Steven Universe: "Una Corrupción Felina" Temporada 1

T1: {Capítulo 11}

{Sin esperanza}

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Luego de hacer que Steven se calmase, este y Connie se encontraban afuera sentados frente al océano, el ahora niño-león estaba acostado tomando una pequeña siesta al lado de la niña.

Mientras que las gemas y Greg se encontraban dentro de la casa, observando desde la ventana y la puerta a la pequeña niña y a la gema corrupta.

Estos estaban aliviados y a la vez sorprendidos de la serenidad en la que ahora se encontraba el nuevo león cuando este estaba cerca de Connie.

  — Vaya...al parecer le tomó más confianza a Connie — exclamó Greg.

  — Es mejor así, hay que mantenerlos juntos a los dos para que no suceda una tragedia — dijo Garnet con seriedad.

  — Y también hay que mantener cierta distancia de Steven para que no se ponga agresivo de nuevo — dijo refiriéndose a ella, Amatista y Perla.

Estas dos asienten con la cabeza con afirmación.

  — Oigan, ¿No...no creen que deberíamos hacer algo? Ya todo aparentemente está tranquilo...¿No se supone que hay que curar a Steven de la corrupción? — preguntó Peridot.

Garnet, Perla y Amatista se miran entre sí.

  — Es verdad, ¿No tienen algún remedio o algo así, para eso? — preguntó Lapis Lazuli a las 3 gemas pero estas no le dicen nada.

  — Creo...creo recordar que Rose...Diamante Rosa...o como sea que se llame, tiene una fuente de lágrimas sanadoras — dijo Bismuto con una sonrisa.

  — ¿Lágrimas sanadoras? ¿Cómo Steven? Bueno sólo que él en vez de lágrimas, es con su saliva — dijo Lapis Lazuli recordando cuando el niño reparó su gema.

  — Si...ella creo una fuente que contiene sus lágrimas...por si ella no se encontraba a nuestro lado en las pequeñas batallas, podíamos ir a ese lugar y curarnos a nosotras mismas — explicó la gema de arcoiris.

  — Y si esa fuente con lágrimas repara las gemas...entonces eso significa ¡¡Que también puede sanarlas de la corrupción!! — dijo Peridot muy emocionada.

  — ¡¡SI!! Hay que ir por Steven y sacarlo de esta de una vez por todas — dijo Lapis Lazuli con una sonrisa.

  — Chicas...¿Se...Se encuentran bien? — preguntó Greg un tanto preocupado.

Al notar las expresiones de melancolía en sus rostros.

  — Chicas... — preguntó Bismuto.

  — Ya lo intentamos — dijo Garnet interrumpiendo a Bismuto.

  — ¿Qué? — dijo Bismuto.

  — ¡¡QUE YA LO INTENTAMOS!! — dijo Perla alzando la voz, cosa que estremeció un poco a las 3 gemas y al humano.

  — ¿Qué...Qué dices? ¿A...a qué se refieren? — preguntó confundida Bismuto.

La fusión lanza un gran suspiro.

  — Cuando las gemas se convirtieron en monstruos y se dispersaron por toda la tierra, Rose Cuarzo...al ver esto con nuestra ayuda pudimos capturar a unas pocas y con ellas, Rose hizo lo que pudo para traerlas a la normalidad con sus poderes, con sus lágrimas, pero por más que se esforzaba no lograba salvarlas de la corrupción. Decepcionada y triste con esto, ella no tuvo opción que dejarlas encerradas en burbujas y es por eso que aún no hemos hecho nada más por las otras gemas que están en el templo — explicó Garnet con pesar, dando un pequeño vistazo a la puerta del templo.

  — ¿Así que no saben cuál es la cura para la corrupción? — preguntó Lapis Lazuli con ojos llorosos.

  — No...teníamos la esperanza de que Steven pudiera ayudarlas...después de todo él se hizo amigo de una gema corrupta... pensábamos que si él mejoraba sus poderes, sería la clave para su sanación...Pero eso se vino abajo...porque ahora...él...esta...esta... — dijo Perla entre lágrimas.

  — No...entonces...eso significa que...¡¡Mi hijo se quedará como un monstruo para siempre!! — dijo Greg ya sin evitar llorar también.

Las gemas no le responden, sólo se limitaban en agachar la cabeza con lágrimas en sus ojos.

  — ¿Por qué... ? — dijo Amatista en voz baja. Todos la voltean a ver.

  — ¿Por qué estas cosas le tienen que pasar siempre a Steven? ¡¡Él es sólo un niño!! — dijo con rabia.

Cambiando de forma a Puma Púrpura y dejándose llevar por este sentimiento rompe la mesa de la sala.

Ante las miradas perplejas de los presentes.

  — Amatista — dijo Garnet poniéndose al lado de ella.

  — Esto es mi culpa, si no hubiera dejado que Steven se acercará a Jasper...él no estaría sufriendo...Soy irresponsable...sin duda soy la peor de las Crystal Gems — dijo Amatista volviendo a ser pequeña y se puso de rodillas.

  — Amatista por favor no digas eso...ninguno de nosotros es el mejor o el peor...sólo cometemos errores pero siempre aprendemos de ellos — dijo Perla también acercándose a ella.

  — Si Amatista...nadie dijo que lo fueras... — dijo Garnet quitándose sus lentes.

  — Pero...pero... — dijo Amatista.

  — Nunca vuelvas a pensar en eso, amiga. Todos nosotros te queremos mucho. No dejes que está culpa te carcoma, por que no lo es...si Steven estuviera aquí no le habría gustado verte así, así que mantente fuerte por él — es entonces que Garnet junto con Perla le dan un fuerte abrazo a la gema morada.

Y esta con gusto lo recibe.

  — Yo también las quiero chicas, a todos — dijo Amatista con una ligera sonrisa.

Bismuto, Lapis lazuli y Peridot se unen al abrazo grupal menos Greg que estaba parado frente a la ventana con una mirada inexpresiva.

  — Greg...todo está bien... — preguntó Garnet un poco preocupada.

  — Si es sólo que necesito...esperen, ¿Adónde van? —

Al decir esto último todas inmediatamente van de nuevo a ver por la ventana y la puerta, y notan que Steven y Connie se paran de donde estaban sentados y empiezan a caminar alejándose de la casa.

  — Creo que es mejor dejarlos solos por un momento —

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