OCEAN

CAPÍTULO 33 "NO ES TU MOMENTO"

Norman y nuestros padres se exsaltaron y intentaron acercarse,  pero Emily retrocedió.

-¡Atrás!. -Advirtió. -Si dan un paso más la mató.

Emily retrocedió y sintió el borde y sonrió.

-Si yo no te puedo tener. -Dijo mirando a Norman. -Nadie lo hará.

Mordí a Emily con fuerza y logre que me soltara entonces intente correr, pero me tomó del cabello y me jalo, me safe del su agarre y se tambaleó, entonces tiro del gatillo y cayó hacía atrás, al vacío.
Yo recibí el disparo en el hombro y me tambale también, pero Norman me tomó con fuerza y logró que no cayera.

Comence a sangrar y me asuste.

-Caroline, tranquila, tranquila, tranquila. -Dijo papá nervioso.

Norman me tomo en sus brazos y me subió al auto, todos subieron y nos fuimos rápidamente de ahí.

Al llegar al hospital yo sentía que ya no podría más, todo me daba vueltas y mi vista se nubló.

-Mi amor, por favor... No me dejes, no nos dejes. -Dijo Norman tomando mi mano.

Los doctores me llevaron a la sala de emergencias y sólo veía como el techo giraba, escuchaba a los doctores hablar y pedir cosas alterados.

En menos de nada mi vista se nubló más y me quedé... Dormida.

Narra Norman
No habían pasado ni dos horas de que habíamos llegado y el doctor vino con nosotros, con una cara de tristeza.
Al verlo corrí a con él.

-Lo siento. La bala tocó una arteria y logramos sacarla, pero... Tuvo una emorragia que no pudimos controlar. La señorita Harrison... Acaba de fallecer.

-¡No!. -Grito Sam.

Al oír eso, sentí que mi mundo se vino abajo y caí al suelo, no podía creer lo que había pasado, estaba en shock.

Narra Carloine
Desperté en un cuarto blanco, muy iluminado, se veía muy bonito y me sentía con una paz inmensa en mí.

-Caroline. -Dijo alguien detrás de mí.

Me gire y vi a una persona que no había visto en años, mi mamá.

Al verla sonreí y corrí a abrazarla. Me sentía tan bien de poder volver a abrazarla de nuevo.

-¿Dónde estamos? ¿Estoy soñando?. -Pregunté mirándola fijamente.

-No hija... Acabas de morir y es momento de irnos.

-¿Qué?. -Frunci el ceño.

-Si. -Sonrió y acarició mi cabello.

Mamá me tomó de la mano y me llevó a un lugar. Era mi cuarto de hospital, me vi acostada en la camilla y estaba Norman, mi padre y Joe al borde de mi cama, llorando desconsoladamente.

-¿Por qué me haces esto, Caroline?. -Preguntó papá desesperado.

Norman se veía destrozado, estaba sentado en el piso y con sus manos en su cabeza, llorando sin control. Mi padre ni se diga, jamás lo había visto tan mal. Algo en mi me hizo sentir muy triste y no quería irme ya de este mundo y dejar a mi familia así, además no me iría sola, me iría con mi hija, que aún no nacía.

-Mamá. -Me gire y la mire fijamente.

-¿Si?.

-Yo te amo... Y espero recordar este momento por siempre, pero no quiero irme aún, no estoy lista para dejar a Norman y para que papá sufra de esta manera, siento que no lo resistiría.

Mamá me miró sorprendida y sólo se digno a sonreír y a darme un abrazo.

-Yo sé que has sufrido demasiado desde que ya no estoy con ustedes... Pero ahora Norman es la calma en tu tormenta y de lo que estoy segura es de que él te ama de verdad. Nunca lo dudes.

Sonreí y la abrace de nuevo.

-Me siento con tanta paz en este momento... Pero sé que no podré descansar en paz, dejando a mi esposo y a mi padre tan pronto. -Dije mirando a Norman y a papá.

-Entonces... No es tu hora...

Cerré los ojos con fuerza y de pronto sentí algo en el pecho y de la nada desperté.
Me sente en la camilla y respire como loca, con complicaciones. Mi padre se exaltó y me vio confundido y solo sonrió al verme.

-¿Qué pasó?. -Pregunté mirando a mi alrededor.

-Lo que pasó es que casi se me va mi vida. -Dijo papá.

Se acercó a mí y me abrazo con mucha fuerza que me dolio el hombro, y me queje.

-Lo siento. -Dijo sonriendo.

-No te preocupes.