No hables.
Eso fue lo que le pidió a cambio Hana, pues según ella con una sonrisa bastaba para conquistar, aunque ella no fuera de muchas palabras tampoco se imaginó aquella petición tan fuera de lugar.
Sin embargo, allí estaba mirándose en el espejo, no era ella. Su cabello estaba ondulado en las puntas, su maquillaje no era cargado pero ver sus ojos verdes delineados la hacía tener una mirada felina, unos labios tan rojos que dejaban ver su tamaño y realzaban. Sus hombros estaban descubiertos, tenía un vestido de cuero negro ceñido a sus cuervas que no sabía que tenia, llegaba más arriba de la rodilla. Todo eso haciendo juego con unas botas negras de tacon.
–Jamás pensé verte vestida de esa manera, hija– su padre estaba detrás, sentado en la cama de brazos cruzados– ¿No se ve algo...?
– ¿Provocativo?
–Sí, creo que es demasiado– rasco su cabellera negra– creo que con un simple jean y un suéter te verías mejor. – Ella asintió, no se sentía cómoda– haz algo, si no te sientes bien durante un tiempo cámbiate. Toma la mochila que está en tu armario y mete algo cómodo y te cambias después de un tiempo.
–Es buena idea. ¿Puedo llevar tu auto?
–Claro, solo no tomes– advirtió– no quiero accidentes.
...
Los gritos, la música y las personas que estaban en la fiesta eran demasiados para ella. Las fiestas en la playa eran muy distintas, tal vez porque siempre estaban los salvavidas al pendiente de todo. Sonrió recordando al pelo platinado.
EunWoo tomaba algo en el balcón principal interno de la fiesta vio una cabellera en particular, una que podía decirse que era natural y entonces escupió. No. Podía. Creerlo. Tomo rápidamente su celular y tomo una fotografía cuando la vio dirigirse a una de las butacas del bar y llamo inmediatamente.
– ¿Por qué me llamas a las dos de la madrugada, tiene que ser importante Cha?
–Enano nalgón. ¿Alguna vez has visto una sirena Sexy?
– ¿De qué hablas, EunWoo? Ya se te subió el alcohol– dijo ronco, estaba durmiendo.
–Amigo, tienes que venir. Escucha los cantos de Sirena hoy, Jiminie.
–Me estas jodiendo, debo despertar temprano, idiota– mascullo– adiós.
– ¡NO!– grito– ve la foto que te enviare, ¿Ahora vendrás?
Jimin quedo mudo, su garganta se cerró y su respiración se cortó. ¿Qué si vio una Sirena sexy? ¡Por Dios!
–iré de inmediato.
...
Hana sonreía mientras miraba desde lejos la escena; todos trataban de hablar con la chica, mas ella no omitía palabra alguna. Era tan divertido para ella, miro hacia la puerta y sus ojos se abrieron al verlo, una sudadera negra, jeans rotos y unas converse negras, su cabello estaba revuelto.
Park Jimin.
Camino rápidamente hacia él, abrió paso empujando hasta halarlo de la manga. Ambos se miraron y ella sonrió para romper la tensión.
– ¡Hola, Jiminie!– saludo efusiva– Me alegra verte, pensé que no vendrías.
–Hola, de hecho no lo haría– sonrió algo incómodo– vine a buscar a alguien, no me quedare.
–Oh, no seas aguafiestas, Jiminie– rio– ven tomate algo, así me cuentas a quien buscaras ¿Te parece?
–Eso no pasara, no puedo beber– negó– tengo revisión mañana y guardia temprano, y vine por una amiga.
– ¿Amiga?– frunció el ceño– ¿Qué amiga?
–Una que no tiene idea de donde esta– se zafo de su mano, la localizo de inmediato– pásala bien, Hana. Espero disfrutes, tengo que irme.
Sin esperar respuestas camino entre la muchedumbre y la contemplo desde la espalda, vaya mujer estaba sentada en aquella butaca, vaya mujer que tenía al frente, vaya mujer de la cual se estaba enamorando perdidamente.
–Sara– susurro cerca de oído, la hizo estremecer. Sintió la tensión, sus labios rozaron nuevamente su oreja acariciando con su tono– Estoy aquí, vine a rescatar a mi dulce princesa de los dragones, vamos– le dio la vuelta, y vaya mujer.
–Jimin– sus labios pronunciaron su nombre tan dulcemente, tan encantador que se derretiría.
Estiro su pálida y pequeña mano a la de ella, encajaron tan bien que no necesitaron hablar más. Caminaron hasta la salida, pasaron su auto que ella reconoció y caminaron hasta ver asomarse a la lejanía la playa.
– ¿Por qué vamos a la playa?–El sonrió mientras mordía su labio, estaba tan deseoso.
–Porque quiero mostrarle a mi sirena el amanecer– la miro– porque quiero decirte cuanto me gustas, y posiblemente este enamorado de ti.
ESTÁS LEYENDO
The Little Mermaid ❣️Park Jimin❣️©
FanfictionLos cuentos de Princesas se pueden hacer realidad, mas si Park Jimin es el salvavidas de la playa. Book 3 -Historia corta. -No se aceptan copias ni adaptaciones. -Terminada. -+18 ⚠️Proceso de corrección⚠️ ⚠️NO SE ACEPTAN COPIAS NI ADAPTACIONES ⚠️