-¿Me mandó a llamar, Hokage-sama?- preguntó Kakashi entrando en el despacho del Hokage con naturalidad manteniendo una pose serena y las manos en los bolsillos.
Hiruzen alzó la mirada de su bola de cristal y soltó un poco de humo de su pipa observando con una extraña seriedad al Jounin peliblanco frente a él.
Kakashi bajó su mirada hasta la bola de cristal en la mesa y entonó los ojos cuando vió a través del cristal a sus tres estudiantes entrenando hasta el cansancio.
Soltó un suspiro mental sabiendo que tarde o temprano tendría que pasar esto.Sabía que el Hokage pronto se daría cuenta que estaba forzando demasiado a los niños.
Ese día los había puesto ese día a hacer prácticas exaustivas de tiros de kunais y shurikenes. No tendrían almuerzo o descanso si no acertaban todos los tiros.
Si uno fallaba aunque fuera un solo tiro, los tres tendrían que volver a empezar desde el principio y no pararían hasta que todos hubieran acertado cada tiro sin fallar ni uno solo.-Si- murmuró Sarutobi mirando acusativamente al Hatake- Creo que sabes por qué te he llamado ¿No es así, Kakashi?- le preguntó dandole una calada a su pipa mientras empujaba la bola de cristal hacia Kakashi para que mirara mejor a sus estudiantes.
El peliplata fijó su vista en la bola de cristal, la cual que mostraba a unos fatigados y cansados niños con las manos, los dedos y algunas partes de sus cuerpos cortados y sangrantes por los kunais o los shurikenes que agarraban mal.
Hacían muecas de dolor al tener los dedos cortados, pero no se detenían por nada.
Había pasado una semana desde que los tomó bajo su tutela.
Hacían misiones rango D por ahora.Los niños ya podían hacer los 3000 ejercicios y correr tres vueltas alrededor de Konoha sin desmayarse al terminar, y podían llegar hasta sus casas sin colapsar.
Habían aprendido por las malas a obedecerlo sin contradecirlo, o si no el castigo sería peor.
Les había inculcado bastante bien la diciplina, y aprendían rápido.-Se están esforzando bastante bien- dijo Kakashi alzandose de hombros en un gesto bastante despreocupado al ver como los tres empezaban otra vez cuando Naruto falló un tiro de kunai.
El Hokage frunció el ceño.
-¿No crees que los estás presionando demasiado, Kakashi?- le preguntó entrelazando sus manos sobre la mesa mirando críticamente al Hatake- Los demás sensei no les han puesto ni la mitad de las cosas que tu les has mandado a hacer- le reclamó.
Eso era obvio. Kurenai era demasiado maternal con sus estudiantes.
Asuma se la pasaba jugando y haciendo parrilladas con su equipo.
Tal vez Gay era el único que entrenaba mejor a sus estudiantes.Pero ninguno les haría a sus Gennin lo que él les hacía a los suyos.
Kakashi soltó un suspiro antes de poner una cara mas seria.
-Con todo respeto, Hokage-sama, creo que cada uno de nosotros tiene una manera diferente de entrenar a nuestro alumnos. Yo los entreno como yo creo que es necesario para ellos- dijo con serenidad mirando al anciano a los ojos.
-Soy conciente de eso, Kakashi. Yo también tuve estudiantes- asintió el Hokage- Sin embargo, el entrenamiento que le estás dando a esos Gennin es demasiado...extremo ¿No lo crees?- le preguntó dandole una calada a su pipa.
Kakashi lo sabía.
El entrenamiento era demasiado extremo para cualquiera. Pero si quería que sus niños sobrevivieran el Infierno que era vivir en el Mundo Ninja real, entonces tenía que prepararlos para que no murieran en su primera misión fuera de la Aldea.
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Team 7: Almas De Fuego
Hayran KurguPorque al final, Kakashi logró su cometido. No solo creó a las armas mas letales de Konoha, si no a las mas letales de todo el mundo ninja. Entrenados por el famoso y poderoso Hatake Kakashi, los miembros del equipo 7 se enfretarán a todo lo que se...