Sipnosis

3 1 0
                                    

Es curioso, el sonido de las olas. Se mueven a un compás y en tanta armonía, a veces envidiaba al mar. Llámenme loca, pero quería sentir esa paz que me provocaba estar con mi shorts, mi diario y el mar siempre.
A veces sentía que me escuchaba, sentía como podía llevarse todo lo que podía sentir, llevarse todo aquello que podía doler.
Pero no siempre el mar podía sanar mis heridas, a veces es duro tener que enfrentar la vida cuando no tienes fuerzas ni siquiera para respirar.
Me gustaba escribir sintiendo la brisa del océano. Dejándome llevar por mis ideas, sueños, ilusiones y tristezas.
La vida era buena, yo lo sabía, pero el dolor es inevitable.
Lo amaba, pero era tiempo de que las olas se lo llevaran.
Jonh era complicado, era una ráfaga de viento en mis aguas calmadas, un color intenso, un trago que a veces sabía amargo pero a su vez tan dulce, el simplemente fue el.
Y se llevó una gran parte de mi.
En ocasiones la vida te sorprende, dándote esperanza, para luego arrebatarte todo tan bruscamente, solo para que aprendas a caminar otra vez.
Jonh fue simplemente un sueño en mi vida, pero como todo sueño en algún momento debía de cumplirse o de irse, pero no podía, no estaba lista para que las olas me obligaran a decir adiós.

Y lo hice, lo dejé ir.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Nov 12 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Las olas me obligaron a decirte adiós Donde viven las historias. Descúbrelo ahora