PARTE DOS

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“To: JACKSON

Me encanta tu amabilidad, desearía ser lo suficientemente bueno para ti.”

[✧]

28 de mayo de 2010 — 16 años

En algún punto de su adolescencia, fue claro que JinYoung dejaría atrás su etapa de niño marginado a ser un centro de atención. Todo su cuerpo ya estaba dando paso a un adulto mucho más formado que sus épocas infantiles y parecía que por fin su rostro estaba comenzando a armonizar; aún había algo dulce en su apariencia, pero no había duda que en unos años más su mandíbula se marcaría, sus hombros se ensancharían un poco más y subiría unos centímetros más cerca del cielo. Toda esta inesperada transformación, su madre la llamaba florecimiento tardío, cargó con más consecuencias de las que esperaba. La que en principio lo puso feliz de su nuevo estatus, es que nadie cuestionaba ya su afinidad junto a Jackson, ahora todos parecían haber cambiado de opinión y decidido que ellos debían estar juntos por designación del destino cuanto menos, como si fuera el curso natural de las cosas que la gente bella se juntara entre sí para verse inalcanzable. Cuando Jackson se lo contó en su lugar secreto, un salón viejo del que habían tenido acceso cuando JinYoung “pidió prestada la llave” en la oficina del director, estaba desternillandose de la risa. Su amplio pecho juvenil subiendo y bajando en la tela ligeramente holgada de su camisa blanca. Recostado entre dos escritorios un poco empolvados, lo observó con una sonrisa.

—Es nuestro destino, JinYoungie —y le guiñó el ojo.

JinYoung para este punto estaba prácticamente inmunizado por ese tipo de gestos, su amigo no era ni medio normal a veces, así que parecía creer que coquetear con todo el mundo era lo natural para comunicarse. JinYoung debería estar acostumbrado a sus toques y su ser pegajoso en general. Debería era la palabra clave. Por suerte aunque su cabeza parecía volverse confusa y vaporosa, su cuerpo estaba más que condicionado a responder poniendo los ojos en blanco, por lo que dejaba la ligera incomodidad en el fondo de su cabeza.

—Siéntate bien —reprendió, acomodándose en la silla, su uniforme completamente ordenado, desde los pantalones de vestir café, hasta su suéter sin mangas blanco sobre la camisa. Jackson por suerte esta vez traía corbata, lo que ya era decir demasiado y probablemente quedaría sucio con el polvo acumulado.

—Tengo tarea de matemáticas —comenzó Jackson a quejarse y JinYoung sonrió brevemente, el gesto casi automático de tapar su boca. Aunque ya no tenía los aparatos en sus dientes, el movimiento se hizo costumbre y su cuerpo lo recreaba casi con inercia.

***

Otro de los beneficios, era que la gente tendía a ser más amable. JinYoung casi no tenía que estar en guardia, pero era agotador sentir que lo estaban mirando todo el tiempo. Más desde que se volvió presidente estudiantil. Era prácticamente el niño modelo del instituto, guapo, inteligente y tranquilo. Sólo que no era tan fácil portar el título, después de haberse convertido en presidente estudiantil, tenía un montón de deberes más que cubrir y debía juntarse con los delegados de cada clase a discutir cosas como festivales, ferias científicas y problemáticas escolares todos los jueves después de clases. Ser popular al principio fue una novedad que JinYoung quiso, luego, cuando las reuniones con Jackson eran más dificles, ya no era tan divertido. Jackson aunque se esforzaba mucho en sus estudios gracias a él, no era ni por asomo de los mejores en la clase, por lo que su idea de que fuera delegado para verse más fue rápidamente despachada.

THE UNSENT PROJECT ; jinsonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora