18 - FINAL

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Pánico fue lo que sintió el muchacho al despertarse y encontrar que no estabas a su lado.

No tardó ni un segundo en levantarse de la cama y comenzar a buscarte como loco por todas partes.

Pero no había ningún tipo de señal dd que estuvieras allí.

Intentó calmar sus nervios, intentó pensar con claridad.

Cuando hizo eso se dio cuenta de toda tu maldita actuación, habías simulado estar de su lado para que bajara la guardia y así poder irte.

Cómo fue tan estúpido?

Era obvio que ninguna persona aceptaría tan fácilmente aquellas condiciones que conllevaban estar con él.

Pero Tobio realmente pensó que tú si lo entenderias, porque seguía con aquella idea de perfección en ti.

Un ruido fuera de su casa fue lo que llamó su atención, esto fue la perdición para ti.

No tardó un segundo en salir de su casa, aún era de madrugada, fuera había oscuridad, salvo por las luces de la calle, y estaba completamente desolado.

-"Qué haces fuera?..." preguntó a la nada, ya que aún no te veía, pero estaba seguro de que lo oias

Empezó a caminar al rededor de su casa, buscandote.

-"Por qué vas a dejarme ahora? Todo este tiempo que hemos estado juntos... No ha significado nada para ti?"

Escuchaste su voz más cerca, comenzaste a alejarte en silencio lo más que podías.

-"Vas a ser otra de las personas que me darán la espalda?"

Ya estaba demasiado cerca, viste el patio y te metiste rápido en el armario de herramientas, sin cerrar completamente la puerta para no hacer ruido.

-"Eres lo único que tengo... Eres la única que me apoya de manera tan especial... Y sabes que yo soy lo único para ti ahora, no tienes a nadie más"

Tomaste una pala que estaba a tu lado, te hacia sentir más segura tenerla en tu mano por si algo llegaba a ocurrir.

-"POR QUÉ NO RESPONDES NADA?!"

Te asustaste por su repentino cambio de tono, nunca antes lo habías oído tan molesto.

Pero hacías oidos sordos a todo lo que decía, sabías bien que era pura manipulación, y ya estuviste soportando toda tu vida eso de parte de tu madre, no volverias a caer.

-"Te hice algún daño acaso?... Yo no quise... Solo quiero tenerte a mi lado... Me haces sentir feliz..."

Sus palabras eran suaves ahora, pero tu corazón se aceleraba con nervios notando como su voz cada vez se acercaba a donde estabas escondida.

-"Sólo dejame tenerte..."

Cuando dijo aquello abrió la puerta del armario de golpe.

En ese instante por instinto lo golpeaste con la pala que tenías en las manos.

Lo viste caer por el golpe y no tardaste un momento en empezar a correr, solo queriendo huir de allí.

Corriste lo más rápido que podías, no querías ver atrás, no querías retrasarte ni un segundo.

Pero te estabas cansando, aunque el miedo que sentías aun quería que siguiera corriendo.

Decidiste dar un vistazo de reojo y no lo viste detrás de ti.

Muy mala decisión haber quitado los ojos del camino, tropezaste en ese momento cayendo al suelo.

-"No, no, no, ah!" te quejaste cuando intentaste levantarte por un dolor ardiente que sentiste en tu rodilla, la misma se había raspado

Pensaste que no era nada malo hasta que la viste, tenías un trozo de vidrio incrustada en esta, habías caído sobre una botella rota.

Pero el pánico que sentias en ese momento, no te estaba dando tiempo a analizar el dolor, no permitía que tu mente se enfocara en esas cosas, solo querías escapar.

No dudaste un momento más en sacarte aquel trozo de vidrio, al menos 5 cm dentro de tu carne.

Una vez lo sacaste, ibas a cubrir tu rodilla con un trozo de tela de tu misma ropa, pero te patalizaste al ver a la distancia una silueta, que iba corriendo hacia ti.

Te pusiste de pie con rapidez, casi volviendo a caer por el dolor de tu pierna, y empezaste a querer correr de nuevo, pero lo único que podías hacer ahora era ir con una pierna coja.

Escuchabas sus pasos cada vez más cerca, tu corazón latiendo cada vez con mayor rapidez.

Sentiste su brazo rodearte por tu cuello.

-"SUELTAME!!" Gritaste sin dudar y empezaste a moverte "AYUD-"

En ese momento colocó un trapo dentro de tu boca para hacer que te quedaras callada, lo viste con ojos llenos de miedo, desbordandose de lágrimas.

-"Tienes dos opciones... Vas a quedarte conmigo? O no?" preguntó apoyando su rostro en tu hombro

Ni siquiera te moviste, ni hiciste ningún tipo de ruido, solo lo mirabas aterrada.

-"Lo preguntaré de otra manera..." viste el filo de un cuchillo cerca de tu ojo "Quieres vivir o no?"

Lo miraste, y le diste bastantes miradas a tu propia boca, queriendo decirle que para responder, debía quitarte lo que usó para amordazarte.

-"Si se te ocurre gritar... No dudaré en clavar el cuchillo en tu garganta..." dijo tomando la tela y sacandola de tu boca

Empezaste a toser por la liberación, respiraste agitada.

-"Prefiero morirme" dijiste con seguridad

-"Oh... Esta bien" respondió

Pero no te soltó el cuchillo que tenía, simplemente lo pasó a su otra mano, la cual su brazo estaba rodeando tu cuello, dejandolo más cerca el cuchillo de tu rostro.

-"Sabes... Creo que esto es la mayor perfección, no lo crees?"

Preguntó mostrando su antebrazo mientras te observaba.

-"No creo que ninguno vayamos al cielo..." beso tu mejilla

-"No- espera! Tu no-!"

Quisiste detenerlo pero fue demasiado tarde, hizo una gran herida, sin dudar, en su antebrazo. La sangre caía del mismo a mares.

Viste unas luces por ma carretera.

-"AYUDA!! AYUDA!! AYU-" habías empezado a gritar y moviendo tus brazos queriendo llamar su atención

Pero en el último momento, ya no salían palabras de tu boca, en su lugar sólo había sangre.

-"Te lo advertí..." dijo ya con debilidad por la perdida de sangre

Tomó tu cuerpo y lo hizo acostarse en el suelo, el poniendose a tu lado.

Veías a unas personas acercarse, pero no los podías oir a ellos, mientras te ahogabas en tu propia sangre.

-"No hay nada más perfecto... Que la muerte, verdad?" lo oiste a él, volteandolo a ver

Tenía una pequeña sonrisa, y unos ojos llenos de obsesión.

Sentiste sus labios en los tuyos y sus brazos rodearte.

Qué mayor perfección había, que dos amantes muriendo juntos?

Esto a lo típico que llevaba la obsesión.

Si no puedo tenerte, nadie lo hará.

Perfecta obsesión - Lectora x Kageyama (Yandere)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora