uno.

40 5 7
                                    

"Pensé mucho últimamente en nuestra historia ¿Recuerdas? Solía ignorarte  tu solo querías acercarte a mí, sin embargo, me gustaba que te acercaras. Pero ninguno de los dos dos imaginó que las cosas terminarían así Honnie. Aquí es donde empieza nuestra historia de amor."

El interminable sonido de la alarma mañanera despierta a jisung de su relajante sueño. Despega uno de sus ojos, mirando a su al rededor, recordando que estaba en su cuarto.

Comienza a tantanear con su mano la madera de su mesa de noche buscando la pantalla del celular para apagar el ruido que tanto lo molestaba. Cuando porfin lo logró vuelve a cerrar sus ojos soltando un gran suspiro de alivio.

Se quedó hasta tarde, terminado un proyecto de química que debía entregar para la próxima semana, y ahora estaba remiso de despegar su cuerpo de la suave y calentita cama, demás estaba decir que no quería ir al colegio esta mañana.

Jisung se esconde bajo su almohada al escuchar su segunda alarma que indicaba la hora de su desayuno. Él era una persona bastante organizada, tenía una alarma para cada actividad de su semana, le gustaba que cada objeto tuviera un lugar, y cada lugar un objeto, más bien que organizado, era muy perfeccionista.

Colocó su uniforme escolar tendido en
las blancas sábanas, y se dirigió al baño para darse un rápido baño, estaba con el tiempo justo.

Al terminar, baja las escaleras con su
mochila colgada en su hombro derecho, encontrándose a su hermano con un delantal color rosado pastel atado en su cintura, cocinando lo que parecia ser hotcakes, por toda la mezcla que había en la encimera de la cocina, además de también harina dispersada por surostro. Todo eso causó una pequeña risa en el menor, casi inaudible.

-Buenos días. —habló el mayor—
¿Quieres un hotcakes? Los hice
especialmente para ti.

Jisung asintió sólo una vez, y
su hermano Chan lo entendió
perfectamente. Le sirvió en su plato dos hotcakes y en un vaso de vidrio puso leche fresca con algo de azúcar para su hermano.

-Hay un tazón de fresas en la nevera si
quieres acompañar.

Y eso bastó para que Jisung se
levantara de su asiento de un salto,
llendo con felicidad a la nevera,
sacando de esta las frutas rojas que
Chan había nombrado.

Desayunó con tranquilidad al saber
que aún tenía tiempo para llegar
temprano a la escuela, antes de que sus compañeros.

Dejó el tazón vacío, Jisung amaba las
fresas, lo hacían tranquilizarse de algún modo.

Revisó su mochila, cuadermos, libros,
estuche, almuerzo, celular, block de
notas, sí, estaba todo lo que necesitaba.

Chan esperaba a su hermanito ya
dentro del auto, mientras que Jisung
se aseguraba de cerrar la puerta
de la casa con doble llave, siempre checaba el pomo dieciséis veces porque presentía que no había cerrado bien.

Cuando por fin terminó, subió al auto,
chocando con la mirada desaprobatoria del mayor. Jisung solamente se encogió de hombros, y continuó mirando por la ventana del auto en movimiento.

Durante todo el viaje en auto, Jisung
se la pasó pellizcando las yemas de
sus dedos con las pocas uñas que le
quedaban, por pura ansiedad.
Sentía recorrer la sangre por la palma de su mano, pero para él no era muy grave.
Arrugó la nariz cuando una pellizca fue muy fuerte, soltó un quejido.
Chan se percató de lo que hacía su
hermano, pero no dijo nada porque
no quería hacerlo molestar. Suspiró
pesadamente mirando de reojo a
Jisung.

Estacionaron en auto en la entrada de
el instituto, esperando a que el reloj
marcara las seis en punto, y cuando lo
hizo, el menor abrió la puerta.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jul 20 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Anxiety | MinSung [PAUSADA ‼️] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora