Todo lo que no era

Capítulo 3: Los tíos Danna y Joel

Ir a cenar con mis tíos quiere decir que iremos a un buen lugar, quizás un sitio caro, porque conozco sus gustos y son personas que se dan los lujos de vivir bien, después de todo Danna y Joel Hartland son unos exitosos empresarios, ambos son mis tíos porque Danna es hermana de mamá, siempre venía a visitarlos y me quedaba en las vacaciones con ellos. Cuando me bautizaron yo tenía como dos añitos y mis tíos Danna y Joel fueron elegidos por mi mamá para ser mis padrinos también, a ellos les tengo un inmenso aprecio, un cariño inigualable, me han apoyado siempre y han estado muy presente a lo largo de mi vida.

Los padres de Sahara fueron quienes me ayudaron a convencer a Dalyn Lanzer, mi madre, de que me dejara mudarme y vivir con mi prima, porque bueno, mi mamá es un poco sobreprotectora y aunque quizás se niegue a admitirlo la idea de que me fuera de casa le causó mucha nostalgia.

Nate es quien conduce mientras nos dirigimos al restaurante que Sahara indicó, estoy sentada en el asiento del copiloto y mi prima en la parte de atrás del auto, estamos atravesando una zona que se aprecia muy bonita, las luces, edificios y parques dan una impresión agradable de la ciudad, avanzamos unas cuantas calles más hasta dar con nuestro destino, un restaurante de dos plantas con fachada elegante.

Bajamos del auto y un Ballet Parcking se acerca hacía Nate para recibir las llaves, entramos y en la recepción es Sahara quien se encarga de hablar para que nos dirijan a la mesa que compartiremos con mis tíos, nos guían a la segunda planta que es como una especie de balcón que alberga solo dos mesas y en una de ellas se encuentran las personas a las que anhelaba ver y se levantan a penas notan nuestra presencia, soy yo quien corre toda emocionada y se lanza a sus brazos estrechándolos con fuerza, los extrañaba mucho.

-Que alegría verte, preciosa ¿Cómo has estado? -inquiere mi tía Danna

-Más feliz ahora que los veo-respondo y mi tío Joel me da un beso en la mejilla

-Oh, les presento a mi mejor amigo- digo cuando recuerdo que Nate está detrás de mí muy solo porque Sahara está saludando a sus padres -El es Nathan-tomo el brazo de Nate acercándolo.

-Es todo un gusto conocerlos-saluda estrechando la mano de mi tío y después toma la mano de mi tía y deja un beso en el dorso de su mano en un gesto muy caballeroso, mi tío le dirige una mirada un poco dura luego de eso y su esposa solo sonríe encantada.

Nunca había tenido la oportunidad de presentarle a mis tíos a Nate, me alegra que ya esté eso listo. Nos ubicamos en la mesa, Nate y Sahara están a mis lados y mis padrinos en los puestos frente a nosotros.

-¿También saliste de la preparatoria ya? -inquiere mi tío con la mirada fija en Nate quien asiente muy felizmente.

-Sí, Señor-le confirma mi amigo muy amablemente.

-¿Qué tal todo, linda? ¿Qué hicieron ayer? -pregunta mi tía con una mezcla de curiosidad y emoción. La verdad es que mi tía es una mujer muy bonita, Sahara heredó muchos de sus rasgos, como por ejemplo el rostro perfilado, el cabello castaño ondulado y la sonrisa risueña. Mi tía está en sus casi cuarenta años pero se conserva muy bien, nadie creería que tiene la edad que tiene.

Le resumo mi día de ayer omitiendo la parte de su hija yéndose de fiesta porque la verdad no es muy relevante.

-¿Sabes? -empieza Nate-Olvidé decirte que hago aquí-me recuerda y me doy cuenta de que sí, lo olvidé porque había olvidado lo de la cena y subí a vestirme y me distraje, mi sistema de recuerdos es un asco.

-Claro, sí, dime, quiero saber.

-Bueno, adivina quién envío solicitud a Henssi y fue aceptado también-anuncia con entusiasmo y no me lo puedo creer, es maravilloso y me alegro muchísimo por él, tanto que me levanto de mi silla para abrazarlo y el hace lo mismo y juro que suelto un chillido de felicidad, es que, aparte de que es muy bueno para mí significa estaremos juntos en la universidad también, juntos en primaria, secundaria, preparatoria y ahora la universidad.