Un día el vagabundo decidió ponerse en la puerta del ayuntamiento a pedir dinero haber si había más suerte.
Dio la casualidad de que entraba en ese mismo momento la hija del alcalde, el se quedo mirándola fijamente asta que entro al ayuntamiento, el espero durante horas asta la noche.Cuando salio la vio muy enfadada y el se pregunto que por que estaría así de enfadada.
El se acerco a preguntarle y le dijo que no tenia por que decírselo a el, desde ese momento decidió ponerse todos los días en la puerta del ayuntamiento.