Luego del reencuentro se sentaron en la sala a conversar, hablaron por horas, después de todo, no se habían visto en diecisiete años.
A ella le sorprendió el gran parecido con su padre, tanto como en su físico como en su personalidad.
Luego de conversar por mucho, si digo mucho es mucho, tiempo, el la llevo hacia su habitación.
Subieron por las inmensas escaleras hacia el segundo piso, pasaron por dos puertas dobles que eran las habitaciones de su papa y su hermano, luego llegaron hacia otra puerta doble, la cual era su habitación.
Al entrar se encontró con una habitación de más de veinte metros cuadrados, con paredes grises casi blancas, de un estilo vintage, un closed con montones de prendas elegantes y casuales, una cama de tres plazas, y lo mejor de todo, el suelo estaba completamente cubierto con una alfombra de fibra, que ella moría por pisar descalza.
Dejo su maleta en el suelo y corrió aventándose en la cama, su padre y su hermano rieron e hicieron lo mismo, terminaron acostados riendo y jugando.
Como una familia feliz, mejor dicho, eran una familia feliz.
...
Faltaban solo diez días para la navidad y la casa estaba hecha un revuelo, que adornos por aquí y comida por allá. El papa de los gemelos preparaba los regalos para ellos y para el personal, ya que era un jefe muy generoso. Ambos chicos también preparaban sus regalos y ayudaban con la casa.
Tres días faltaban ya para la navidad y a los empleados ya les habían dado sus vacaciones y regalos. En la casa solo estaba la familia y owin, el mayordomo, a quien la única familia que le quedaba era el padre de los gemelos, por lo que se quedo en la casa, disfrutando con ellos.
Noche buena hacia su llegada, junto con los padres adoptivos de Adriane, quienes festejarían la navidad con ellos.
En la entrada ella los recibió con una abrazó y un beso a cada uno, los guió hacia el comedor donde estaban su padre y su hermano conversando animadamente.
-papa, ellos son mis padres- su padre giro la vista y se levanto, camino hacia ellos y los abrazo cálidamente.
-gracias por cuidar a mi pequeña por todos estos años, estoy en deuda de por vida con ustedes- los padres adoptivos de la chica sonrieron.
Todos se sentaron en la mesa para conversar, owin al poco tiempo trajo los platos sobre la mesa y todos disfrutaron de la cena, a las 23:58 salieron todos juntos al balcón, esperaron hasta las doce y lanzaron los cohetes al aire.
-¡feliz navidad!- gritaron al unísono, con una sonrisa esplendida en sus rostros.
...
Año nuevo se festejo e la misma forma, todos felices y en armonía.
Tres de septiembre se hacía presente, con él ,el comienzo de clases, a ella obviamente la cambiaron de escuela, junto con su hermano, días antes su padre le compro los mejores útiles escolares, la mejor mochila y hasta un celular de último modelo, ella al principio se negó, pero por la insistencia termino aceptando.
Digamos que también, le compro un auto, el mismo que el de su hermano, pero negro.
Su padre quería que fuera feliz, por eso le compraba bienes materiales, pero y ella ya era feliz al estar con su verdadera familia.
También le compro maquillaje y le aseguro una visita al spa, por lo que su piel estaba radiante, su ropa de marca y su tratamiento en el cabello la dejaron radiante, en otras palabras, estaba más que hermosa.
A las siete y media de la mañana partieron desde su casa hasta el colegio, cada cual en su auto. Llegaron al mismo tiempo, ambos bajaron de sus carros y se unieron caminando, iban entrando conversando tranquilamente.
Al entrar una bola de estudiantes los rodeo.
-adrian, ¿Quién es ella?- pregunto una voz en el publico
-¿es tu nueva novia?- pregunto otra.
-¿estás engañando a rose?- siguieron preguntando.
-atención todos- hablo un poco fuerte adrian –esta chica que está a mi lado es mi hermana, no quiero que nadie se atreva a molestarla o a tocarla ¿entendido?- todos hicieron ruidos de afirmación.
Adriane se acerco a su oído.
-parece que eres muy popular- le dijo
-querida, somos populares- ambos rieron y se adentraron en el colegio.
Al entrar una voz chillona se escucho en el medio del pasillo
-¡¿Quién es esa zorra?!- todos se giraron a ver a la chica que había gritado, su nombre era Rose Agreste, la famosa novia de millonario adrian Dupaing.
-rose, cuida tus modales. Ella es mi hermana- adrian temía que la primera impresión de su novia a su hermana fuera mala por lo que intento remediarlo, lastimosamente a Adriane ya le había caído mal –adri, ella es mi novia, rose-.
La tal rose no cuestionó sobre que ella era la hermana de su novio, porque eran prácticamente iguales.
-oh, he he- rose se rascó la nuca –yo... lo siento, sabes que es muy complicado que un novio te sea fiel, mas cuando es el más popular del colegio. Entre en pánico, es que eres muy hermosa- intento remediarlo con un alago, pero al mala impresión ya la había dado
¡la había llamado zorra sin siquiera conocerla!
-está bien, no hay problema- oh, sí que los había.
-adri, tengo que ir a clases, ve a la dirección por tus horarios, nos encontramos en el almuerzo, te presentare a mi mejor amigo, chau- adrian le dio un beso en la mejilla y se alejo con rose tomados de la mano.
Ella camino hacia la dirección y recogió sus horarios junto al número de su salón.
Busco su salón, cuando lo encontró toco la puerta escuchando un "pase" del otro lado.
-señorita, llega 10 minutos tarde- comento el profesor del otro lado.
-lo siento, soy nueva y fui a recoger mis horarios- se disculpo con el profesor.
-está bien, lo dejare pasar, siéntese al lado del joven Richards- la chica lo busco con la mirada y un muchacho rubio levanto la mano.
Ella se dirigió hacia el asiento junto al chico, a quien la chica se le hacía muy familiar pero no le prestó atención, a lo que si le prestó atención fue a su belleza, porque la chica era extremadamente hermosa.
Y no fue el único en caer en sus encantos
-hola soy Michell- dijo con una sonrisa.
Que honestamente, le estremeció el corazón a Adriane
-hola, soy Adriane- le devolvió la sonrisa.
Y a él le pareció la más hermosa de todas.
Se voltearon para concentrarse en las clases, luego de estas el timbre sonó para el almuerzo.
-bueno Adriane, tengo que irme con un amigo en la cafetería, ¿también vas allí?- pregunto esperando el sí como respuesta.
-si, voy a encontrarme con mi hermano- ambos entraron en la cafetería, ganándose las miradas de todos.
Michell Richards, el segundo chico más popular del colegio.
A lo lejos vieron a adrian que levantaba la mano llamando su atención.
Michell pensó que lo estaba llamando, y Adriane pensó lo mismo.
Ambos se dirigieron a la misma mesa, y se miraron confundidos.
-¿no ibas con tu hermano?- pregunto él.
-si, el es mi hermano adrian- llegaron a la mesa y el mencionado los saludo a ambos.
-veo que se conocen, Michell, ella es mi hermana gemela Adriane, Adriane, el es mi mejor amigo Michell- ambos se miraron sorprendidos.
Michell y adrian se conocían desde hace años, ¿desde cuándo este tenía una hermana gemela?
-¿desde cuand...- adrian lo interrumpió pues ya sabía lo que iba a decir.
-hermanos gemelos, separados al nacer, típico de película- Michell asintió aun sorprendido.
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gemelos
Teen Fiction¿un hermano gemelo perdido? no es nada nuevo ¿que se intercambien lugares? meh, aburrido ¿que sea millonario? bueno... eso esta mejor ¿enamorarse de su mejor amigo? eso no me lo esperaba quedate y descubre ; )