La vida del castillo era muy tranquila según lisa.
Bueno tranquila para los monarcas Jennie tenía muchas cosas que hacer entre ellas estaba el atender a la princesa lisa que solo la usaba para coquetear.
Y no lo negaba los coqueteos de nuestra espontánea princesita hacían mucho daño al pobre corazón de nuestra Jennie comenzando con suaves toqueteos en su cabello y cumplidos hasta terminar con besos fugazes.
—Jennie ¿Me estás escuchando?—Jennie le miro aburrida.
—Si lisa te estoy escuchando, sigo sin entender por qué insistes.
—Necesito probarlo, ¿De qué otra forma besaría a mi futuro esposo?— "Futuro esposo" jamás pensó que dos palabras le harían devolver todo el desayuno.
—No me besaré contigo.
—Ya me haz besado.
—¡Pero no de esa manera!—Chillo sonrojada, lisa sostenía un libro sobre los besos y en esa página estaban dos personas besándose de manera muy intensa como lo pensaría cualquiera.
—Por favor Jennie—Suplico lisa.
—Me llegas a morder lalisa ¡te lanzo por el balcón!—Le informo antes de sentarse en la cama junto a lisa, miraba la foto tratando de descifrar lo que hacían en el libro.
Los ojos de lisa se llenaban de emoción y su corazón parecía caballo desbocado, jennie empezó a besar los labios de lisa en un suave Vaivén, dónde ambas cerraron sus ojos.
Los labios hacían sonidos algo obsenos para nuestras primerizas chicas.
La traviesa lengua de lisa se dió paso entre la boca de la contraria estremeciendola. En poco tiempo ambas eran un manojo de suspiros y labios hinchados.
Varios toqueteos en sus piernas por ambas partes, hasta que Jennie dejo el control en la situación, situandose debajo de nuestra princesa.
La vista de lisa era maravillosa, Jennie tenía el cabello algo desarreglado y sus clavículas notandose entre el vestido.
—¿Qué tramas lalisa?
— Las obsenidades que haré contigo si no me paras en este momento Jennie.
—¿Quien dijo que quiero pararte princesa mimada?
—La campesina no es tan santa cómo se dice ¿eh?—Las traviesas manos de lisa se adentraron en el vestido cómodo de la contraria, sus pieles se erizaron ante los roses. Dejando varias formas en el estómago de Jennie subió hacia su delicada cintura.
El atardecer comenzaba haciéndose presente un anaranjado sobre la piel desnuda de jennie a Merced de lisa.
—Jennie me encanta tu piel bajo el atardecer.
—Lisa, hazme entrar en el cielo por favor—Suspiro Jennie derritiendose ante las caricias de lisa en su intimidad, ya mojada.
Aquellas blancas y delicadas manos la estaban haciendo ver el cielo y al mismo tiempo la toturaban, sentía varias sensación cómodas en su vientre.
La princesa seguía en su vestido disfrutando de cada gesto de jennie, nuestra pequeña campesina estaba desnuda debajo del delicado cuerpo de lisa.
—Sigue hablando Jennie nececito deleitarme con tu bello timbre de voz.
La tarde culminó con ambas en la cama siendo testigos únicos las sábanas de lisa.
Los cabellos marrones de jennie adornaban su cara, lisa podía observarla dormir los labios cereza de Jennie provocaban escenas dónde lisa la tenía entre sus brazos más cerca de lo que pudieron ese día.
—Levantate linda campesina quiero bañarte— Jennie dormitaba pero se dejó caminar de lisa hasta la gran bañera brillante.
El agua estaba tibia y con aroma a roble, perfecta para su amada.
—¿Jennie me dejas bañarte?— Con disimulo camino hasta la tina, su bata caía haciendo adorno a sus caderas dejando la vista para lisa que suspiraba enamorada, notando tres lunares debajo del seno derecho de Jennie.
La noche ya caía, suaves caricias en su cuerpo con el trapo y la escencia de rosas su favorita.
—Me gusta mucho como sonríes al ver los vestidos que te regalo Jennie.
—Me gustara mas que me los quites.
—Dios eres demasiado coqueta, y te quejas de que yo lo sea.
—Solo cállate lisa y besame eres muy habladora.
—Lo que diga mi bella campesina.
—Ven mi princesa mimada— Lisa beso los labios de jennie volviendo a tomar el control entre ambas, dejando la timidez jennie se aventuró a dejar besos en los senos de lisa, sintiendo el escalofrío de la princesa ante sus caricias.
Las sesiones de toques y caricias siguieron, hasta que lisa la sacó del agua dejándola en la cama, tomándose paso entre sus suaves muslos.
La princesa sin dudar hablaba mucho, y Jennie confirmo que el movimiento de su lengua le atribuya eso.
Gemidos y suspiros de Jennie hicieron eco en la habitación rosada.
La lengua de lisa tomo en posesión los pezones de jennie dejándola sin habla, más sensaciones agotadoras hasta que la puerta fue abierta la reina Chaeyoung miraba estupefacta la escena.
Un pop de la boca de lisa dejando el pezón de jennie sonó en la habitación volviendo lo más incómodo.
La reina salió muy confundida, ambas achicas se hecharon a reír. Lisa apresuró a vestirse su madre estaba apunto de desmayarse y quería ser testigo de eso.
—Lisa dios me miro desnuda.
—Dudo que haya visto mucho detallé Jennie, la que me tirará del balcón será mi madre.
—Que vergüenza—Chillo Jennie escondiéndose en su cama y besando a Lisa antes de irse atrás de su madre.
Un grito se escuchó en la sala del castillo.
—¡Dame mi colección de vestidos rey, tu hija es la de arriba¡— Lisa miro perpleja a su madre quien triunfante recibía una cajita con diamantes de su esposo derrotado.
—Mira hija tu madre es injusta—Chillo su padre.
—No es injusto Marco, Lisa es la de arriba y tú dijiste que era la de abajo y gané por qué su novia es la nueva dama de compañía.
Las carcajadas de lisa se oyeron por todo el palacio y los reyes festejaron el que su hija allá encontrado pareja, y sobretodo sea una chica de familia humilde.
🐛
La familia Manoban es todo un caso, jdjdjd que tal? Les gustó? No se me da bien el smut pero lo intento espero se hayan divertido con las ocurrencias de esta familia real.
Espero tengan una semana muy linda chau besitos de gomita 🧁
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Entre castillos y claveles (Jenlisa)
FanfictionUna chica de alta sociedad gozaba de molestar la paciencia de una Castaña campesina con mal humor siempre. De aquella curiosidad había salido un bonito amorío, que se fue visto desmantelado por una bruja envidiosa. -Jenlisa y más shipps -Humor, Fluf...
