Levi's diary

📖VEINTIDÓS PUNTO CINCO📖

✨¡Hola, mis queridas lectoras y lectores!✨
Bueno hoy estamos de gala, pues la novela ha llegado a los 3k de lecturas, estoy muy agradecida por ello. De verdad me alegra que estén disfrutando de este Levi como padre, tanto como yo disfruto escribirlo. Y bueno, para agradecer tanto apoyo, les he preparado un especial: un mini maraton conformado por un cap y un extra  que llamaré "momentos perdidos", los cuales numerare de acuerdo al momento en el que se supone debieron estar durante esta historia. ¡Espero lo disfruten!

Atte: la escritora✨

P. D. : Las notas se moverán al final de la novela al concluir la misma. En el caso de estos caps de "momentos perdidos" se ubicarán en su lugar correspondiente de acuerdo a su número.

Exterior P. O. V.:

En cuanto el pequeño Kai abandono la habitación, Hange no tardó demasiado en acercarse a sus amigos para ponerles su botella especial frente a ellos.

-esta es la misión: terminar con esta y otras dos botellas - soltó la de lentes con maldad.

-esta noche paso - dijo Levi dejándose caer en el sillón.

-ni hablar, un trato es un trato - dijo Hange cruzandose de brazos.

Por trato se refería a aquel que hicieron cuando Levi se había resignado a estar en la legión, es decir, en la siguiente expedición después de la muerte de sus amigos. Siempre y cuando, Levi o Hange quisieran beber, lo harían juntos, ya que además de Ami, eran los únicos en que confiaban.

Levi se quejo chasqueando la lengua ganándose una mirada de recelo de su esposa, la cual voluntariamente tomó un vaso y se sirvió de la botella de Hange.

-por la censura - se aventuró a decir como brindis y luego se llevó su vaso a la boca.

-¡eso es todo, Ami! Demuestra como se hace - la animo Hange maquiavélicamente.

Aquel licor no era uno común, sería perfecto para desarmar a los tortolos y Hange quería hacerlo, porque aunque ellos pensaran que eran demasiado sigilosos, todo el mundo sabía que no habían estado bien durante el día y todo por aquella confesión a medias de los chicos sobre Sasha.

-¿censura? - cuestionó Levi antes de que Hange pudiera intervenir antes de que notará el brindis.

-si, Levi, eso dije - desafío Ami sirviéndose otro trago.

Hange sabía perfectamente que pasaba, pero prefería vivir una vida tranquila antes morir a manos de Levi. Así que lo mejor que se le ocurrió fue servirles tragos, mientas preguntaba inocentemente:

-¿me he perdido de algo?

-no - se adelantó a responder Levi tomando el vaso que ella le ofrecía.

-si - dijo a su vez Ami con molestia.

-suena serio, cuentenle sus problemas a su barista favorita, la simpática Hange - bromeó la de lentes sirviéndoles de nuevo, pues estos al recibir el vaso lo había bebido hasta el fondo.

-pues tu amigo está molesto porque hablaron de Sasha - explicó Ami pese a la mirada furibunda de su esposo.

-no me molesto que lo hablaran, me molesto que no se me consultada nada - se defendió Levi.

Hange asintió dándole a entender que entendía, si su plan salía bien, dos tragos más y ambos estarían lo suficientemente ebrios para que ella interviniera.

-¿qué no se te consultó? ¿Entonces con quien hable hace unos días? - pregunto la madre de Kai cruzandose de brazos.

-lo mencionaste solamente, no acordamos nada y en todo caso, soy el padre de Kai, la decisión de decirle o no era mía - soltó Levi subiendo el tono.

-hablando de Kai, el está allá arriba, recomiendo que bajen la voz - sugirió Hange tan tranquila mientras les pasaba otra ronda.

El matrimonio tomó sus vasos, los bebieron evitando hacer muecas y se miraron mal.

-también es mi hijo, de hecho al ser quien lo parió tengo más derecho que tu - comentó Ami ya sin saber que decía.

-¿más derecho? Yo fui que sugirió hacer una familia - le recordó el ex capitán.

-solo después de años de ignorar lo mucho que te amaba - le reprochó sus esposa.

Hange dejó de servir y se recargo sobre sus brazos divertida por la escena, así era siempre: comenzaban peleando por una cosa y terminaban reclamandose quien amo mas a quien primero. Depende la versión que recordará cada uno en ese momento, era quien ganaba la discusión.

-no lo ignoraba, pero como querías que hiciera algo si tenía que estar matando a personas a cada paso, esa no es la vida que quería vivir contigo... - dato curioso y evidente de Levi: solo cuando bebía podía decir todo lo que pensaba sin quejarse del todo.

-pero esa era nuestra vida, esas ya no eran personas y de cualquier forma, todo acabó, no podemos seguir ocultandolo - le recordó Ami pasando por algo lo evidente.

-mis soldados si eran personas, los titanes eran personas, la gente de Marley lo era... - comentó el único hombre de la habitación.

-Levi, yo más que nadie carga esa misma responsabilidad que tu, pero Ami tiene razón, ¿que ganas ocultandole las cosas a Kai? - intervino por fin la castaña de lentes, cuando Levi no escuchaba a su esposa, la única que podía hacerlo entrar en razón era la primera amiga que tuvo.

-yo tampoco creo que decirle todo sea lo mejor, pero tarde o temprano se enterara, aunque me gustaría que cuando le contemos sea toda la verdad, no a medias como lo hicieron los chicos - comentó Ami lamentándose un poco, comenzaba a recordar a sus amigos, hermanos.

-es verdad, quizá no fue el mejor momento para hablar del tema, pero tarde o temprano lo harán - reconoció Hange.

-Hange, no tienes hijos, no puedes entenderlo - soltó Levi sirviéndose el mismo el siguiente trago, lo bebió y volteo a ver a su amiga - Kai y Ami son todo para mi, vimos como el peso de los recuerdos consumió a Eren y no quiero que eso le pase a mi hijo, se supone que por eso hicimos todo, para que no sufrieran otros... ¿Cómo esperas que acepte poner el peso del pasado sobre mi Kai?

-Levi... - llamo Ami al borde de las lágrimas, acercó la mano a la de su esposo y la sostuvo con ternura - a mi también me duele pensar eso, ¿crees que me gusta verlo despertar a mitad de la noche por las pesadillas? No lo soporto, pero Kai de verdad quiere conocernos, está en su derecho somos sus padres, pero sobre todo, tu más que nadie eres su ejemplo a seguir, no podemos seguir alejandolo...

Hange tomó la botella y se sirvió, necesitaba un trago para no soltarse a llorar con la conmovedora escena. Esos dos siempre le habían causado ternura, porque aunque pasó tiempo antes de que ellos demostrarán su cariño, siempre sabían cómo hacerlo y de alguna forma contagiaban ese sentimiento.

-pero no quiero perderlo, no como a Farlan o Isabel... - susurro Levi, solo con sus esposa mostraba debilidad y solo con Hange presente podía ser así de honesto.

Las dos mujeres solían recordarle que también era humano, que también sentía y que sobre todo, que estaba bien sentirse mal de vez en cuando.

-las cosas son diferentes, pero sobre todo, es nuestro pequeño, jamás lo perderemos... - le respondió Ami con voz reconfortante.

-¡que vivan los novios! - grito Hange ya al borde de las lágrimas por tan emotiva conversación.

La pareja la miró mal, se lo merecía, pero tenía razón, ya había sido suficiente. Era hora de que bebieran enserio y así fue, entre burlas de Hange, las bromas de Ami y la embriaguez de Levi que lo hacía hablar sin parar, la noche paso entre risas y tranquilidad; había sido lo que el matrimonio necesitaba para recuperar el ánimo.