No Imaginaba 2. PERMANECER

Entrega. Parte 3

...Reuniendo la fuerza suficiente y siseando por el dolor por todo su cuerpo capturó los labios de Zhan.

Aquella acción descolocó al pelinegro quien sólo abrió los ojos de asombro.

En el fondo de su mente algo se removió. Lo recordaba, debajo de la maraña de emociones descontroladas pudo reconocer ese sabor, la tibieza de esa boca, la suavidad de los labios y la lengua cuando buscó la suya.

-Yibo- susurró bajito cuando se abrió una pequeña ventana de claridad en su mente, por una fracción de segundo reconoció a Lan Yibo.

Su corazón dio un brinco que provocó de nuevo la ola aturdidora de emociones descontroladas, pero sobre todas una tomaba la delantera sobre otras.

Por su lado, Yibo trató de mantener contacto visual con Zhan cuando lo escuchó murmurar su nombre, "¿acaso esto realmente estaba funcionando?", fue un instante demasiado corto, pero le dio esperanzas.

Zhan devoró la boca de Yibo bruscamente, sus dientes chocaron de forma incomoda y Zhan succionó la lengua del joven mordiéndole los esponjosos labios irritados mezclando la saliva con el hierro de la sangre.

-¡Ah!- de nuevo, una ventana de cordura se abrió en su mente haciéndolo jadear por la sensación a la cual era familiar cuando la pasión de sus besos era mezclada con el sabor de la sangre.

Zhan ahora lo podía sentir, su mente luchaba por salir de la bruma de las emociones incontrolables y tomar el mando, pero aún no era suficiente.

El aire se agotó y como respuesta primaria de autopreservación liberó la boca de Yibo mientras ambos jadeaban luchando por llenar sus pulmones de aire. A pesar del dolor en sus extremidades, Yibo aprovechó para envolver a Zhan en un abrazó firme. Sus respiraciones se acompasaron y pronto las auras con las que sus almas se manifestaban cuando se encontraban en perfecta sincronía comenzó a invadir ambos cuerpos.

La de Zhan brillaba con mayor intensidad haciendo que su respiración fuera más controlada y un suspiro abandonó sus labios cuando comenzó a sentir su energía controlarse.

El aura de Yibo comenzó a alimentarse de la de Zhan para alcanzar un equilibrio, era la forma en que trabajaban las almas gemelas, siempre equilibrándose entre sí, drenando la sobrecarga del cuerpo de Zhan por lo que por unos minutos ambos cuerpos brillaban cegadoramente al mismo tiempo en que se sanaban físicamente de cualquier desperfecto.

Yibo suspiró de alivio al no sentir el ardor de las innumerables heridas que Zhan había dejado por todo su cuerpo, la debilidad desapareció y una leve sonrisa surgió en su rostro al percatarse de que Zhan lo miraba atentamente, un brillo brotó en los ojos de este cuando Yibo sonrió y Zhan de nuevo volvió a capturar los labios del castaño en un beso menos fiero, pero más profundo.

Zhan intentó restregarse de nuevo sobre el cuerpo semidesnudo de Yibo, pero ahora era su propia ropa quien impedía el contacto directo por lo que con jalones y tirones una vez se hubo desnudado por completo volvió a restregarse sobre Yibo comenzando a gemir bajo.

Sin poder evitarlo, Yibo comenzó a ponerse duro al sentir los movimientos del cuerpo desnudo de Zhan sobre sí mismo. También fue consciente de la excitación de Xiao. Sin poderse controlar, ambos comenzaron a gemir por la fricción de ambos cuerpos.

Zhan exploraba el cuerpo del castaño con sus manos y su boca dejando mordidas, lamidas y chupetones a su paso, nada de lo que no estuvieran acostumbrados a hacerse, aunque conforme bajaba sobre el cuerpo de Yibo un pensamiento asaltó su mente. Era obvio que Zhan no tenía control sobre sus acciones totalmente y todos sus movimientos eran bruscos... ¿qué iba a hacer Zhan exactamente cuando bajara lo suficiente hasta su miembro? ¿sería capaz de soportar una mordida con fuerza descontrolada sobre su erección?