ঔৣᏆʀɛֆ քʊɛʀᏆǟֆ 🗝️ ʏ ʊռǟ ʟʟǟʋɛঔৣ꧂[KOOKV]

ঔৣƈǟքíᏆʊʟօ օռƈɛঔৣ꧂

Taehyung cerró los ojos, para sentir los labios del mayor con más detalle. Su impulso fue más fuerte y lo llevó a hacer algo que probablemente le cause muchos problemas.

El beso duró bastante tiempo, pero Jungkook no podía ceder a este.

- T-taehyung, perdóname, pero no puedo besarte en este instante, tu herida sigue sangrando, al menos déjame curarte.

Taehyung asintió, sin decir ni una palabra. El pelinegro seguía limpiando la herida hasta que dejase de sangrar, sin embargo, el rubio se sentía incómodo al haber hecho tal estupidez como besar a la persona que le había hecho dudar de quién era.

Pero le seguía gustando el tacto y la delicadeza que tenía el mayor hacia él.

Jungkook había terminado de limpiar la herida y había envuelto el brazo con vendas. El rubio se quejaba un poco, ya que Jungkook tenía que apretar la venda para que la herida no vuelva a abrirse.

- Te lo agradezco Jungkook.

- No tienes que agradecerlo Taehyung, siempre que necesites de mi, estaré ahí. No permitiré que alguien más te haga daño, me encargaré de tu hermano y--

- Qué?! No, que te pasa? Fue solo un accidente, el...no quiso hacerlo, solo fue la inercia, es todo.

- No creo que solo sea eso, pronto querrá matarte.

- No digas estupideces Jungkook. Ahora respóndeme algo, a que viniste?

- Eso no importa...

- A no? Y si venías a matarme? O aún peor, a violarme.

- Joder Taehyung, no seas idiota, no haría nada que te perjudique.

- Me estás perjudicando Jungkook, aunque no lo creas...

- No sé para qué vine, ya me voy, no hagas ningún esfuerzo y solo duerme.

Jungkook se disponía a salir de la casa de Taehyung, con sus prendas mojadas y ensangrentadas, lo único que cubría todo eso, era un saco.

El rubio interrumpió su salida casi de inmediato con tres palabras que alegraron el alma de Jungkook.

- Jungkook...

- Si?

- Quédate conmigo...

El pelinegro no podía decir que no, solo sonrió ante esas palabras, mostrando aquellos dientes blancos y relucientes. Sin hablar, se acercó al menor y le dió un abrazo, porque sentía que si Taehyung no estaba listo para un beso sincero, no lo podía obligar.

El rubio correspondió al abrazo, cubriendo la espalda del contrario y proporcionando calor en ambos cuerpos. Jungkook no podía pedir más, era lo único que el quería, un mínimo interés en que el amor de ambos vuelva a resurgir...