#2 Una escuela de locos

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Sophie

Me preguntaba si mi nueva escuela sería tan rara como decía la gente.

La verdad es que no tenía mucha fé en que fuera así, desde fuera es muy normal. Es un gran edificio blanco con muchas ventanas enormes, rodeado de una gran verja como de tres metros de altura.

La verdad es que si que parecía una cárcel. Debería darle una oportunidad ¿No?

Quiero decir, he estado en muchas escuelas antes, y estoy acostumbrada a dejar atrás todo, pero... Tengo un mal presentimiento.

Estoy parada en frente del portal de la escuela sosteniendo mi mochila con las dos manos, ahí observando la enorme verja. Todo el mundo empieza a entrar mientras yo estoy de pie, quieta mirándolo todo.

Me describo como una chica bastante observadora, pero esta vez sí estaba embobada.

Nunca me ha afectado no tener amigos ni celebrar todos mis cumpleaños sola, supongo que será costumbre.

Algo en mi cabeza hace click y vuelvo a la realidad , y es que estaba en medio de la carretera bloqueando el paso a todos los coches -¡Joder,ya me quito!- grité al coche parado en frente mía.

Realmente tengo miedo y cuando tengo miedo me pongo muy... Borde.

Por lo menos lo reconozco, creo que tiene algo que ver con que soy escorpio. Cosas mías.

Mis piernas están caminando demasiado rápido, me ace rco cada vez más a la entrada y me aterra de una forma impresionante.

Puedo escuchar a dos chicos detrás de mí como hablan de... Si estoy escuchando bien están hablando de ¡¿Pantuflas!?

Quiero girar la cabeza, soy demasiado curiosa pero lucho por no hacerlo, quedaría muy descarada.

Mientras ando y me adentro en los largos y profundos pasillos, estoy atenta a la conversación

-Dios mío que fucking vergüenza, bro- decía uno -Espero ser invisible por hoy-
-Tranquilo, no creo que se te acerquen muchas chicas- respondió el otro

Yo solté una pequeña carcajada, cuando me pongo nerviosa me río y NO es algo de lo que esté orgullosa.

¡Oh dios la e vuelto a cagar! Ellos se callaron después de haberme escuchado reír, creo que han notado que los escuchaba.

No quiero quedar mal el primer día, o yo soy muy patética o está escuela es de locos.

Me muero de la vergüenza, mis piernas están empezando a temblar y noto como si el espacio tiempo se congelara. Estoy de espalda a los chicos que escuchaba hablar y puedo notar como me están deborando con la mirada, no se qué hacer ¿Debería darme la vuelta y disculparme? ¿O quizás presentarme? No sé, puede que empezar a hacer amigos no esté mal. No tendría que sentarme sola en el almuerzo ni ser la última a la que elijan cuando se hagan grupos de E.F.

Me lleno de valor y me giro lentamente dejando a los chicos verme con claridad. Dibujo una sonrisa un poco forzada en mi rostro, pero se desvanece cuando lo veo... Un chico alto rubio con el pelo rizado y los ojos de un tono café claro que te hipnotizan, estaba embobada en mi burbuja, contemplándolo de arriba a bajo durante segundos que para mí fueron años ¿Estaba siendo una descarada? Sip ¿Me importa? En lo absoluto.

-Eo! Eo!!- suenan unas voces en mi cabeza, como una especie de eco -¡Chica despierta!-. Dejo de mirar aquel monumento y sacudo la cabeza para volver al mundo real, tierra llamando a Sophie. Giro la cabeza y miro al chico que está a su lado, es moreno y tiene algunas pecas, pero nada comparado.

- Em... Hola, me...- vuelvo a mirar a aquel monumento y me quedo pillada, se me traban las palabras, siento mi estómago revolverse y mi corazón se me va a salir del pecho en cualquier instante mientras me vuelvo a perder en los ojos del chico.

-Ajá, te... ¿Qué?- pregunta el rubio confuso -Yo... Me llamo Phosie, Rossy... ¡Sophie!- Estaba tan nerviosa que las palabras no pasaban por mi cerebro antes de articular.

-Pues mucho gusto Phosie Rossy Sophie - Noto arder mis mejillas, a puesto a que estaba como un tomate. Me aclaro la garganta e intento sonar más segura.

-Sophie, me llamo Sophie ¿Vosotros sois?- intento sonar sería pero la rojez de mi cara me lo impide.

-Yo soy Noah, y el Mark- dijo el chico moreno señalando a su amigo, "Mark" me encanta como suena.

Un silencio incómodo invade la escena un par de segundos hasta que me acuerdo de porqué estoy ahora mismo en esa situación y mis ojos bajan a los pies de Mark.

Mark

Creo que me he enamorado

Estoy con Noah en frente de una chica con el pelo ondulado castaño y ojos de un tono miel, o verde, son un poco confusos pero preciosos.

Puedo notar que está nerviosa muy avergonzada, y sus mejillas están muy rojas.

El momento se inunda con un silencio incomodo después de habernos presentado, y creo que la estoy observando muy fijamente ¡Mierda! Creo que la incomodé porque desvía su mirada hacia abajo ¡Oh no, mis pantuflas!

Me sorprende ver cómo al bajar la cabeza se le iluminan los ojos y empieza a reír, su risa es la más melódica y adictiva que he escuchado nunca , ahora soy yo es que está rojo. Noah rompe el silencio ¡Gracias a Dios!

-¿A que curso vas?- la chica responde -Pues voy a empezar 4º de ESO- Mi cara se ilumina y mi impulsividad me puede -Nosotros también! Puede que nos toque alguna clase juntos- le regaló una sonrisa amable y después miro a Noah, parece confuso pero su mirada es divertida.

Suena el timbre de primera hora y cada uno se tiene que ir a su clase. Los tres alzamos la mano despidiéndonos, y nos alejamos dándonos la espalda.

Entre los gritos de la gente de los pasillos y todo el ruido Noah dice algo mientras me da dos codazos en el costado - Bro la tienes hechísima- Le miró con cara de pocos amigos -¿Otra vez con eso? Callate!- .

Este va a ser un año muuuy largo.

la hoja en blancoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora