El secreto de Mara

Capítulo 11

La enfermedad

**Sara**

Al día siguiente de ir al hospital me llamaron para decirme que el jueves a las 3:00 me operarán. Con una sonrisa y algo nerviosa bajé a comentárselo a Verónica.

Sara: Verónica

Verónica: Dime

Sara: Tengo que hablar contigo a solas, es urgente.

Verónica se me quedó mirando sorprendida por un momento

Verónica: Claro, sígueme.

Nos fuimos a la cocina, nos sentamos en los taburetes y le conté lo de la operación.

Verónica: ¡DIOS MIO! ¿y estás bien?.

Sara: Estoy algo nerviosa, pero te agradecería que esto no se lo dijeras a nadie por favor.

Verónica: Tranquila, no se lo contaré a nadie, ni a Rodrigo.

Sara: Muchísimas gracias.

Verónica: Denada, para eso estoy aquí.

Salimos de la cocina y fuimos al salón, estaban Rodrigo y Pepe viendo la tele.

**Rodrigo**

Rodrigo: Hola.

Sara: Hola, ¿qué tal habéis dormido?.

Rodrigo: Muy bien, ¿Y tú?.

Sara: Perfectamente.

Rodrigo: ¿Te apetece que demos una vuelta por el parque?.

Sara: Claro, me encantaría.

Rodrigo: Adios mamá.

Verónica: Adiós mi amor, vuelve pronto.

Estuvimos paseando por  el parque, veía algo nerviosa a Sara, así que decidí preguntarle qué le pasaba, pero ella no quería responder, me daba evasivas, así que decidí cambiar de tema, tal vez no esté cómoda diciendome que le pasaba, no quiero obligarla ni hacer que se sienta mal.
Fuimos a  la cascada que había en el parque, me ha sorprendido bastante su cara ya que al parecer no había ido nunca a esa zona del parque, lo cual es raro, ya que ella lleva en esta ciudad más tiempo que yo.
Luego llegamos a casa y decidimos ir a la piscina y nos estuvimos bañando hasta que llegó la hora de la cena.

**Sara**

Me encanta estar tanto tiempo con Rodrigo, ya que si sale mal la operación puedo llegar a morir y no volverlo a ver más, no me gusta esconder esto pero no quiero que se preocupe por mí, porque sé que esto no es muy grave.

**Narradora**

Llegó el miércoles y Sara empezó a plantearse el decirle a Rodrigo lo de la operación, se lo preguntó a Verónica y le dijo que es lo mejor, a si que, Sara esperó a que se levantara Rodrigo, pero mientras tanto estuvo haciendo una deliciosa comida para irse con el de picnic.
Llegaron las 12 de la mañana y Rodrigo despertó, bajó al salón y estaban Sara y Verónica.

Rodrigo: Buenos días mamá (la abraza), buenos días Alem.

Verónica: Estás muy contento hoy.

Rodrigo: Si, me he levantado de buen humor.

Sara: Me alegra oír eso, porque tengo una sorpresa para ti, nos vamos de picnic, así que vístete y llévate el bañador en una bolsa que nos vamos ahora mismo.

Rodrigo subió corriendo a su habitación, se vistió y bajó, cogió una mochila, se la puso en la espalda y salieron por la puerta trasera.

Sara: Para ir a este lugar tenemos que ser lobos.

Sara y Rodrigo se convirtieron en lobos y fueron corriendo, Rodrigo fue en todo momento detrás de Sara para no perderse, llegaron en un momento a un lago tranquilo en los alrededores de la ciudad. Volvieron a su forma humana y se pusieron a prepararlo todo para comer.