Estaba segura que al final los tres íbamos a terminar desnudos. Una idea que en realidad fue un estúpido sueño, habitó en mis pensamientos. Ellos dos besándose lujuriosamente, mientras que yo empezaba a despojar mis prendas delante de ellos.
-Bésens...
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Me levanté del colchón, pasando por el lado del Chase desnudo. Caminé en puntitas hasta el baño para ponerme las prendas que locamente me quité ayer...
Mi cabeza me dolía, punzadas en el lado derecho de la cabeza, mis ojos me ardían causando que me quiera morir, mi cadera me incomodaba, era un dolor que provoca al tirarte de piso 20 de un edificio. Sí, así me duele.
Me miré al espejo y parecía un zombie, me espanté de mi aterrador aspecto. Mi maquillaje corrido, mi labial por mi cachete, solo tenía una pestaña postiza; la otra de seguro, la he perdido.
Dos toques se escucharon detrás de la puerta, caminé hacia ella y abrí la puerta solo un poco, no quería que nadie vea que me he acostado con dos personas. Parecía un completa zorra.
Kendall apareció detrás de la puerta, con su celular iPhone en la mano. Ella me miraba preocupada, mordía el final derecho de su labio inferior y fruncía su ceño.
—Mira, hay algo que debes de ver. —Exclamó en susurro.
Miré su celular y aparecía la escena de ayer. Yo bailando seductoramente a Vinnie y Chase apareciendo detrás mío. Los tres bailábamos con una sonrisa, mientras los demás viendo la escena.
Miré detrás de mí, Vinnie se levanta con su torso desnudo, acercándose a mí con su entrecejo fruncido, lo mismo hizo Chase. Ellos miraron mi preocupación en mi cara, estábamos jodidos, ellos lo sabían.
—¿Qué sucedió? —Preguntó Chase, colocando una mano en mi cadera, él tenía una camiseta blanca y larga, era suya. Kendall me miró pícaramente para después intercambiar miradas con ellos dos.
Ella le explicó sin quitar su sonrisa perversa y algunas miradas traviesas que me regalaba.
—Bueno, me voy. Después hablamos, Heather. —Kendall se da la vuelta. Cerré la puerta y miré a los dos, me sonrojé e inmediatamente sentí vergüenza, ellos me miraban. Vinnie se sentó en la cama, Chase solo estaba apoyado en el marco de la puerta del baño.
Mis lágrimas empezaron a bajar. Vi todo mi futuro destruido. Yo he estudiado administración, mi mamá me dijo que tenía que estudiar esa estúpida carrera. No quería irme a administrar el hotel, porque cada vez que entro solo me recuerda a mi mamá, no quiero saber del hotel.
El primero de este año, terminé mi carrera, también me contrataron para modelar el año pasado ya en marcas más conocidas y costosas, yo acepté gustosa, porque sabía que esa puerta me ayudaría para un futuro lanzar mi sencillo.
Tenía mi vida planeada, mi manager me había ayudado al igual Jack. Todo estaba listo, pero Vinnie y Chase lo malograron, yo la cagué, también.
Inconscientemente, me acerqué a Vinnie, me senté en su regazo y lo abracé para llorar en su hombro izquierdo. Apreté mis ojos, y seguía llorando. Sabía que mi padre no me obligaría a entrar al hotel, pero yo debía de hacerlo, las presiones de todas las miradas iban a presenciarse después... todo el odio y murmullos que me estaré imaginando que pasará.
