Capítulo 1
Puede que suene cliché, pero soy el típico chico de clase que no ha tenido novia en su vida y no tiene ni idea del amor, ni siquiera me lo he replanteado. Es decir, claro que lo he pensado, pero siento que ahora estoy muy bien. Veo a muchos de mis compañeros sufriendo, llorando y matándose por, ¿amor? Ni siquiera estoy seguro que sepan lo que es.
Hoy fue el último día de clase, y junto a Xenia (Mi mejor amiga), hemos decidido ir a un campamento de verano. Está en un pueblo a las afueras de Barcelona.
-¿Qué tal las notas? - pregunta mi madre.
- Todo bien- respondo.
Mi madre extiende la mano y dice - a ver, dámelas.
Le entrego el sobre de las notas con un poco de tomar, pero sabiendo perfectamente cuál será su reacción.
Mi madre hace una mueca de rabia y me dice:
- ¿Qué es esto? ¿Te pago el instituto para que saques estas notas?
-¡Pero si no he suspendido ninguna!
-¡Eso no tiene nada que ver, has sacado en todo 6 o 5!
-Me he esforzado lo máximo, te lo prometo.
Mi madre estaba roja de la ira y parecía que estaba a punto de estallar.
-¡A este paso acabarás igual que tu padre!
Soy adoptado, cuando nací, al parecer mis padres de origen colombiano conocían a mis padres, ya que mi madre es dueña del hospital Torres. Se pensaron que tendría la mejor vida por el simple de hecho de dejarme en una familia adinerada. Así que a día de hoy estoy viviendo con Daniel y Rocío. Aunque a veces se porten mal conmigo, prefiero llamarles papá y mamá.
Mi padre nunca ha estado conmigo, siempre está en el bar de mi tío y siempre llega a la madrugada borracho con la camisa arrugada y seguramente de haber pasado la noche con alguna mujer.
Mi madre ama mucho a mi padre, pero mi padre no la quiere, mi padre solo la quiere por el dinero, ya que mi madre es dueña del hospital Torres, mi madre lo sabe pero tiene miedo de quedarse sola.
Mi mejor amiga junto a sus padres han sido como mi seguna familia y refugio, y por eso me llevo muchisimo mejor con ellos que con mis padres.
Después de haber estado prácticamente toda la tarde en mi cama, mi madre llama a la puerta de mi habitación.
- Adelante.
Mi madre entra con una mirada que conozco muy bien.
- ¿Quieres cenar? - pregunta con una sonrisa.
Con mi madre todo se soluciona con comida. O al menos es su forma de hacer tregua. Mi madre padece de graves problemas de ira, o bipolaridad diria yo.
- Ahora bajo.- aviso.
Cuando bajo la veo sola en la mesa y me siento delante suya.
- El año que viene me tienes que prometer que sacarás mejores notas.
- Está bien, pero de verdad que me he esforzado- digo frustrado.
- Te creo, pero el próximo año te asignaremos a un profesor de repaso.
- Está bien.
- Te quiero, ¿lo sabes, no?
- Yo también - le dedico una sonrisa.
Me sonríe y seguimos cenando callados.
Acabamos de cenar y rápidamente alisto todo para mañana y caigo en un sueño profundo.
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PD: Todavía te quiero [Escribiendo] ✅
عاطفيةEs Raro ver como tu vida está cambiando por completo y tú no te das ni cuenta de lo que pasa a tu alrededor, simplemente dejas que todo fluya, sin importar las consecuencias de tus actos. Como todos los adultos dicen... Estos jóvenes de ahora... Sí...