Leal ante todo - Tamaki x T/n.

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Eres un chicx de nuevo ingreso, con excelentes calificaciones, pues tu quirk consiste en convertir en misiles todo lo que tu decidas y estés en contacto con eso, e incluso decidir si explotará o no y su potencia.

Estás muy emocionadx debido a que el héroe Hawks te recomendó a la academia U.A.

Debido a tu quirk, no fue difícil pasar con las mejores calificaciones, por lo que agradecías bastante ello, y en el otro examen, asombrosamente pasaste con puntuación perfecta, bueno, no tan asombroso, estudiaste como esclavx los días anteriores al examen, aunque así te sorprendía bastante, te sientes orgullosx por el resultado de tu esfuerzo(no como tú en la vida real, que estás por reprobar).

Justo ahora, te encuentras enfrente de la gran puerta de tu aula, 1-A.

Te encuentras muy nerviosx y te remueves un poco tratando de disimularlo (aunque sólo te veas extrañx), aprietas tus manos y muñecas con fuerza tratando de aliviar la sensación de nerviosismo, a la espera de que tu profesor te indique tu entrada para presentarte, escuchas murmullos y finalmente la puerta se abre, mostrando a un hombre de apariencia desprolija y a todo un salón expectante por el/la chicx nuevx.

Te quedas pasmadx por unos segundos hasta que finalmente reaccionas agitando levemente tu cabeza hacia los costados, avanzas adentrándote al aula y miras a cada uno de los pares de ojos que te observan.

Carraspeas.

T/n: Bue-buenos días, compañeros, mi nombre es T/n y desde hoy los acompañaré en su estadía en la Yūei, por lo que espero un compañerismo agradable de su parte, cumpliré mi parte igualmente - respondiste con tu pequeña presentación pre-memorizada anteriormente, te inclinaste y finalmente miraste al maestro a lo que él te devolvió la mirada entendiendo tu mensaje, el miró a un lugar en específico al fondo de la clase causando que voltearas también, al hacerlo, observaste un asiento vacío (el único del lugar), por lo que supusiste que ese sería tu puesto, cuando volteaste a ver al profesor él te miraba fijamente por lo que asentiste y te dirigiste allí.

Al llegar a tu nuevo puesto, y probablemente permanente, revisaste si aún había miradas sobre ti, y en efecto, te asustaste provocando que empujes con algo más de fuerza tu asiento generando un ruido algo fuerte, llamando aún más la atención, ante ello te sentaste rápidamente mientras te ocultabas debajo de tu pequeña fortaleza hecha de tus brazos ocultando como estabas roja de la vergüenza.

El profesor prosiguió a explicar la clase algo sorprendido por tus bruscos actos.

Luego de que tu temperatura corporal bajara, prestaste atención a la clase, aún seguías avergonzadx pero querías concentrarte en cosas más importantes que la opinión de tus nuevos compañeros de clase.

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Una vez llegada la hora del almuerzo, te levantaste cuidadosamente repasando las notas que habías tomado durante el transcurso de la clase, y para cuando terminaste te percataste que se hacía tarde para un reencuentro que esperabas hace meses.

Acomodaste tus cosas y miraste a tu alrededor, era muy tranquilo todo sin nadie al rededor. Avanzaste y tus pasos eran todo lo que se escuchaba en el aula, te emocionaste apresurando tu paso para abrir la puerta de golpe, y vaya sorpresa la que te llevaste al verlo frente a ti, con su mano opuesta a la tuya en la cerradura de la puerta del otro lado de la tuya, un gran sonrojo y ambos bajaron la mirada avergonzados.

T/n: ¡Tamaki- senpai!

Tamaki: ¡T/n!

Exclamaron al mismo tiempo.

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