La situación actual sin duda había sido toda una locura, ni siquiera cuando llegaron paramédicos la situación se calmó por completo, Kai no solo se desmayó al ver lo que pudo de su propia sangre, sino que además tuvo una clase de convulsión como reacción a esto por su hematofobia.
Realmente de este momento preciso no hay nada muy interesante que contar, quizá el simple hecho de que tuvieron que llevarse al menor a urgencias por esto o que ahora SooBin estaba tirado en el suelo del cuarto de su amigo llorando como si no hubiera un mañana, pero más detalles aparte de esto no serían muy relevantes.
YeonJun algo nervioso por toda la situación se arrodilló frente al castaño, claramente dándole su espacio personal para que no se sintiera tan agobiado de cierto modo, intentó hacer que lo mirara y habló con un tono de voz suave y calmado para no apurarlo a que se relajara.
-Hey... Aquí estoy ¿Sí? Si no quieres hablar ahora mismo está bien, puedes tomarte tu tiempo...
En eso, SooBin solo se levantó para salir corriendo hacia su cuarto, YeonJun lo siguió lentamente para no asustarlo, una vez allí solo apoyó su mano en el marco de la puerta que ahora estaba algo entrecerrada, apenas asomando un poco su rostro.
-¿Quieres que te deje solo?
-¡Sí, déjame en paz!- gritó SooBin aún en su estado de pánico e ira, acercándose a la puerta de manera rápida para cerrarsela a YeonJun prácticamente en la cara, y cuando digo "en la cara" me refiero a que realmente golpeó su nariz, haciendo que se alejara de golpe.
-Demonios- quería gritar por el dolor pero sabía que no sería tan adecuado, solo sujetó su nariz un poco y se apoyó en la pared que había al lado de la puerta, alcanzaba a escuchar del otro lado cómo al interior del cuarto aún se encontraba aún el menor rompiendo en llanto cada vez haciendo más ruido; decidió soltar su nariz para respirar un poco y observó cómo esta estaba ahora manchada de rojo.
-Creo que hoy no es mi día...- dijo mientras presionaba su nariz para tapar un poco sus orificios nasales, intentando así frenar el ligero sangrado de esta.
Intentó concentrarse en pensar posibles maneras de ayudar al castaño, sabía que el intentar hacerlo de una vez sabiendo que necesitaba relajarse un poco por su cuenta podría salir mal ya que sonaría a que lo está forzando a llegar a un estado de tranquilidad y calma, pero a la vez el dejarlo en ese estado podría simplemente hacerlo empeorar al no poder controlarse con ayuda.
Escuchó cómo una de las puertas se abría, y una vez volteó a mirar se encontró con BeomGyu quien salía algo alarmado de su habitación.
-¡Hey! ¿Sucedió algo o por qué tanto alboroto?
-¿Hasta allí se escuchó?
-¡Claro que sí! ¿Crees que no se iban a escuchar un montón de ruidos e incluso paramédicos entrando?- iba a seguir hablando pero tan pronto como observó la sangre en la mano de su mayor se acercó más a él.
-¿Te metiste en lo que sea que haya ocurrido allí?
-Algo así, aunque no por completo...- bufó un poco soltando por unos segundos su nariz para luego volver a presionarla. -Hey ¿Por qué no intentas dormir un poco?
-Créeme, llevo un buen rato intentándolo y no lo consigo, y cuando lo estaba consiguiendo empecé a escuchar todo el desórden que había aquí afuera, realmente consideré salir y ver lo que pasaba pero me puse nervioso al pensar en que quizá podría estarme metiendo en alguna clase de problema por eso.
-Pues, la verdad es que ahora todo anda algo más tranquilo, así que puedes estar tú también tranquilo pensando en eso.
-Ajá, tranquilo- señaló con sus ojos la habitación de SooBin al seguiur escuchando un poco su llanto, YeonJun apenas cerró un poco sus ojos y luego desvió su mirada.
-Bien... Lo intentaré, no estoy muy tranquilo aún pero sé que debo hacerlo, así que... Buenas noches, intenta descansar tú también- sin esperar una respuesta de parte del mayor, BeomGyu solo se dió la vuelta para dirigirse nuevamente a su habitación.
Al darse cuenta de que ya su nariz estaba dejando de sangrar soltó esta y tomó una servilleta que traía en su bolsillo para limpiar su mano y pequeños restos de sangre de su rostro, una vez hizo esto respiró hondo.
-Si algo te llega a pasar, que tu papá se encargue de ellos, tú solo quisiste cumplir tu labor de ayudar- ya decidido, abrió de manera lenta la puerta del cuarto del menor, observó cómo se encontraba sentado en el suelo con su espada recostada contra la cama, abrazando sus piernas mientras ocultaba su rostro entre sus rodillas; alcanzaba a escuchar cómo murmuraba algunas cosas, pero no conseguía entenderlo.
Se arrodilló frente a él como había hecho hace un rato, consiguió que lo mirara en un instante así que solo sonrió un poco.
-Ven, intenta inhalar durante cinco segundos ¿Sí?- entre sollozos, el menor negó con su cabeza y desvió su mirada hacia otra parte.
-No puedo... ¡No puedo!- dijo con su voz algo entrecortada, acurrucándose más en sí mismo -Dice que soy débil, que soy un cobarde... Y tiene la razón... Y odio que tenga la razón, porque simplemente es una manera más de recordarme que no sirvo para nada ¡Solo es recordarme que soy un maldito idiota!- dijo mientras sentía cada vez más esa clase de presión en su pecho, negando cada vez que escuchaba aquellas voces en su cabeza que lo tachaban de cosas tan horribles y que lo hacían sentir simplemente peor.
-Hey, mira, lo que sea que te esté atormentando ahora simplemente no tiene razón de ser ¿Sí?- pausó por unos segundos mientras esperaba a tener la atención del castaño, una vez la tuvo siguió hablando con ese tono calmado, por más de que por dentro se sentía impotente por no conseguir la manera de ayudar sabiendo que debería tenerla -Solo están intentando dañarte, cosa que no deberían hacer, pero tú eres más fuerte ¿Entiendes? Eres más fuerte que aquello que te intenta lastimar, muchísimo más fuerte, realmente te esfuerzas en no prestarle atención y es algo de admirar.
El menor asintió y comenzó a inhalar lentamente como le habían indicado antes, siguió escuchando aquellos insultos pero intentó no prestarles atención.
-Mantén el aire durante cinco segundos y luego exhala durante otros cinco, ve repitiendo ese proceso hasta que consigas tranquilizarte ¡Tú puedes!
Con una pequeña sonrisa en su rostro, SooBin simplemente siguió sus órdenes, y después de un rato ya más tranquilo habló con su tono de voz algo bajo.
-¿Podrías traerme un poco de agua, por favor?- el mayor asintió y se levantó del suelo para poder salir y dirigirse a donde estaba el dispensador del agua, tomando el vaso para poder llenarlo, en eso se puso a pensar en algo.
"Espero poder llegar a ganarme la confianza absoluta de ellos, realmenten quiero ayudarlos, quiero ser ese lugar seguro para ellos y realmente hacer que se sientan algo mejor, porque... No quiero que pasen los mismos ratos malos que pasé yo por no recibir suficiente apoyo cuando más quise tenerlo..."•••
¡Hola!¿Me extrañaron? JAJAJA.
Lo siento por la ausencia, pasa que descubrí el secreto de la reina Isabel para vivir durante mucho tiempo así que su ejército de Minions me comenzaron a perseguir por todo el mundo, me cambié la identidad y aún así consiguieron encontrarme cuando me estaba escondiendo en Australia, me secuestraron y me tuvieron enterrado en una clase de madriguera durante un montón de tiempo, tuve que soportar a Chayanne bailando canciones de BTS y a Luis Miguel cantando las de Blackpink como castigo; para sobrevivir tenía que comer popó de gusano y la única manera de salir era promocionando una marca de gaseosa, pero siendo yo una persona lógica decidí no hacerlo por mi dignidad, dignidad tan buena como la nueva Pepsi sabor uva que ahora viene en botellas de un litro para toda la familia.
Traducción: no tenía tiempo ni inspiración.
Anyways, espero les haya gustado el capítulo, y no olviden dejar su voto y su comentario¡Nos vemos en el próximo capítulo!
-Minion que se hace pasar por Alex.
P.D: Sé que hoy no es día de actualización pero no podía ya esperar para actualizar así que lo hice hoy, de todas formas tendrán capítulo casi que asegurado el miercoles o el jueves, y si todo sale bien, será ambos días <3
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Sick Hearts [TXT]
Fanfiction¿Qué pasaría si, en algún momento, tus habilidades fueran puestas a prueba con mayor dificultad a la que estás acostumbrado? Este es el caso de Choi YeonJun, un chico de veintidós años, proveniente de una familia conocida por tener a los mejores psi...