ALGO MÁGICO.

Capítulo 18.

NARRA JENNIE.

Sabía que había echo mal cuando me había ido con Kai tan de repente, pero también sé que Kai se opondría cuando él y yo tenemos un contrato.

Decido llamar nuevamente a Lisa cuando un señor se asoma en su departamento ya desocupado. - Abandono el departamento. - habla seriamente y cuando gira frente a mi departamento me asombro, parece dudarlo por varios segundos pero toca la puerta, cuelgo la llamada que finalmente no fue correspondida y abro la puerta lentamente.

- Buenos días señorita, es que estoy buscando a la joven de este departamento, ¿sabe a donde se fue? - dice señalando el departamento de Lisa y muerdo mi labio dudando en responder. - No, lo siento. No la he visto desde ayer. - digo "apenada" y el suspira derrotado, lleva su celular a su oreja caminando hacia el pasillo. - Tienes que hablar con ella, no voy a soportar este tipo de actitudes. - dice enojado y luego cuelga la llamada, me pregunto, ¿quién tiene que hablar con ella? Además de él, la única persona que debería ser capaz de reprenderla por este tipo de actitudes es su madre, pero ellos dos no se hablan, ¿o sí?

Entro en mi apartamento nuevamente pensando que hacer para que Lisa este aquí, junto a mi. Kai es un idiota pero yo lo fui aún más no leyendo el contrato, ya que al parecer no puedo "terminar con él" después de dos años, y ni siquiera llevamos la mitad de un año para empezar.

Decido llamar a mi mejor amiga, Jisoo. - Hola mejor amiga. - suelto cuando escucho una respiración del otro lado. - Hola Jen, ¿que pasa? - dice despreocupada y sonrió. - Solo quería saber de ti, desde ayer no hemos hablado. - digo yendo hacia mi habitación y recostandome en esta. - Bueno, eso es verdad. ¿Qué tal vas con Lisa? ¿Ella está contigo? - dice tranquila y suspiro cerrando los ojos con fuerza. - Hice algo que, bueno, la hizo tomar la decisión de irse con Sana. - digo triste y ella suelta una leve risa. - Ahora que hiciste. - habla suave e intento aguantar las lágrimas que tan de repente aparecen. - No sé qué estoy haciendo, siéndote sincera Lisa a hecho que sienta esto. . . Que no había sentido nunca. - digo lentamente y escucho varios sonidos del otro lado. - Deberías decírselo, estos días he notado tu cambio. Ella merece saberlo, tal vez ella sienta lo mismo. - habla mi mejor amiga y sonrío, ¿debería? ¿Seré correspondida?

- No estoy segura, además hoy estuvo Kai y me fui con él, pero fue un error. Debió dar por echo que lo elegía a él por sobre ella. - hablo sintiendo mi corazón doler y Jisoo suspira. - ¿Qué quieres hacer? Es decir, sabemos que a él nunca lo quisiste, en todo caso. ¿Renunciarías a ese contrato por ella? - dice pausadamente y me siento en la cama, pensándolo. Ser cantante ha sido mi sueño desde siempre, ¿lo dejaría por una persona? ¿Una persona vale la pena para dejar tus sueños a un lado?

- No, claro que no. Pero tampoco podría soportar la idea de tenerla alejada. - digo firme y Jisoo suelta un suspiro. - Jennie estas siendo algo egoísta, mira, ¿que tal si lo dejas por este día y piensas mejor las cosas? - dice mi mejor amiga rendida y entiendo porque lo dice.

Siendo sincera, no estoy segura de lo que quiero en este momento, Lisa, a pesar de todo se ha convertido en algo que necesito para sobrevivir, han sido días en donde mis sentimientos hacia ella han estado a flor de piel, donde con ella me siento segura, en paz y sobre todo en confianza.

Nuestras entregas han sido totalmente sinceras y puedo apostar por ello, sin embargo, ella tenía razón. Estamos en dos puntos diferentes de nuestras vidas, nuestro caminos deberán chocar en algún momento y eso es lo que menos quiero, no quiero ser la causante de su dolor porque sé que jamás me perdonaría. - No quiero, es decir, me quedé para estar con ella, siento mi soledad más de lo normal. - digo sincera y puedo jurar que Jisoo esta sonriendo ahora, tendría mil razones para ello pero ahora eso no me interesa. - Iré por ella. - digo segura levantándome de la cama y comenzando a arreglarme. - Sabes que te apoyo y si no llega a salir bien, no insistas. - habla sincera y asiento a su punto. - Te hablo después. - digo cortando la llamada y tomando mis cosas lo más rápido posible.

Entro en el ascensor mientras llamo a Lisa, por favor, respóndeme. Digo para mis adentros, suspiro cuando suena la contestadora.

NARRA LISA.

Es la cuarta vez que veo como mi celular comienza a vibrar y Sana me mira fastidiada. - Debes responderle, al parecer no va a parar. - habla con desespero y asiento saliendo de la sala y encerrandome en el cuarto que ahora es mío. - Lisa, quiero hablar contigo. - dice ella cuando respondo y miro alrededor no sabiendo que responder, claro que quiero verla, pero no quiero por este mismo sentimiento de desesperación de querer verla.

- Sé que no debí dejarte como lo hice, y quiero aclararte todo eso. Por favor, permíteme explicártelo. - habla temblorosa y me siento en la cama. - Claro, explícamelo. - digo indecisa y escucho un suspiro del otro lado. - Necesito verte, necesito hablarlo en persona. - muerdo mi labio temblorosa, y no se que responder. - Podemos hablarlo de esta forma. - hablo firme y escucho una leve respuesta de negación. - Yo quiero verte. - dice segura y a este punto estoy realmente arrepintiendome de seguir esta conversación. - Y si tu no aceptas mi explicación, puedes irte y no sabrás de mi. - miro hacia la ventana sintiendo un nudo cuando vuelve a hablar de esa forma tan apagada. ¿Qué fue lo que hice para terminar con ella de esta forma?

- Estaré en la cafetería de Starbucks en la avenida de Sowng, te espero allá. - digo dando por finalizada nuestra llamada y respiro profundamente. - No vas a dejar que te domine. Nunca lo has echo y esta no será la primera vez. - digo para que mi palpitante corazón se calme.

Decido salir como estoy vestida, tampoco me veo mal como para estar en la calle, no he respondido los mensajes en todo el día pero por el rabillo puedo ver que tengo mensajes de Rose, Joy y Jungkook. Tomo una chaqueta y las llaves del penthouse de mi hermana.

Veo a Sana con su celular aun en la sala y voltea a mirarme cuando me siente. - ¿La vas a ver? - dice con una pequeña sonrisa. - Sí, pienso dejar las cosas claras de una vez por todas. - hablo y uno mis manos en forma de nerviosismo. - Todo saldrá bien, si se saben escuchar. - dice segura y suelto una media sonrisa. - Nos vemos luego. - digo abriendo la puerta y al escuchar su despido salgo del penthouse. - Todo saldrá bien, si claro. - digo sarcástica y bajo las escaleras.