Donde estamos ahora [Mitsuya x Yuzuha]

Parte 9

Marzo 2021

Yuzuha se levantó para ir al baño, abandono la estancia y giro en un pasillo, cuando fue a tomar el pomo de la puerta del baño alguien la abrió primero desde adentro quedando así de frente con Julie.

En silencio repentino se instalo entre ambas chicas, que fue roto con Julie haciéndose aun lado para que la castaña ingresara.

—Espera Yuzuha — Shiba alzo una ceja al mirarla por sobre el hombro — Desde hace rato quería preguntarte algo ¿puedo?

Yuzuha alzo una ceja. 

—Tu dirás.

Julie se cruzo de brazos y su expresión cambio a una de total determinación.

—¿Entre tu y Taka-kun hay algo?

Las mejillas de Yuzuha adquirieron un gran tono de rosa.

—Somos amigos — respondió de golpe, ignorando a su corazón latir con prisa.

—¿Solo amigos?

—¿Qué buscas Julie?

—Solo quiero tener claro que no tienes nada con Taka-kun — declaró ella alzando sus manos — Me interesa Taka-kun, es un gran partido ¿no crees? 

—Entre Mitsuya y yo solo hay un gran amistad, lo veo como un hermano y él a mi como una hermana, en realidad — Yuzuha la miró firme, para que no viera que su voz había titubeado ¿pero por que había titubeado en primer lugar? — Si Mitsuya te dice que si, espero realmente que lo hagas feliz.

Julie la miro fijamente, tanto, que a Yuzuha le parecieron eternos.

—Bien, es eso solo lo que quería oír — respondió la chica dándose la vuelta.

Julie camino de prisa por el pasillo y Yuzuha por alguna razón la siguió, y cuando llegó al recibidor, donde la encontró, observó a ambos salir del local.  Con Julie agarrada del brazo de Mitsuya y él riendo de lo que la chica hubiera dicho. 

Yuzuha llevó una mano a su pecho inconscientemente. 

Había declaro que no le gustaba, entonces, ¿por que ese ardor en su pecho mientras los veía alejarse?

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19 de Junio, 2021

Yuzuha abrió su paraguas con un mohín.

Tenia que llover.

Avanzó rápidamente por el pavimento y maldijo a su hermano Hakkai, quien había corrido hacia el establecimiento de Draken y la había dejado sola, viendo donde aparcar el auto de alquiler que había decidido adquirir como prevención para trasportarse con mas tranquilidad luego de que culminara la reunión.

Miro emocionada la ultima cuadra, pero la sonrisa en su rostro fue descendiendo al observarlo aparecer de golpe en su visión, agitado y empapado, mirándola con igual sorpresa. 

—Mitsuya— susurró, presa del oportuno encuentro. Fue entonces cuando se dio cuenta de lo desabrigado que iba y su lado maternal resurgió ante que nada — ¡Pero puedes pescar un resfriado! ¿Cómo puedes salir sin un paraguas con este clima? — Le regañó.

Sin él tener tiempo a decir algo, Yuzuha acorto la distancia y coloco el paraguas sobre los dos.

El sonido de las gotas chocar con la sombrilla, de alguna forma, la hicieron ignorar un poco sus propios nervios y a su corazón, que latía con muchísima fuerza contra su caja torácica.