Capítulo XXII: Perspectiva

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Despertó y el sol brillaba denotando que era casi mediodía, ¿cómo durmió tanto?
Salió para encontrarse con los demás que quedaron en silencio al verla

—Dormiste más de la cuenta —dijo Kristal

—Si, no sé qué me sucedió —se frotó los ojos  —¿que sucede? —los miró con atención.

Kristal la separó un poco para decirle algo.

—Si, toda la información del tratado está aquí. Es de gran ayuda, pero también encontramos un vídeo que debes ver. Está al final —la dejó sola

Emily extrañada se sentó al pie de un árbol para reproducir dicho vídeo y se sorprendió al ver a su madre en él.

—Em, cariño. Si estás viendo esto es porque posiblemente ya no estoy en este mundo y te ha tocado vivir cosas difíciles por eso llegaste hasta aquí. Te preguntarás por qué estoy aquí y porqué este dispositivo estaba en tu habitación, la respuesta es simple, yo lo oculté para que en algún momento lo encontrarás. Tu padre hizo un tratado peligroso con seres de otro mundo y no lo hubiese sabido si no entraba en el sistema, él no sabía en lo que se involucraba pero lo convencieron. Aprobó el tratado sin cargarlo al sistema de la empresa, eso me dio la oportunidad de convencerlo para deshacer esa locura. Acaba de llamar para cortar el vínculo pero no reaccionaron bien, no tardarán en encontrarnos y estoy segura que sintieron tu aroma —comenzó a llorar —Reptilianos, cariño ten mucho cuidado, tú eres especial por muchas razones y quieren tu ADN, al igual que ellos, otras razas también te querrán pero tú sabrás con quien quedarte, de qué lado pertenecer y ayudar. Cuantas veces quise hablarte del universo, de ese universo que tanto te encanta leer pero, no estabas lista. No sé cuánto tiempo habrá pasado pero no te des por vencida... —se vió interrumpida por un ruido y el vídeo se cortó

Las lágrimas se deslizaban por sus mejillas, su madre sabía lo que sucedería, sabía que tenía un ADN diferente, sabía que vendrían por ella, sabía del universo. La pregunta era, ¿Cómo y porqué lo sabía? ¿Cómo sabía todo aquello?
Quiso gritar para desahogarse pero se mantuvo frotándose los ojos, ¿Qué demonios sucedía? ¿Acaso nunca encontraría las suficientes respuestas?
Estuvo un momento así hasta que regresó con los demás.

—Emily...

—Estoy bien —evitó mirarlos

Todos abordaron la nave emprendiendo el viaje, al llegar se dirigieron con el primer general para dar el reporte.
Emily no estaba en sus completos sentidos, se sentía agotada, solo quería descansar. Salieron sin el general que se había quedado con el primero

—Terrana —la detuvo —el primer general decidirá que hacer contigo —avisó con seriedad

—Como diga 

—Y el dispositivo pasa a ser propiedad de los planetarios

—¿Algo más?

—No

—Con permiso

Alcanzó a Kristal que platicaba con Rex y pasó de largo directamente a la cabaña.
Tomó una ducha y se metió a la cama hasta el anochecer. Realmente no tenía ganas, hacía un momento que había despertado pero se mantenía inmóvil mirando la pared como si fuese lo más interesante. Escuchó que Kristal salió del baño pero prefirió continuar así.

—¿En serio estas bien? —preguntó desde su cama

Aquello la sorprendió porque no pensaba que se daría cuenta, suspiró y se sentó para mirarla.

—Si, solo estaba agotada

—Lo imagino, aquello que hiciste, de irte sola sin protección, fue una locura...

LO DESCONOCIDO - TRILOGÍA DEL UNIVERSO 1/3  [COMPLETA] ✅Donde viven las historias. Descúbrelo ahora