Prólogo

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Julie.

Volver al rancho La Victoria luego de cinco años de estar quemando me las pestañas para ser una gran profesional ha valido la pena porque fui la de mejor promedio.

Reconozco que regresar a Western Folk, me tiene algo inquieta porque ahí está el único hombre que agita mis sentidos.

Me dá mucha rabia y frustración porque aún después de cinco años de su supuesta declaración de amor hacia mí, continúa con la víbora de su mujer y madre de su hijo Bryan.

El cual ya tiene siete años de edad y es tan bello, amistoso e inteligente.

Se la vive en el campo trabajando como otro peón más.

Tanto que Max debe mandarlo a su casa porque también tiene deberes escolares.

Tengo tantos planes para cuando llegue al pueblo, abriré mi propia empresa de marketing.

Crearé un periódico virtual, y en físico donde todo el mundo esté informado de lo que ocurre en el pueblo o fuera de él.

Despabilo cuando noto que la camioneta que mandaron del rancho a recoger me frenó  frente al mismo y yo suspiro.

Llegó la hora de la verdad...

Quien me abrió la puerta fue Pedro, uno de los vaqueros del rancho y yo le sonrió amena.

__Gracias Pedro, dime...¿Como estás tu y tu familia?

__Digo afable, mirando como el apuesto vaquero bajaba mis cinco maletas.

¿Que? Es que me estoy mudando otra vez al rancho, aunque será poco tiempo.

Ya que planeo conseguir un apartamento en el pueblo, lo necesito lo más cerca de mi empresa.

__Mi esposa y mis dos hijos están bien, gracias a Dios...Tengo dos niñas, Perla y Marie de siete años.

<<No sé si ha sido un castigo porque sólo hago niñas. Mi esposa está embarazada de otra niña, pobre de mis nervios.>>

__Responde Pedro con una sonrisa divertida.

__Ooh vaya, entonces pagarás todas la tremenduras echas.

__Me burlo jocosa, viendo como Pedro finge un estremecimiento.

Finalmente me ayuda a entrar las maletas dentro del rancho y cuando llego a la sala de Star me recorre una nostalgia tan inmensa porque tenía un par de años que no venía por aquí.

Frunzo el ceño ante el enorme silencio que hay acá.

¿Que no hay prácticamente una guardería de todos los hijos de Maximiliano y Mía?

Y así fue porque como huracanes aparecen Alejandra de cinco años, Mauricio de tres años y los gemelos Benjamín y Byron de un años que apenas y caminan.

__¡¡Ooh mis sobrinos preciosos!! Vengan aquí.

__Chillo Alegremente arrodillando me en el suelo a la vez que ellos corren hacia mi abrazando me.

Sólo A Tu Lado, Saga Amor & Pasión 3Donde viven las historias. Descúbrelo ahora