Santuario sobrenatural de Salvatore

24. Capitulo 24

Una vez que Ella se fue a la cama, Damon tomó la mano de Lucifer y los llevó a la habitación de Lucifer, no queriendo volver a bajar, pero el sexo definitivamente tampoco era lo primero en su mente por una vez. Lucifer captó esa pista cuando Damon comenzó a servirles bebidas. Aceptó la bebida mientras ambos se sentaban en el sofá. "¿Cómo estás realmente?" Preguntó Damon.

"¿A qué te refieres?" Lucifer preguntó de manera uniforme.

"No te hagas el tonto, Luc", resopló Damon. "Sabes a lo que me refiero. Con Ella apareciendo ".

"Me alegro de tenerla aquí", le dijo Lucifer. "Creo que encajará bien".

“Yo sé mucho. Todos pudimos ver cuánto te preocupas por ella. Quiero decir con todos los recuerdos y cosas que ella trae a colación, ”Damon lo intentó de nuevo. Si Lucifer aún lo evitaba, lo dejaría, pero esperaba que no lo hiciera. Que se abriría con él.

"Ella ... luchó por mí", dijo Lucifer con un toque de confusión. “Se enteró de que yo era el diablo y de inmediato fue a luchar por mí. Sin la intervención de nadie más ”.

"Porque ella no es tan ciega como el resto de esos idiotas", le dijo Damon.

“Nadie ha luchado por mí antes. Hasta que terminé aquí, por supuesto ”, le dijo Lucifer. Sin embargo, todavía tenían el honor de ser los primeros seres en aceptarlo por completo incluso antes de conocerlo. De acuerdo, tenían la prueba de que él no era malvado de las protecciones, pero aún así.

Y siempre lucharemos por ti, Luc. Especialmente yo ”, dijo casi en un susurro.

Lucifer se inclinó hacia adelante y lo besó por eso. También habían estado haciendo mucho más de eso últimamente. Solo besos al azar sin ningún tipo de sexo. “Y siempre lucharé por todos ustedes también. Especialmente tú, ”Lucifer respondió, pasando su mano por la mejilla de Damon.

"Y Ella", Damon preguntó tanto como dijo, tratando de averiguar dónde estaba ella en su corazón. Especialmente después de esto.

"Sí. Ella también, ”Lucifer asintió, sin captar el trasfondo de la declaración.

"¿Y ella es ... realmente como una hermana para ti?" Damon preguntó un poco más sin rodeos. Compartir la cama de Lucifer con otros era una cosa, pero esperaba evitar compartir su corazón. No es que se negara a hacerlo. Nunca le negaría a Lucifer nada que lo hiciera feliz. No importa cuánto duela.

El corazón de Lucifer dio un salto cuando se dio cuenta de que Damon en realidad se sentía inseguro. Sobre él. "Lo es", susurró Lucifer y luego Damon lo estaba besando de nuevo. Esta vez terminó en la cama y fue como si un interruptor se hubiera accionado. Habían estado manteniendo un delicado equilibrio entre la emoción y la lujuria, pero ahora ese equilibrio se había inclinado. La emoción tomó el centro del escenario y ambos simplemente cayeron en ella. Dejando que cada toque y movimiento dijera todo lo que todavía tenían demasiado miedo de expresar con palabras.

Sin embargo, esa intensidad de construcción se hizo aún más pesada una vez que se acurrucaron en los brazos del otro tratando de recuperar el aliento. Damon fue el primero en romperse. Se apoyó en su codo, la mano descansando ligeramente y apenas moviéndose sobre el pecho de Lucifer mientras se las arreglaba para pronunciar las palabras: "Si te dijera que te amaba, ¿huirías?" Escuchó el ritmo cardíaco de Lucifer dispararse, y solo esperaba que fuera una buena señal y no una mala.

Lucifer giró levemente la cabeza para encontrarse con los ojos de Damon y dijo un suave pero seguro, "No".

"Y ... ¿me amarías también?" Damon preguntó casi en un susurro, perdiéndose en los cálidos ojos chocolate de Lucifer.