Te levantas una mañana te miras al espejo y te vistes, ves como se van curando poco a poco tus brazos, ves como van cicatrizando las heridas de las piernas ya que leíste que son las que más tardas en cicatrizar.
Te vistes y vas de camino al instituto como de costumbre sin haber comido nada, te sientes débil, no puedes con el peso de la mochila en tu espalda pero no te preocupa ya que eso es una rutina, te cuesta mover el pie para caminar te sientas en un banco que está a pocos paso de ti.
Se acercan el grupo chicos populares de tu instituto, intentas mejorar tu cara ,peinándote ,pero te das cuenta que esa palidez nunca se va a quitar hasta que no empieces a comer.
Se acercan a ti y uno dice:
-Mira este saco de huesos, eso solo se lo comería mi perro-dijo Martin que era el chico que en ese momento me gustaba.
Todos le rieron al unísono, se alejaron unos pasos.
Yo iba vestida con el uniforme del colegio que costaba de :una falsa de cuatros horrorosa, un jersey que te notaban las curvas pero en mi caso eran los huesos y un polo con el escude del asqueroso instituto colocado a la derecha junto en el pecho.
Mi jersey era tan largo que me podía tapar cada una de mis cicatrices que tenía desde la muñeca hasta el antebrazo parque ninguno se dieran cuenta de nada de lo que pasaba, cuando Martin y su grupo de amigos se alejaron metí mi mano en mi chaqueta y del bolso y saque a mi mejor amiga, si puede parecer absurdo, pero la cuchilla era mi mejor amiga, me arremangue la manga hasta el extremo de ver que una cicatriz había desaparecido y fue hay en ese momento me pase la cuchilla por el brazo sintiendo un cosquilleo de placer, ese cosquilleo que dicen sentir cuando estas enamorada ,pus ese mismo pero en forma de placer.
Volví a guardar la cuchilla de conde la había cogido y más tarde a cambiar para el instituto.
Llegue la última lo que provoco que te tuviera que sentar atrás en la clase, la clase era de color azul celeste, pero para mí me parecía feísimo ere color.
Mi primera clase era Matemáticas, la pase entretenida pirando mi estuche y dibujando en mi cuaderno, la segunda era Humanidades nos tocaba ponernos en parejas y la profesora Mónica hacia las parejas, yo como no había hablado con ninguno de la clase pensé que me tocaría hacerle sola.
Empezó diciendo: Camila (era guapa, alta, con unos ojos azules intenso que a todos los chicos les tenia locos) y Matías, en ese instante note como mi mundo de derrumbaba mi posibilidad de formar un equipo y mantener con versación con Matías se había desvanecido. Solo quedábamos por emparejas: Pablo(era un chico alto de pelo oscuro y ojos verdes),María(una chica de las populares con Mónica ),Lorenzo(que era un chico cuidadoso con su aspecto decían las malas lenguas que si era gay pero nunca lo afirmo ni lo negó) y yo.
Al final dijo lo siguientes: Esta actividad aparte de enseñar y buscar información sobre diferentes aspectos es para hacer nuevas amistades así que las ultimas parejas serán: Pablo y Laura en ese momento, en el momento en el que oí a la profe escuchar mi nombre no me lo podía creer era verdad, así que María y Lorenzo les tendía que hacer juntos.
Quedaba 15 minutos escasos para que se acabara la clase y Pablo se acerco a mí para saber sobre que íbamos a buscar información y dijo:
-Hola, soy Pablo me ha tocado contigo hacer este trabajo asqueroso, ¿de qué le vamos a hacer?
Me salió una pequeña sonrisita al oír que le gustaba tan poco la clase como a mí y dije: no se yo había pensado que de las nuevas tecnologías, ¿te parece bien?
-Claro, mientras que lo hagamos juntos, oye me podías dar tu número de teléfono para quedar algún día y hacerle o buscar información
-Claro apunta....680204268-dije con una sonrisa de oreja a oreja...
