Archer estaba en la cafetería, preparando la comida para el staff de Chaldea, ya que era casi de noche, aunque no se notara por el clima nevado de afuera. Los dos Masters aun no aparecían, por lo que debían seguir con el entrenamiento que Scathach les impuso.
Casi quiso reír de lo que deben estar pasando, no sabe mucho de Scathach mas allá de la información del Trono de los Héroes, pero si sabe que es una maestra de héroes que no es conocida por ser blanda en sus entrenamientos.
Paso el tiempo, y la cafetería comenzó a vaciarse, ya todos habían cenado y se estaban retirando a descansar o a revisar algunos trabajos. Todavía no había señales de los hermanos.
Cuando el último staff se retiro, la puerta de la cafetería se abrió, Archer la miro, pero no vio a nadie pasar, solo cuando escucho un quejido miro al suelo, encontrándose a su Master arrastrándose sin energías adentro.
-¿Master?- Llamo Archer, no sabiendo si su Master la oiría.
-Comida... descanso... piedad...- balbuceo Gudako.
Scathach también entro a la cafetería, pasando de largo el cuerpo tirado de la Master hasta sentarse en una de las sillas. Archer la miro de forma reprochable.
-¿Qué fue lo que hiciste?-.
-Entrenamiento, como dije que haría, solo que un poco mas rudo- respondió Scathach como si nada. -Al menos su hermano pudo irse caminando hasta su habitación, aunque tal vez termine inconsciente a medio camino- menciono.
-¿No exageraste?-.
-Todo va a ser mas difícil a partir de ahora, por lo que ellos dos deben prepararse para todo tipo de situaciones y peligros como se debe, así que no se puede ser tan blando- ante ese argumento, Archer no pudo objetar. -Además lo hicieron mejor de lo que esperaba, estos chicos son como diamantes en bruto, aunque nunca lleguen a ser grandes guerreros, sabrán como defenderse y escapar de los peligros-.
Archer suspiro, parece que tendría que acostumbrarse a los impulsos y torceduras de batalla de Scathach ahora que trabajaran juntos. Al menos, ella parecía que podrían llevarse relativamente bien, a comparación de como se lleva con su estudiante.
-Entiendo tu punto, pero no sirve si nuestros Masters quedan así cada vez que los entrenas, eso terminara por afectarlos negativamente- regaño Archer, acercándose a su Master con un plato de comida en manos.
-No es para tanto, ya se acostumbraran dentro de poco-.
Archer dejo el plato que era un porción de arroz con una cuchara en el suelo delante de su Master, al detectar el olor del aroma, la chica tomo la cuchara y la extendió al plato, tomando un pedazo y sirviéndose el primer bocado.
Al sentir el sabor divino de la comida, ya no aguanto y empezó a llorar por tan delicioso aperitivo después de lo que fueron horas de lo ella llamaría como tortura.
-Gracias... mama...- dijo Gudako entre lagrimas, comiendo mas de su plato.
EMIYA frunció el ceño al ser llamado de ese modo y Scathach sonrió burlonamente, para luego mirar curiosa como el arquero dejaba otro plato igual delante de ella.
-Sabes que no es necesario que coma, no necesito de eso ahora que soy una Servant-.
-De todas formas voy a hacer una porción para Gudao, y aun queda suficiente, sería un desperdició dejar que lo que quede de arroz no se coma. Realmente Chaldea tiene un gran suministro de ingredientes- respondió Archer.
Scathach no sabia que decir, parece que este hombre no le molestaba cocinar para todos, era bastante generoso, puede que demasiado, o simplemente estuvo acostumbrado a cocinar en vida y no le molestaba. Lo pensó un momento y acepto, de todos modos tenía interés en la comida, aunque parecía bastante simple, por lo que no tenía muchas expectativas.
Cuando se llevo la cuchara a la boca y probo el primer trozo, se dio cuenta cuan equivocada estaba.
Abrió los ojos de golpe mientras su lengua degustaba esa pequeña porción, sintió como un relámpago recorrió su columna.
Y todo son con una pequeña porción de arroz, ella había comido arroz varias veces antes, pero nunca uno como este.
Archer sonrió satisfecho y con orgullo viendo como la implacable reina de las Sombras, comía con ganas. El no era un hombre con orgullo, pero su comida era lo único en lo que se enorgullecía.
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Fate: Travesia del Guardian
FantasiDESCARGO DE RESPONSABILIDAD: No soy propietario de esta historia de Fate sobre la que escribo en este sitio. Esta historia ha sido creada por camilo navas.