TU FRIO CORAZON (TOMO UNO)

EL UNICO CULPABLE

Hacía casi un mes desde del onomástico de Lunala, desde ese entonces los ataques de demonios empezaron a ser cada vez mas frecuentes, la verdad, más de lo habitual, pero lograban salir convictos a pesar de las bajas y los heridos. 

Entonces en Arcángel Ludociel empezó a  presionar a la albina por la existencia de el portador, lo cual no obtuvo éxito alguno, al parecer tanto Ludociel como Lunala se quedaron con la idea de que el portador nunca existió y que aquella luna de sangre pudo haber sido alguna casualidad que ojala jamás volviera a pasar, por su puesto descartaron la idea de que los demonios tuvieron algo que ver ya que ellos también estaban desesperados por encontrar alguna respuesta de lo sucedido aquella vez.

Por su parte, los que sabían la verdad sobre el portador, no podían decir nada por el momento, ya que apenas se encontraban entrenando a Lunala para el control de su poder oculto, vaya, ni siquiera habían podido encontrar la oportunidad de confesarle su verdadera naturaleza, así que por el momento aquello debía seguir siendo un secreto.

Desde aquel día Gloxinia no había podido tener ni un tiempo a solas con su albina, si, suya prácticamente, porque ya lo tenia decidido, en la primera oportunidad le confesaría su amor, para convertirla en su Reina, si o si, y eso se lo tuvo de dejar muy en claro a Remi, ya que a el empezó a gustarle su albina, eso no lo iba a permitir.

Así que de la manera mas civilizada posible le pidió que no intentara hacer nada con ella, por que ellos estaban destinados, al principio el pelicafe quedo algo incrédulo ante aquella confesión, no podía creer como un humano pasara por ese proceso de enamoramiento, si ellos tenían un sistema bastante diferente a los otros clanes, Gloxinia le dijo que ni el tampoco entendía, pero que así era, y que al fin de cuentas ella era para el, y que no se interpusiera ya que de por si era difícil tratar de acercarse a ella como el deseaba, seria mas difícil hacerlo si el se interponia.

Al principio Remi no le creyó, pero al observar detenidamente las actitudes de la albina para con su Rey, pudo comprender que todo lo que le dijo era cierto, así que prefirió hacerse aun lado y aceptar solamente la amistad que la princesa le ofrecía.

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Se encontraban ayudando y atendiendo a los heridos que acababan de llegar de la parte sur de Britania, se suponía que iban a establecer una base de aquel lado, pero los demonios se enteraron de las intenciones de Stigma y se apresuraron en atacar y dejar en malas condiciones en lugar.

Lunala que iba en ese grupo con las intenciones de crear una barrera mágica para proteger el lugar, lamentablemente no pudo terminar el ritual y los demonios acabaron por derribar todo, fue prácticamente una masacre por ambos lados.

Al enterarse del regreso de aquel grupo, Gloxinia fue rápidamente al lugar donde atendían a los heridos en busca de la albina, se encontraba algo asustado y ansioso, ya que no le habían podida dar información del estado de la chica, pero su preocupación se desvaneció al verla ayudando a los demás, se encontraba bien, maltrecha, pero bien.

Gloxinia: ¿Qué fue lo que paso? ¿Cómo te encuentras? - Pregunto al estar a su altura.

Lunala: Fue una emboscada, presiento que alguien les aviso a esos demonios.

Remi: Fue una gran pérdida el lugar, todo lo destruyeron – Agrego apareciendo en el lugar mal herido.

Gloxinia: Ya pensaremos el algo.

Remi: Pero ese lugar era bueno, para nuestros planes.

Gloxinia: Por el momento no se preocupen por eso, solo concéntrense en su bienestar y recupérense - El otro asistió y se retiró del lugar - ¿Cómo te sientes? - Volviendo la atención a la peliblanca.