꧁Cap. 3꧂

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Había pasado una semana desde que Yaoyorozu se había instalado en su nueva residencia y los sucesos extraños que dentro de aquel lugar se manifestaban nunca había cesado desde su tan repentina llegada.

Por ejemplo; en el día, la casa se encontraba tan helada que Momo tenía que usar un suerte de invierno para no morir de frío y en la noche, la casa se encontraba tan caliente que sentía que se encontraba en el mismo infierno además de que cada vez que trataba de tocar un objeto de metal, terminaba con una gran quemadura en alguna parte del cuerpo, lo había comprobado ella misma varias veces. Pero, lo que más la inquietaba era que se sentía constantemente observada en aquella cas y los sueños que tenía con "Shoto" eran tan habituales y realistas que casi juraría que eran verdad, pero, cuando trataba de definir como era la bestia, su mente se encontraba completamente borrosa, incapaz de recordar su aspecto.

Aquello no paraba de frustrarla, ya que su mente parecía bloquear aquello que quería recordar con tanta insistencia, haciendo no más que desanimar a Yaoyorozu quien se encontraba tendida sobre su cama con un cobertor más grueso de lo usual sobre ella. Hoy, extrañamente, hacía más frío que nunca y por nada quería abandonar su cama a media noche para ir a prender la calefacción. 

El frío era tan intenso que no le dejaba conciliar el sueño y comenzaba a tener escalofrío por la falta de calor haciendo que comenzara a temblar levemente. Pero, de pronto, oyó algo que se movía a los pies de la cama y cuando bajo la vista al suelo, grande fue su sorpresa al divisar al zorro que hace unos días había visto sentado al pie de su cama, analizandola en silencio con sus grandes ojos color negro que brillaban en la oscuridad de la habitación.

Momo se quedó sorprendida al ver al zorro dentro de su habitación y de inmediato se comenzó a preguntar cómo había logrado entrar aquella criatura si la puerta que daba al jardín estaba cerrada con seguro y ella se había asegurado de eso, pero, mientras su mente divagaba con preguntas irrelevantes, el zorro corrió hacia la puerta y comenzó a rasguñarla diciéndole con aquella acción que quería salir de la habitación.

Al entender lo que la criatura quería, la joven no tuvo más opción que levantarse de la cama, colocarse un gruesa chamarra encima e ir abrir la puerta al animal de pelaje blanco. Apenas la abrió, el zorro corrió por el pasillo hacia las escaleras que daban a la planta baja dejándola atrás en el proceso, pero, antes que bajase por ellas, el zorro se giró hacia ella y dijo con su mirada oscura que la siguiera, casi como un susurro silenciosos en medio de la oscuridad de la noche.

Cuando Momo vio los hermosos ojos negros de la criatura, entendió el mensaje que ella le daba y saliendo de su habitación, siguió al zorro escaleras abajo hasta finalmente salir por la puerta de la cocina que daba al jardín y, al ver lo que la criatura le quería mostrar, no podía creer lo que veían sus ojos.

Estaba segura que esto era uno más de sus sueños, pero, podía sentir el frío polar calando sus huesos y la brisa invernal chocando contra su rostro, incluso su aliento se mezclaba con el humo blanco del ambiente haciendo que se confundiera aún más. Si esto en verdad era un sueño, podía asegurar, que no quería despertar.

El basto bosque que le pertenecía a la antigua residencia Todoroki, estaba completamente cubierto de hielo y nieve; los árboles tenían escarcha y hielo sobre sus hojas, el suelo estaba cubierto de una delicada capa de nieve recién caída e incluso el caer de unos pocos copos de nieve que se movía con suavidad en el aire, no se hacía faltar en aquel paisaje invernal.

Era... Era el paisaje más hermoso que Momo había visto nunca y no podía apartar su vista de él ignorando por completo el frío que entraba en su cuerpo y congelaba su sangre lentamente robandole el calor.

—Creí... que era una bonita carta de presentación para por fin conocernos, Yaoyorozu— al escuchar aquella voz, Momo giró su vista lentamente con espantó y al encontrarse nuevamente con la silueta de la bestia que había estado merodeando sus sueños desde que había llegado a este lugar tan extraño para ella, retrocedió espantada hasta chocar con una de las sillas del porche donde se encontraba.

"轟" (Shoto) La Bestia de Hielo y Fuego (Todomomo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora