BELLUCCI, REENCARNACIÓN ITALIANA (LIBRO 1)

C.19 CUMPLIRÉ MI PROMESA

Richard Montalbán...

Aunque me dijeron dónde estaba no quise perturbarla, con que se sintiera tranquila era suficiente. El reporte decía que había pasado dos días en la casa de Dante y que en todo momento estuvo acompañada de Gianluca Bellucci.

Estaba en espera de Tony, me interesaba que me corroborara o negara la identidad de ese chico. Apenas me dijeron había llegado lo hice pasar.

- Centré la investigación en el menor de los Bellucci. Costo encontrar su partida de nacimiento. Su nombre completo es Gianni Fabrizio Bellucci Martinelli, acaba de cumplir 30 años.

- ¿Gianni? ¿Gianluca? – susurré, era demasiada coincidencia.

- No hay registro de su entrada a Estambul, los turcos no saben su paradero. Contacté a un amigo que trabaja para el aeropuerto de Los Ángeles, le pedí buscara alguna llegada de Gianluca o de Gianni a esta ciudad.

- ¿Y?

- Gianluca nunca llegó, pero Gianni Fabrizio sí. Viajó en un jet privado desde Milán, el nombre del piloto que lo trajo es Donato Grimaldi, casualmente concuño de Alessandro Bellucci junior.

Reí, era un hecho que Gianni y Gianluca eran la misma persona. Aunque no entendía como dio con Anhya.

- Dijo conocerla hace un año ¿Dónde la vio?

- Hace casi un año viajamos a Europa por la promoción de "Sari", una de las ciudades donde se promocionó fue Milán. De hecho, la producción completa asistió a un evento privado en Como, cortesía de empresarios locales. Recuerdo que era una fiesta muy concurrida, pero nadie tenía el apellido Bellucci.

- Tuvo que haber estado ahí. La encontró, después de tantos años volvió por ella.

- Hablas como si Anhya fuera Regina y no lo es.

- Gianni tampoco es Renzo y mira donde está. Ha jugado el papel de productor cuando te apuesto mi vida que no tiene la menor idea de que hacer. Se está jugando la vida porque si las familias de Italia saben que no está en Estambul sino aquí con una Montalbán lo verán como traición.

- Y Anhya estará en riesgo si logra conquistarla.

- Conozco a los Bellucci, no hacen nada solos. Son una manada bien agrupada y se cubren unos a otros. Si él llegó hasta aquí, los demás están de acuerdo. Anhya no está ni estará en riesgo, porque desde ya la consideran una de ellos.

_ Sigo teniendo mis reservas respecto a ese hombre. Su historial antes de llegar aquí no es tan bueno.

_ ¿Por qué lo dices?

_ Es considerado la oveja negra de la familia. Rebelde, osado y problemático, así lo consideran.

Reí, me estaba describiendo a Renzo.

_ Esos defectos lo trajeron hasta aquí, pero esos mismos defectos lo harán proteger lo que quiere. Confía en mi instinto, cambiará para bien.

(...)

Ahora estaba con los abogados en plena cesión de acciones, con Bruno presente porque a pesar de todo él no tenía la culpa de tener un primo idiota.

- Hará falta la firma de la señorita Montalbán para finalizar el trámite, pero desde hoy el licenciado Bruno Hayes puede manejar la dirección de su porcentaje.

- Esta bien. Toma posesión de esta oficina, Sofia es una excelente secretaria y conoce cada pendiente relacionado con la empresa. No me quedaré un minuto más – asintió.

Quería dejar de escuchar los cuchicheos cada vez que me veían. Mi nieta se convirtió en la comidilla del día. De alguna manera todos los empleados se enteraron de lo ocurrido en el piso 14.