

Bromear con él de esa forma era divertido. La forma en que se ponía rojo, se ponía rígido ante tu toque o tartamudeaba para salir de situaciones. Todo en el era una caja de sorpresas.

Querías a Inui y estabas bastante segura que él de alguna forma te correspondía a esos sentimientos, pero no eran pareja. Según Koko, Inui aparentemente no quiere meterte en el mundo de las pandillas y esas cosas. Él te aprecia tanto que el te guardaría en una pequeña caja para que no te sucediera nada.

Respetaste la decisión de Inui, pero eso no te detenía para hacer tus bromas descaradas.

Continuaste trabajando en tu tarea y junto a ti él aún estaba leyendo con mucha atención el libro acerca de las máquinas.