UNA HISTORIA SIN UN ROMEO (En Proceso)

Capítulo 4.

Christopher.

Conocernos.

No pude conciliar el sueño más de una hora por lo tanto me despierto antes de que la alarma suene y me encamino a la ducha, mientras me baño pienso en que hacer si acceder a lo que me pidió o seguir intentándolo a mi manera ya que mi ego es tan grande que no me permite hacer cosas para que otra persona este feliz, por otro lado ella consigue lo que quiere y yo también entonces es un dar para recibir, ahora la voy a recoger para llevarla a la central.

Espero a que baje con sus llaves hoy opto por un look sencillo con un moño que le recoge todo el pelo, un vestido que a el final que le llega mas arriba de las rodillas, ajustado hasta la cintura los senos le resaltan en ese vestido y se nota que no necesita sostén, hoy opto por el color azul, se da cuenta de que la miro y viene hasta el carro.

-Ahora me acosa Coronel Dice ella- Si quiere lo que me dijo ya le dije que...

-Si ya se, solo vine para llevarte a la central- La interrumpo.

-Okey- Se sube a el auto.

Arranco rumbo a la central.

-Y ¿Qué decidiste de lo que te dije anoche?

-Lo sigo pensando.

-Por eso te lo puse así porque se que tu ego y orgullo no te lo permiten, así te das cuenta  de que entre nosotros no va a pasar nada.

-¿Quién dijo que estaba pensando en si hacerlo o no? Estoy pensando un buen lugar para lo que me pediste.

-Guau es verdad que consigues lo que quieres, la verdad pensé que te iba a ganar el ego y el orgullo pero bueno, anoche te dije que teníamos que conocernos primero y que aparte quería otra cosa.

-¿Cuál es esa cosa?- Preguntó.

-No solo tienes que salir conmigo para conocernos en una cita no se conoce uno de el todo, así que en un mes tienes que hacer todo lo posible para tratar de conquistarme.

-Me lo hubieras dicho ayer, lo siento pero no yo no soy una persona romántica.

-Yo no dije que tenías que ser romántico, yo dije que me tienes que conquistar a tu manera y después te doy una respuesta a lo que quieres, si no es más nos vemos después Coronel- Dice al bajarse de el carro- Ah y el mes empieza desde hoy, adiós.

Esta mujer vuelve a cualquiera loco y le voy a dar todo lo que quiere para lograr mi objetivo, tengo otro punto a favor y es que no tengo que ser romántico, un mes más, uno mes menos por lo menos voy a conseguir lo que tanto e esperado e intentado y me lo sirvió en bandeja de plata.

Por lo pronto me voy a hacer mis tareas, adentrandome en el edificio administrativo, entro en mi oficina esperando mi café con la inepta de la secretaria que entra temblorosa y casi me tira el café en el pantalón.

-Di discúlpeme señor- Trata de limpiar mi camisa- Y-yo..

Levantó la mano para que se calle, salgo de mi oficina encaminandome a los dormitorios masculinos para cambiarme la camisa, elijo una de color negro, cuando salgo otra vez a mi oficina veo como la mujer en la que pienso todos lo días dirigiendo el entrenamiento en la pista, quisiera no pensarla todo el día pero es imposible no hacerlo, termina y se adentra a los dormitorios femeninos, la sigo para decirle si hoy por la noche está libre para ir cumpliendo lo que me pidió para conseguir lo que quiero.

Toco su puerta y me abre por lo que veo que todavía no se a bañado, ni cambiado.

-¿Puedo pasar?- Pregunto.