Las telas de araña bailan con la brisa del invierno,
Las miro desde el sillón
Echada, con el oído perdido.
Me pregunto si es normal sentirme como una niña fugitiva
Un día después de conocerte.Me convertí en la mujer besada de la plaza
Un jueves a casi hora de toque,
Susurro, quiero llevarte a mi cama,
Y así, como si nada, despierto con cenizas en la frente.
Pecaré pasado mañana
Y me da miedo el hacerlo en vano.Las telas de araña sen ríen de mí,
Yo me río de como el invierno se va
Sin haber dejado rastro de los besos que di en el frío,
Y de paso, me regala cuatro días seguidos de lluvia
Para poder lamerle la cara al hombre
Un jueves con tanta humedad.En la caza de la vida preciosa
Temo volver a creer en Dios,
Tal y como lo hacía a los once años.
No me saquen el metal,
Que prefiero echarme en el sillón
Y mirar las telarañas del techo.