-Señorita Morningstar de Stein-

-Prologo-

ATENEA MORNINGSTAR

Estaba hablando con Mazekeen por FaceTime.

—Y si, te digo qu—me interrumpió la voz de mi padre.

—Pequeña diabilla—Canturreó mi padre alargando la última sílaba.

—Mazekeen me tengo que ir el Estrella me llama—digo divertida.

—El estrella, pero- si tú también eres estrella—dice riéndose del apodo que yo le había puesto.

—Ok, ok, bye— dije riendo levemente mientras cortaba la llamada.

—¡Ya voy!—digo guardando mi celular y entrando al ascensor—¿qué pasa papá?—digo saliendo de las puertas del mismo.

—Te tengo una sorpresa—dice papá.

—Tenemos—murmuró mamá tosiendo falsamente.

—Si, si—dice papá aclarándose la garganta—te tenemos una sorpresa.

—¿Cual?—pregunto—¿me van a dejar vivir sola?—digo emocionada.

Cualquier adolescente normal que no tiene problemas con los padres, ni preguntaría eso, pero a mi me gusta estar sola.

—Emm... si—dice mamá—pero el lugar lo escogí yo.

—Chloe—digo sería, mamá nunca fue buena escogiendo lugares y peor para vacaciones o vivir ahí

Una vez fuimos al campo de vacaciones, volvimos a las horas porque no teníamos donde quedarnos, la señora se había olvidado de alquilar una casa.

—Atenea no me llames por mi nombre—dice mamá poniéndose seria.

—Aja—digo rodando los ojos divertida, a la señora siempre le molesto que la llamara por su nombre dice que siente que la estoy retando.

—Bueno, dime donde es que tengo que ir a hacer la maleta—digo emocionada.

—Pequeña diablilla, ¿ya no nos quieres o que?—dice papá con falsa tristeza y cierta diversión.

Típico en mi padre.

—Papi, Mami, saben que los quiero mucho, pero por fin ya me dejaron irme del nido—bromeo riendo y acercándome para abrazarlos.

—Bueno ya—dice alejándose mi padre—respondiendo tu pregunta, vas a ir a Wilson—se aguanta la risa.

—¿!Que?!, no, no, no, mamá—digo esperando que me diga que es una broma.

—Atenea, por lo menos vas a ir a vivir sola en una mansión—dice mi mamá tratando de ser positiva.

—Pero mamá—digo molesta—tu elegiste el lugar.

—Si , pero no sabia que ese pueblo era tan exagerado con la religión, me di cuenta cuando ya estaba la casa hecha—dice explicándome.

—Ok esta bien , espero que por lo menos la casa me guste—digo aceptando, y si ya me convenció, no quería tener que seguir viviendo con ellos y escuchar sus aplausos .

—Si compré ropa que a ti te gusta o parecidas a la que tienes en el closet—dice mamá —sólo tienes que llevar ropa interior y demás cosas que quieras.

—Ok gracias, me voy a hacer la maleta—digo rodando los ojos y dirigiéndome al ascensor.

—El vuelo sale a las 1:00pm—me dice papá sonriendo.

—Okey—digo alargando la última letra mientras las puertas del ascensor se cierran.

Entro a mi habitación en el piso de arriba y me tiro en mi cama con el celular, como solo tengo que guardar algunas cosas, no es nada pesado.

Agarro mi mochila y meto ropa interior, anillos, collares y todo lo que tenga que ver con joyería, tarjetas de crédito, débito, mis navajas,etc ...

Me pongo mis botas, agarro mi mochila y bajo por la escalera de caracol.

—Ya estoy—le digo a mi padre.

—¿Quieres un trago?—dice mi padre ofreciéndome vino.

—Okey, ¿y mamá?—digo aceptando la copa.

—Arriba, cambiándose—dice sonriente mi padre.