Cadenas de Salvación (Stolas x Blitzø) ~Stolitzø~ *One-Shop*

¿Tienes miedo de amar, Blitzy? ⛓️

- Por favor, hazlo~ - escuche decir Stolas al acariciar coquetamente su mejilla y mentón, trayendo lo a mi rostro después de que cada pluma de su cuerpo se erizara con solo mi tacto, cerrando nuestra cachonda platica con un beso húmedo con nuestras lenguas entrelazándose, en tanto el portal se cerraba a nuestras espaldas.

Al separarnos un tronozo chasquido se hizo oír por todo la sala de mi compañía, las miradas picaras de mis empleados no se hicieron esperar, con sonrisas llenas de perversión, subiendo y bajando sus cejas a modo de llamada sexual.

- ¡¿No tienen nada más que hacer, cuela de chismosos?! - refunfuñe a los chicos por sus incomodas miradas hacia nosotros.

Stolas soltó una dulce sonrisa con su pico cerrado. Me bajo con cuidado de sus brazos al suelo, mirándonos a todos a la par.

- Fue todo un placer...salvarlos~- sonrió con elegancia ante su comentario lleno de verdad - pero tengo que regresar a mi hogar, llevo algunas cosas pendientes y tengo que desocuparme esta noche - me regalo un mirada llena de lujuria con sus ojos brillando de un color rojizo intenso, acercándose a mi nuevamente, pero, ahora el agachándose a mi altura - Nos vemos más tarde, Blitzy~- susurro a mi oído con carnalidad. Rodee mis ojos, para asentir con mi cabeza; Stolas me sonrió para levantarse y dirigirse a la puerta e irse.

- Así que...con que estará con el príncipe Stolas ¿No? - me objeto Millie con lasividad en su parloteo.

- Agradezcanmelo, si no fuera por mi, Stolas nunca nos fuera salvado el pellejo - contesto lleno de orgullo sentándome en una de las tantas sillas del lugar.

- Tiene un buen punto - me dio la palabra Moxxie copiandome la misma acción pero estando a lado de su esposa.

Con la mente y los pensamientos más calmados, llegaron a mi la extraña alucinación que experimente en aquel maldito cuarto de interrogación. No había pensado en ello gracias a esos agentes; me divertí como nunca masacrando con mi familia, pero esa sensación de inseguridad y miedo volvió a mi, como la primera vez cuando me vi en ese traje de payaso.

Mi pierna comenzó a moverse de forma rápida y repetitiva debajo de la mesa, llevado a un tic nervioso tras la ansiedad que de manera inmediata me atrapo.

- Saben chicos, si quieren podemos dejar el día hasta aquí - informe levantándome de mi asiento - si quieren pueden marcharse, ya tuvimos suficiente acción por hoy y trabajamos mucho como para estresarnos más.

- O solo lo dice para verse con su majestad, Stolas, en su casa más rápido - hablo risueño Moxxie.

- Pff - mofe - Si claro ¿Como no? - hable con sarcasmo - ya quisieran para verme coger con Stolas a ver si eso los calienta un poco más en la cama-

Moxxie nunca fue bueno para contraatacar con insultos, dejándolo con la boca abierta esperando que de ella saliera un insulto estratégico, pero nunca paso, solo frunció su ceño para acomodarse mejor en su silla.

Aunque Mox y yo tuvimos un especia de confección  o charla de lo que verdaderamente pensamos del uno al otro, no cambiara mucho mi forma de expresarme hacia el.

Al menos se que pudo confiar en el plenamente, y el en mi.

Estaba tan apegado a mi cabeza que ni siquiera me di cuenta cuando anocheció.

- Mmmh - gruñí al darme de la hora - 9:34 pm, es tarde, Stolas debe estar esperándome - hable conmigo mismo contemplando la pantalla de mi teléfono.

Mi teléfono...

Esto ya se estaba convirtiendo muy raro. Ese artefacto comunicativo llevaba conmigo cinco meses. No recuerdo cuando mis celulares me duraban por un periodo promedio del tiempo. La causa era claramente Stolas y sus llamadas traumantes para mi sobre el hecho de como cogeríamos o lo que sentía al estar solo.