ᨳ 🐰◞ ᨘ໑ gaining love ! ࣪ ִֶָ 𖥔

🎀 never is enough ᜊ ᱸ𓈒 𓂅

De hecho, es un poco difícil para Jeongguk caminar cuando su grasa pasa por encima de sus rodillas mientras está de pie. Es un poco difícil caminar cuando sus piernas tienen tanta grasa pegada que básicamente hace las divisiones en cada momento. Pero eso no lo detiene; Jeongguk disfruta de los desafíos.

No solo es un desafío, sino que también es súper jodidamente caliente que se quede sin aliento solo de pensar en pararse. Que para mantenerse en pie se necesita casi toda su fuerza, el pequeño músculo que le queda enterrado bajo capas de grasa trabaja increíblemente duro, y tiene que tomar un descanso antes de siquiera intentar dar un paso adelante.

A veces le sorprende que aún no haya llegado al punto de quedarse completamente inmóvil, pero sabe que llegará con el tiempo y eso lo emociona. Cada bocado que da su boca golosa y glutinosa se pregunta si será éste el que finalmente lo empuje al límite.

El lugar favorito de Jeongguk para festejar es en el sofá de dos plazas directamente frente al televisor. Se supone que tiene capacidad para dos personas, pero Jeongguk lo ha llenado todo por su cuenta. Sus costados empujan contra los reposabrazos ahora, su barriga colgando entre sus regazo, mientras come y come para tratar de desbordar el mueble. Quiere ser más grande que eso, quiere romperlo. Cruje mucho estos días, se ha dado cuenta. Cada pequeño movimiento da una especie de protesta, y cuando se pone de pie jura que le está gritando. Jeongguk se siente orgulloso, sabiendo que cuando compró el sofá de dos plazas por primera vez no hizo ni pío.

Le encanta saber que ha superado cada pieza de ropa que posee, las costuras a punto de estallar, la grasa colgando de cada agujero. No se ha comprado ropa nueva en un tiempo, pero eso no le importa. Algo acerca de la comprensión de "oh, esto encaja de manera diferente de lo que recuerdo" cada dos semanas le ha impedido gastar el dinero en ropa nueva. En lugar de eso, camina como un pato por su apartamento con la barriga balanceándose, colgando de la camisa que alguna vez le quedó perfecta. Sus pantalones ya no le quedan alrededor del trasero, apenas puede levantarlos hasta la mitad, pero sigue poniéndolos por "decencia". Le encanta la forma en que se ponen las tapas de los muffins, cómo cuando se los pone por primera vez y luego se sienta, los pantalones se enrollan inmediatamente, inmediatamente se tensan, inmediatamente amenazan con estallar.

Ya ni siquiera puede lavarse adecuadamente, no puede meterse entre todos los pliegues y arrugas que su cuerpo ha creado con todo el exceso de grasa. Hace más calor de lo que debería ser. El hecho de que necesite una silla para la ducha, que la mitad del tiempo ni siquiera pueda llegar a esa silla, que su novio tenga que darle un baño de esponja la mayoría de las veces en este punto, es tan increíblemente caliente que Jeongguk se pone difícil de pensar en ello. Le encanta ser vago. Le encanta estar tirado en su propia inmundicia solo para que su novio regrese a casa y lo encuentre lleno de envoltorios y comida.

Hace aún más calor cuando un día, Jeongguk está tan lleno, tan lleno de comida que ni siquiera puede intentar ponerse de pie. Se inclina hacia adelante un poquito, las tripas le pesan, y su vientre roza el sofa.

Esta es la primera vez que esto ha pasado.

La emoción se precipita a través de Jeongguk, la polla cubierta de grasa se anima.

Le hace querer comer aún más, llenarse la cara con tantas calorías como sea posible y algo más. Quiere que su gordo estómago toque todo incluso cuando no está inclinado hacia adelante. Quiere estar completamente recostado y sus tripas inmovilizándolo en su lugar, amontonándose en el suelo, rompiendo el sofá de dos plazas. Sus manos regordetas acarician sus gruesos rollitos, deleitándose con lo gordo que realmente se ha vuelto. Acariciar se convierte en manosear mientras amasa su grasa. Está tan excitado en este punto, lloriqueando mientras trata de mover sus caderas, intenta darle algún tipo de fricción a su polla cubierta de grasa. Su cuerpo se sacude con cada movimiento y le proporciona algo de alivio, pero no lo suficiente. No ha podido salir adelante en años, pero eso no le impide intentarlo, especialmente cuando está tan excitado como ahora.