Amor De Infancia - Hasahi (Haruto X Asahi)

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Asahi.                                             [2ra ps.]

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Sólo corría, corría sin mirar atrás, no quería voltear a ver a la persona que daña de él por horas. Lágrimas sólo caían mientras se le nublaba la vista y no le permitía ver nada, quería llegar a un lugar y descansar, sus cortas piernitas no daban más del cansancio que sentía en el momento.

Solo tenía seis años, era un niño y tenía que estar escapando de la persona que más debería amar, estaba corriendo lejos de la persona que debería llamar héroe.

Corrió por un tiempo más hasta que llegó a un pequeño lugar llenos de árboles con un escondite que él entraba perfectamente, se sentó en ese agujero hasta ver que la persona de la cuál corría pasó de largo sin haberlo visto, trató de respirar profundo y de calmar su agitado corazón. Miro por todos lados con cuidado admirando todos los detalles, se había dado cuenta que en esa pequeña plaza nunca había ido, había muchas familias disfrutando de ese verano lleno de calor que te obligaba a estar afuera de casa. Miró con suma atención los cariños que los padres daban a los niños y a estos mismos disfrutando de los juegos de la misma plaza.

Con mucha timidez se acercó a las hamacas y ahí mismo se sentó para tratar hamacarse con la poquita fuerza que tenía. Al notar que no pudo dejó de intentar y sólo miró para abajo, hasta que en ese momento sintió que alguien agarraba la hamaca para empezar a empujar de ella, vio a un hombre desconocido que el nunca había visto y atrás de este mismo un niño que parecía de su misma edad con un tono carmesí en sus mejillas mostrando vergüenza y timidez, Asahi sólo miró al hombre y este sonrió, tal vez era una buena persona.. No cómo su "héroe" con corazón de monstruo que él tanto temía.
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Habría pasado unas horas jugando con ese niño que si él bien recordaba su nombre era Haruto, este niño le contó que él también era japonés y que no debía de temer porque no lo iban a lastimar. Esta família lo invitó a merendar en ese picnic improvisado y preguntaron por sus padres que con mucho miedo y dolor él contestó que ellos no lo iban a buscar ni aunque haya desaparecido por horas, los padres del japonés más chico sólo pudieron abrazarlo, abrazar y tratar de construir los pedazos rotos de un pequeño corazón que recién empezaba a entender las cosas de su alrededor. Un corazón lleno de ilusiones de que sus padres sean iguales a que los demás pero su cabeza llena de ideas de que eso nunca iba a pasar.

No hasta que conoció a esta família, sin saber de ese pequeño japonés alto que tanto jugó en la hamaca con él iba a ser tan importante en su vida hasta el punto de querer pasar toda su vida con él sin importar el qué de lo que le tenía que pasar.

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