—Te odio —dijo el castaño antes de salir de la habitación del pelirrojo. Estaba molesto, sí, pero también confundido. El alfa volvió a su recámara desconcertado por lo que había dicho y sin entender lo que estaba pasando. ¿Por qué se había sentido atraído por el aroma del otro alfa?, ¿Acaso eso era normal?
Y por más que intentara, por más que no quisiera, no podía dejar de pensar en el pelirrojo; aun cuando después de varios intentos, logro conciliar el sueño, el pelirrojo como un invasor se metió en ellos: ambos estaban cerca del río, paseando y mirando con calma la corriente, todo era sólo paz. Taehyung se acercó cada vez más al pelirrojo, acarició su cabello con su mano y hundió su nariz en él, encantando por el olor que desprendía e hizo un recorrido bajando por el cuello. Hoseok no se apartaba, permitía que Taehyung hiciera con él lo que quisiera y pronto sus labios se tocaron en un suave roce hasta que el castaño profundizó el beso y... Despertó.
Salió corriendo de su cama y corrió al baño. Ansioso empezó a quitarse la ropa y cuando estuvo desnudo, se metió a la regadera dejando que el agua enfriara por completo su cuerpo. No pudo dormir después de eso: tenía miedo. Miedo, porque Hoseok le estaba haciendo sentir algo que no podía ser posible, desde el momento en que apareció en su vida se descubrió así mismo imposibilitado para apartar la mirada del alfa pelirrojo, poco quería admitir, que Jimin se estaba volviendo sólo un pretexto para sus actos sin sentido. El mismo miedo de Hoseok, miedo de lo que Taehyung le hacía sentir.
Kim de nuevo se encontraba siguiendo a la pareja y se reprendía así mismo cuando sus ojos no seguían a Jimin, cuando sus ojos se perdían mirando a Hoseok; cuando se perdían en su bonita sonrisa, en lo alegre y positivo de su personalidad, se distraía con su figura esbelta y atlética o en sus pasos cuando danzaba.
Entonces hubo un momento en donde Hoseok se atrevió a besar el cuello de Jimin. Pero la mirada de Hoseok se encontró con la de Kim y su cuerpo volvió a calentarse. Park lejano a ello correspondía a Jung, acariciando y besando también el cuello del alfa de forma nerviosa. La mente del omega se llenó de pensamientos que lo obligaban a corresponder, aunque se sentía terriblemente inquieto, corresponder era su deber.
El cuerpo de Hoseok se sentía caliente, su cuerpo ardía. Besando al omega mientras tenía la mirada clavada en los ojos de Taehyung y de pronto el cuerpo de Jimin, no era el de Jimin: era el de Taehyung. Se imaginó abrazando y besando al otro alfa. Y volvió en sí, apartó al omega de un empujón, se disculpó con la mirada y salió corriendo.
¿Qué es lo que le estaba pasando?
Hoseok iba de un lado a otro en la habitación, estaba claro, tenía que hacer algo. Ya no soportaba la presencia de Taehyung. Sentía que se asfixiaba, su cuerpo actuaba de forma extraña y no quería seguir pasando por eso.
Más tarde cuando se encontraron en el comedor de nuevo había un ambiente tenso, sólo se oía el sonido de los cubiertos al ser chocados.
—Quiero adelantar la boda —soltó Hoseok en medio de la cena, sorprendiendo a los demás.
Un fuerte golpe se escucho. Taehyung había golpeado la mesa con su puño.
—Es una broma ¿verdad? —dijo furioso.
—No, no lo es, me voy a casar mañana con Jimin.
—¿Pero y tus padres?, Tenemos que esperarlos —aclaró Wonho, sin estar de acuerdo.
—No, no los voy a esperar, nos casaremos mañana.
—Ni siquiera has explicado las razones por las que te quieres casar antes.
—Por que sí —respondió de mal humor—. No tengo que dar explicaciones a nadie.
Jimin por su parte, estaba tieso como una estatua, sin palabras, sabía que iba a casarse tarde o temprano pero no se había tomado el tiempo suficiente para procesarlo; además había sentido el evidente rechazo de Hoseok en la tarde cuando lo estaba besando: no tenían química. Jamás pensó en que el alfa adelantaría la boda.
Miro a Hoseok quien tenía el semblante frío y decidido. Por primera vez estaba sintiendo su poder de alfa; el pelirrojo no daba señal de duda, ni de que cambiaría de opinión. Estaba usando su autoridad de alfa líder y cuando miro a su propio líder, Wonho, no vio signos de que quisiera llevarle la contraria al alfa más joven.
—De acuerdo. Si así lo has decidido, no hay nada que yo pueda hacer.
—No puedes permitir esto padre —exclamo Taehyung molesto. Antes de que alguien más dijera algo, Jimin salió corriendo y Taehyung fue detrás de él.
El castaño estaba teniendo lo que parecía ser un ataca de nervios. Se encerró en el baño y devolvió el estómago una y otra vez, cada que pensaba que ya había terminado, las arcadas volvían. Taehyung palmeaba su espalda tratando de reconfortarlo, cuando pareció terminar el omega abrazó al menor con fuerza con lagrimas en los ojos.
—No quiero casarme —dijo sin dejar de lagrimear—. ¡No quiero casarme Taehyung!, ¡No quiero!
Jimin se veía tan frágil, tan pequeño y tan indefenso que Taehyung quería ponerlo en una esfera de cristal para que nunca nada lo dañara. Kim recordaba sus días de infancia con Jimin, aquellos días donde jugaban y donde Taehyung siempre rescataba a Jimin.
"Yo siempre seré tu héroe"
—Haz algo Taehyung.
—Lo haré Jimin. Te lo prometo, al menos tú debes ser feliz.
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Ambivalente
FantasyLos sentimientos de Kim Taehyung, hacia el alfa de la manada vecina, Jung Hoseok, son demasiado ambivalentes. Su madre estaba segura que había nacido para lograr grandes cosas, pero él no podía siquiera darle un significado a lo que le provocaba Ju...