Knock Knock... ¡It's a baby!

Son Chaeyoung y Myoui Mina, dos enamoradas encantadoras que con solo apreciar cuánto se aman te derriten, su vida era realmente feliz hasta que llegó algo de imprevisto para mejorarla.

Pero, exactamente ¿Qué era eso?

En una fría madrugada de un 12 de agosto, retumbaban unos bruscos golpes en la puerta principal de la casa de esta pareja. Como era de costumbre la mayor siempre tejía gorritos o bolsos con fresas para su novia antes de dormir, mientras que Chaeyoung le ganaba el sueño y caía rendida, pero esta vez a Mina se le pasó la noción del tiempo. Al escuchar estos bruscos golpes la japonesa se asustó y despertó a su novia.

-Chae, despierta. -Decía la mayor tratando de despertar a su pareja- Chae, por favor están golpeando super fuerte abajo. -¿Que hora es? -Preguntó adormilada la menor- Son las dos y media de la mañana -afirmó la japonesa mientras veía el reloj que tenían en su mesita de noche. Una vez más sonaban esos golpes realmente fuertes, en ese momento Chaeyoung reaccionó ante la situación, abrió las sábanas que la cubrían, se puso sus lindas pantuflitas de conejo que cada vez que daba una pisada hacían un ruidito tierno, la mayor siguió el mismo procedimiento de su novia, la coreana agarró un abrigo fino solo para ver quién era a estas horas de la madrugada, mientras que cruzaba sus brazos abrió la puerta de su dormitorio y salió, detrás de ella iba su pareja.

Los golpes habían cesado cuando empezaron a bajar las escaleras, ambas llegaron hacia la puerta principal de la hermosa casa que compartía el par, la menor empezó a destrabar la puerta, cuando la abrió quedó perpleja de lo que vio, a su novia se le llenaron los ojos de lágrimas, no era nada más y nada menos que una bebé con una sola manta fina en una caja afuera de la puerta de su casa. Mina no dudo un segundo más y la agarró en sus brazos para darle un poco de su calor corporal a la pequeña, mientras Chaeyoung salió hacia afuera para verificar si todavía la madre de esa criatura seguía por ahí pero no encontró nada.

-No podemos dejarla afuera -le dijo Minari a su novia- Claro que no la dejaremos afuera, hace mucho frío podría morir -¿Qué haremos con ella? -Preguntó la japonesa -Por el momento nos la quedaremos y luego denunciaremos lo ocurrido, vamos hermosa, es hora de dormir. -Hay un problema y si ¿tiene hambre? Y si ¿se hace popis? ¿¡Acaso tenemos pañales!? ¿Biberón? -Preguntaba desesperada mientras meceaba a la pequeña en sus brazos- ¡Diablos! No lo había pensado, por el momento tendrá que aguantarse, cuando amanezca iremos de compras ahora es momento de descansar un poco.-

La pareja se fue a descansar ó eso creían hasta que dos horas más tarde la bebé empezó a llorar desesperadamente, al escuchar los llantos de la menor se despertaron inmediatamente se levantaron y fue esta vez Chaeyoung quien la cargó porque su novia tenía que ir al baño, mientras la meceaba la miraba detenidamente analizando cada una de esas bellas facciones que tenía esa pequeña, nunca pensó tener una bebé en sus brazos ya que no le gustaban mucho que digamos. Chae dejo su desprecio por los bebés aún lado y comenzó a tararear una melodía para aquella pequeña niña que cargaba, poco a poco está se fue calmando, Mina al salir del baño vio está hermosa escena, no se aguanto y abrazo a su novia por atrás poniendo uno de sus brazos arriba de los que cargaban a la niña.

-Te ves hermosa cargando a Chloe- Dijo suavemente la de cabello oscuro para luego darle un beso en la mejilla a su novia - ¿Chloe? ¿No se te ocurrió algo mejor, Minari? Pregunto con una leve sonrisa de costado - Creo que no -Respondio soltando una risita. -Igual me gusta -afirmó la menor- Al igual que tú.- Luego de decir eso Chaeyoung le dio un suave beso en los labios a su novia

Claro que a la rubia le gustaba el nombre, después de todo fue el que eligieron para su futura hija cuando eran unas simples adolescentes risueñas. Pero a todo esto solo que se les estaba olvidando un pequeño detalle. Chloe empezó a llorar otra vez pero más fuente que antes, ahí fue cuando las chicas reaccionaron, se separaron inmediatamente y Chaeyoung empezó a tararear de nuevo hasta que la pequeña poco a poco cayó en un profundo sueño, la pusieron en el medio de su cama como lo habían hecho anteriormente y cada una a su costado para evitar que se cayera de esta. Al acostarse se pusieron frente a frente dejando a la criatura entre medio de ambas, la pareja se miró entre sí para luego mirar a la pequeña Chloe quien dormía plácidamente y soltar una risa no tan sonora.