Capítulo 34 - Dante -

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El maldito chupasangre sostiene a Ishtar con fuerza y se aleja de nosotros hasta casi notar las olas romper en sus tobillos. 

Miro a mi hermano y a Sarah sin saber que hacer y veo como muestran sus álter egos poniéndose en guardia. 

En un descuido de Gabriel, Ishtar le da una patada en la espinilla y él sisea junto a su cuello, haciéndole un corte ligero con sus colmillos, pero sin soltarla, y veo por el rabillo del ojo como Sarah hace un gesto con las manos y una pequeña nube blanca flota hasta perderse en el cielo a toda velocidad. 

- Gabriel, por favor… - escucho murmurar a Ishtar. - ¿Amber te está chantajeando? ¿Es eso? 

- No es tan sencillo. - responde él casi perdiendo el gesto decidido de su cara al mirarla. 

- ¿Entonces por qué lo haces? - dice ella intentando girarse más para mirarlo a la cara. 

Gabriel aprieta los párpados con fuerza, pero se mantiene en silencio. 

Doy un paso vacilante hacia ellos, pero él lo nota y tensa más el brazo en el cuello de Ishtar. 

- No deis un paso más, tengo órdenes de matarla si existe la más mínima posibilidad de que escape. - sus ojos dudan por una milésima de segundo y aprieta los dientes antes de continuar. - Y no quiero hacerlo, por favor. 

- Si no quieres matarla, simplemente suéltala. - gime Sarah a mis espaldas dando un par de pasos más. 

- ¡He dicho que no deis un paso más! - chilla él. 

Pero Sarah lo ignora y gira sus manos creando un haz de luz brillante mientras se acerca aún más. 

De repente, Gabriel comienza a temblar como si no soportara un minuto más el esfuerzo y suelta un gruñido de dolor. 

Sus ojos rojos nos miran con un gesto totalmente inhumano y vemos cómo las venitas de debajo de sus ojos se marcan moradas justo antes de girar la cabeza de Ishtar y exponer su cuello para lanzarse a morder. 

Sus colmillos se hunden en su cuello y ella suelta un grito ahogado de dolor mientras unos hilillos de sangre corren hasta su clavícula. 

No lo pienso un segundo más y me lanzo sobre ellos para apartarla de sus manos. 

El golpe que le propino a Gabriel lo hace soltar a Ishtar y la oculto detrás de mis alas mientras alzo las manos hacia la frente del vampiro para intentar meterme en su mente, pero él me mira con una sonrisa triste. 

- Prefiero que me mates, porque no vas a conseguir que tu control mental interfiera con el suyo. - suelta sin más. 

Gruño exasperado y lo suelto para hacer aparecer el fuego dorado en mis manos, listo para hacerlo arder, pero Ishtar sujeta mi brazo y tira de mí. 

- ¡No! - su diminuto cuerpo se interpone entre los dos, alejándonos a ambos de él. - Amber lo está controlando, pero sigue siendo Gabriel, no quiero que le hagáis daño. 

Una risa estridente llega a nuestros oídos justo en ese momento desde uno de los acantilados cercanos y buscamos su procedencia con la mirada. 

- Qué tierna eres angelito… - 

Amber y Toni nos observan desde lo alto del acantilado y el despiste hace que Gabriel vuelva a atrapar a Ishtar y se aleje con ella de nuevo. 

Las dos figuras del acantilado desaparecen para aparecer de nuevo al lado del vampiro e Ishtar y nos observan en posición de ataque. 

- Mis pequeños ancestrales, ¡cómo os había echado de menos! - ríe Amber, haciendo que Sarah y mi hermano se coloquen a cada uno de mis lados haciendo brillar sus manos en blanco y morado. - ¡Oh qué sorpresa! Si el pequeño Bas ya tiene sus poderes y resulta que es un brujo oscuro como tú, hermanito. 

Atraída por el mal [...A La Venta En amazon...]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora