Hunter

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Los últimos meses pasaron tranquilos y sin muchos contra tiempos, habían discutido mas de lo normal pero tampoco en algo que fuera demasiado grave, solamente que su amada no era alguien que le gusta pasar mucho tiempo sin moverse o usar magia (la cual había sido restringida por precaución), entendía bien a la mujer pero no podía hacer mucho, les dos querían que todo saliera bien así que tenían que sacrificarse.

No habían hablado sobre que nombre le pondría, sabían gracias a una de las visitas al aquelarre que el bebé que esperaban era un niño, un sano niño, solo recordarlo le sacaba una sonrisa, esperaba con ansias el día que al fin pueda verlo, y tampoco faltaba demasiado. Eda se encontraba en las ultimas dos semanas, les habían dicho que nacería en la ultima semana de octubre, aproximadamente.

Desde joven se había caracterizado por ser bastante ordenade y organizade así que a Eda no le pareció extraño cuando le observo adentrarse a la habitación que compartían con una lista en mano, tenía varias opciones que le gustaban y decidió que era el momento de elegir un nombre.

Eda le observo atentamente con una sonrisa burlona, sabía que ese tema le había carcomido la cabeza por días y le parecía dulce, pero ella ya había decidido el nombre y nada haría que cambiara de opinión.

-Pero Eda, al menos hablémoslo- refunfuño Raine.

-No gracias, ya tome una decisión, y me merezco esto, yo seré la que estaré horas soportando el dolor mientras tu te quedas a un lado disfrutando el espectáculo- le pincho su nariz con gracia- No voy a discutir esto.-

Raine bufo arrugando su lista, cuando estaba hecha bola la lanzo lejos sin importarle mucho a donde iba a acabar, se recostó sobre las sabanas en el nido y acaricio el ahora redondo estomago de su esposa, sonrió rindiéndose y acepto aquella no muy amable condición. 

-¿Al menos me dirás cual elegiste?- dejo un beso en su mejilla mientras se dedicaba a verla.

Eda se reacomodo mejor y poso su mano sobre la de Raine, acaricio con sus dedos los contrarios mientras se perdía en sus pensamientos, no sabía exactamente por que había elegido ese nombre pero en el fondo de su pecho sintió que era el correcto, hasta cuando lo decía en voz alta su bebé se removía, algo le decía que le gustaba su elección.

-Hunter...Se llamara Hunter-

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Eda quería llorar, le habían dicho que el parto dolería pero no creyó que llegaría a ese punto donde sentía que no podía dar mucho mas de si, su pequeño búho había decido nacer cuatro días antes de lo estimado, y ahora ella se encontraba sola en el aquelarre de curación, Raine había salido en la mañana por una reunión de bardos y se había quedado sola.

Gruño molesta con todo lo que estaba pasando, le habían traído varios de sus elixir ya que con el dolor que le provocaba toda la situación la bestia búho había intentado surgir en mas de una ocasión, no tenía ni idea de donde había sacado la fuerza para luchar contra ella y mantenerla al margen, solo podía pensar en el pequeño ser que estaba a punto de traer al mundo y como no quería que esa fuera su primer impresión de ella, soltó una risa amarga dejándose caer sobre la camilla en la que se encontraba recostada.

No faltaba mucho para que un doctor entrara por la puerta y le confirmara que ya era hora, y deseaba con todo su ser que eso pasara pronto, pensó en Raine nueva mente y arrugo el entrecejo con un deje de tristeza, realmente se iba a perder eso.

La familia búhoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora