¿Qué es lo mejor después de un largo viernes repleto de exámenes y clases aburridas? Disfrutar con tus amigas.
Me encontraba en mi habitación quitándome el absurdo y apagado uniforme del instituto, para ponerme unos vaqueros muy ajustados con un jersey azul marino. Me paso todos los días vistiendo ese horrible uniforme, los viernes son mi escapatoria.
Esa noche íbamos a hacer una fiesta de pijamas, al igual que cada viernes. Yo me tenía que encargar de comprar helados y algunas bebidas.
Cuando terminé de vestirme me coloqué un poco de colonia, cogí mi móvil, mis llaves, mi saco de dormir con mi pijama y mi monedero. Al cogerlo todo, salí de mi habitación encontrándome a mi hermano con su sonrisa de idiota presente.
- ¿A dónde vas Nicole? - me preguntó con diversión y se hizo el pensativo. - Oh... Olvidaba que todos los viernes hacéis una absurda fiesta de pijamas.
- ¿Qué quieres imbécil? - espeté enfadada, él siempre lograba sacarme de mis casillas.
- ¿Y por qué no habéis hecho hoy la fiesta aquí? Tu amiga está bue...
- Cállate, asqueroso - le interrumpí poniendo una mueca de asco.
- Es broma, las mocosas de tus amigas no son mi tipo - se burló y desapareció de mi camino.
Bueno, os presento a mi hermano Nash Dallas, tiene 18, dos años más que yo. Es un completo idiota al cuál le encanta hacerme rabiar, pero lo más gracioso es que siempre está bromeando cuando habla sobre chicas y nunca ha tenido novia. Tiene su perspectiva de encontrar a la "chica perfecta". Lo que yo digo, es un idiota.
Bajé las escaleras y cuando estaba a punto de salir, mi madre me preguntó que a dónde iba.
- A casa de Susan, mamá - le contesté.
- Ah, pasadlo bien cariño - se despidió y le sonreí antes de irme.
Comencé a andar hacia la tienda más cercana para comprar los helados, estaba ansiosa porque llegara la noche. Nuestras fiestas de pijamas siempre eran geniales.
***
Me encontraba a punto de llamar al timbre cuando fui interrumpida, ya que la puerta se abrió.
- ¡Nikkiii! - Susan, o como nosotras la llamábamos Susy, me estrechó con fuerza entre sus brazos.
- Vaya, por lo que veo tenías ganas de que llegara - bromeé divertida.
- Eso siempre - me guiñó un ojo y se hizo a un lado. - Vamos, pasa. Tessa nos está esperando.
Theresa Horan era mi otra mejor amiga, las tres éramos inseparables, desde pequeñas.
Me adentré a la acogedora casa de Susy y la seguí por las escaleras.
- ¿Y tus padres? - le cuestioné mientras subíamos los escalones.
- No están, tenían una cena por su aniversario - contestó con aire orgulloso.
- Oh, me alegro por ellos - la felicité.
Al llegar arriba, saludé a Tessa la cuál se encontraba hablando por mensajes con su novio, Henry. Estaban tan enamorados que te empalagabas de tanto amor.
- Ya hasta me abandonas por tu novio - le dije de broma haciendo pucheros.
Tessa al verme sonrió de oreja a oreja y dejó su teléfono a un lado.
- Sabes que te quiero mucho - dijo poniendo una pose romántica.
- Sí, seguro... Voy a ponerme el pijama, ahora vuelvo - les informé al ver que las dos tenían puestos sus pijamas.
Cuando terminé de ponerme mi cómodo y calentito pijama salí del baño. Mis dos amigas locas estaban saltando en la cama haciendo una "guerra de almohadas".
- ¿¡Qué os creéis que hacéis!? - exclamé haciéndome la enfadada y ellas se detuvieron mirándome asustadas. - ¿Estábais haciendo una guerra de almohadas sin mi?
Ellas rieron a carcajadas y me lanzaron una almohada para que pudiera unirme a ellas.
Cuando nos cansamos de saltar como endemoniadas, nos sentamos y Tessa volvió a coger su móvil.
- Deja de hablar con Henry - Le dije finjiendo estar molesta.
- No estoy hablando con... - La miré enarcando una ceja - Vale, si estoy hablando con Henry.Me hizo mucha gracia lo que causó que las tres riéramos.
- ¿Os habéis enterado de que Shane ha roto con Jennifer? - Preguntó Susan con una sonrisa maliciosa.
- ¿En serio? ¡Pero si eran la pareja más popular del instituto! - Exclamé sorprendida.
- También dicen que le ha engañado con otro y me han dicho que está embarazada. Aunque mucho no me lo creo - Informó Tessa quitando la vista de su móvil.
- ¡Perra! - Exclamamos las tres a la vez causando que estallaramos en carcajadas.
Nos entró hambre y qué mejor que acompañar la comida con una película.
- ¿Qué tal si vemos una película? - Propuse.
- ¿De terror? - Preguntó Susan emocionada.
Iba a responder cuando de repente nos sonó el móvil a las tres. Nos miramos extrañadas al ver que teníamos el mismo el mensaje.
*Número Desconocido: La película no será lo que os de terror esta noche.
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PACTO DE TRES
Teen FictionUna noche, Susan, Nicole y Theressa deciden hacer una fiesta de pijamas al igual que todos los fines de semana. Pero esa noche fue diferente a las demás. Un mensaje lo cambió todo.