Hija mía:
El mundo es duro, y frío, y muchas muchísimas veces será severo y mortal si no tienes cuidado; y si lo tienes, aún así será difícil.
La vida es compleja, y con el pasar del tiempo se hace aún más y más enredada. Mientras llenamos nuestra mochila con responsabilidades.
Te prometo que todo eso es necesario. Para alcanzar la nobleza de ser mejor, como raza, y como persona.
Recuerda quién eres. Porque no solo eres tus caídas, y las veces que fuiste presa del miedo y la cobardía.
Hija mía yo he sido presa del horror y el miedo por tanto tiempo en mi vida. Pero he sido un cobarde muy pocas veces.
He sido un cobarde cuando me he callado, cuando me he limitado a no dar un paso.
Soy tanto mis triunfos pero mucho más mis fracasos.
Somos criaturas, ademas de muchas más cosas, de errores, de lágrimas y sudor. De arrepentimientos; llenos estamos cuanto más vivimos. Y todo el que lo niegue bien puede ser un psicópata. Porque si algo ofrecen los años queramos o no es la posibilidad de saber que podíamos haber hecho mejor.
Entiende bien, arrepentirse no es lo mismo que no estar en paz con lo que hiciste. Aunque suene confuso.
Yo acepté los actos que me llevaron acá, pero tengo creo que la madurez, por llamarlo de alguna forma, para aceptar que mis actos están lejos de ser perfectos o enteramente nobles.
Entonces por qué no querer que fueran así, por qué no desear regresar y hacerlo todo mejor, diferente, aunque no cambie mi objetivo en ese momento.
A veces el método es de mayor importancia que la meta.
Te digo todo esto para animarte a que estés frente a tu sombra y tus miedos.
Y aceptes. Para que puedas ver más allá, porque donde hay una sombra hay luz. Y es necesario que veas esa luz de igual forma que es necesario que veas la oscuridad que se proyecta.
Yo aún aprendo a vivir esta vida. Y si no estoy para recordártelo, y si nadie esta para recordártelo, debes ser capaz de recordarlo tú. Porque es tu deber ser el pilar para otros, y otros ser un pilar para otros. Porque solo así quizás podremos cambiar este panorama desolador que nos anuncia el comportamiento social que vemos.
Levántate y pelea, por ti, para otros.
Levántate y ama, por ti, para otros.
Levántate y aprende, por ti para otros.
Y ayuda, ayuda a que otros puedan ayudarse, por ti, por el bien de tu alma...
Y de la familia que un día tendrás.NL