Capítulo 137: Gravedad.

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Sin duda el tema de Tsao-Lan seria legends(the score)



Benetnasch, espada hermana de la lanza Mizar de Chelsea y formando junto con otras cinco iguales las siete armas divinas, creadas y en las tierras gélidas por los reyes de invierno mucho tiempo atrás.

En manos de una persona con el nivel de Natsu, la espada era lo mismo que una bomba nuclear, por lo que el mago optaba por utilizarla sólo como último recurso en una situación de necesidad.

La explosión hizo volar rocas en llamas y el lugar se volvió una zona volcánica en un segundo. Tsao-Lan apagó el fuego a su alrededor y se asombró al ver leves quemaduras en su cuerpo. Al igual que Mizar, Benetnasch contaba con una capacidad relacionada a la manipulación de éter. En su caso maximizaba la utilidad del arma al consumir la magia del usuario para luego potenciarla mediante la absorción del éter en el ambiente al ser liberada.

—¡¿QUÉ FUE ESO?! —lejos de parecer preocupado, Tsao-Lan estaba excitado.

—¡Rayos! —se quejó Natsu —. Creí que ese ataque bastaría.

—Esa espada, parece tener poder solar. —Tsao-Lan estiró su cuerpo —. ¡Es perfecto! Después de todo yo soy el demonio lunar.

Tsao-Lan juntó las manos y dos placas de tierra se alzaron a los lados de Natsu para aplastarlo. El pelirosa estiró los brazos y destruyó las placas con su fuego muy fácilmente.

Tsao-Lan embistió y las armas del Xing long chocaron contra Benetnasch, los dos discos en sus manos se calentaron en un instante y comenzaron a derretirse por el poder de fuego del pelirosa.

—¡Toma esto! —Natsu se movió mientras el Xing long estaba distraído —¡Puño de destrucción del rey dragón de fuego!

Tsao-Lan escupió sangre y retrocedió al recibir un golpe en el costado, arrojó sus discos y tomó la guan dao con amabas manos. Comenzó a chocar armas contra Natsu una y otra vez. Ambos oponentes sostenían una batalla de velocidad y fuerza bruta, gracias al impulso de su fuego Natsu mantenía el mismo nivel que Tsao-Lan. Cada golpe, cada estocada acercaba más a los dos combatientes a su límite, sólo era cuestión de tiempo para ver quién caería primero.

Natsu giró en el aire y creo una tornado de fuego que Tsao-Lan disipó con su gravedad, luego éste último lanzó una cuchillada contra el mago y le causó un ligero corte en el pecho.

—¡Yuquing: mazo de gravedad! —la magia de Tsao-Lan recubrió la hoja de su arma y la utilizó para golpear a Natsu.

El pelirosa rodó varios metros al ser empujado por la gravedad, reaccionó y enterró su brazo libre en el suelo para recuperar el equilibrio, luego comenzó a inhalar y apuntó a donde Tsao-Lan.

—¡Rugido del rey dragón de fuego!

—¡Yuquing: Corte de media luna!

Tsao-Lan blandió su arma y la dejó caer trazando un arco descendente, el fuego de Natsu fue cortado en dos y el Xing long evitó el daño por completo. Colocó su arma en el hombro y provocó a Natsu para ir por él con la mano libre.

—¡Eres muy hábil! —comentó Natsu.

—¡No! —el Xing long bufó —. Tú eres muy torpe.

¡¡¿QUÉ?!! —una vena se marcó en la frente del Dragon Slayer.

Natsu separó las piernas y sujetó el arma con las dos manos, el arma comenzó a expulsar mucho calor y comenzó a reunir el fuego restante de todos los ataques anteriores.

—¿Pero qué? —Tsao-Lan observó el fuego pasando a su alrededor, acumulándose en la espada del pelirosa.

—¡Este es el poder de mi padre! —Natsu llevó su espada arriba de su cabeza —. ¡Arte secreto de los caza dragones: Gran Hyperion!

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