•SOMEONE LIKE YOU~Swanqueen~ [PAUSADA]

Capitulo 34

Buenas.....espero y estén muy bien <3
Ya le traigo otro capitulo de esta historia, espero y sea de su agradó. No olviden votar y comentar que les parece, gracias por su apoyo :D.

Emma ya estaba dada de alta hace unas horas, ya se encontraba reposando en su cómoda cama. La morena se encontraba haciendo algo de comer en la cocina mientras los chicos. Matt y Sara estaba ahí asiendo compañía a la rubia platicando con ella sobre cosas de la escuela y cosas variadas.

Emma recibió una llamada de Meredith para avisar que todo estaba cubierto, y para informarle sobre el fallecimiento de Mary. Los impactos de balazos que le dio Cora atravesaron su chaleco perforando varios órganos importantes. Por ese lado Emma estaba un poco devastada a pesar de todo pues era su madre, la que la crío por más tiempo que todas sus casas de acogida que tuvo en toda su infancia.
Todavía no entendía como Mary Margaret pudo esconder un pasado tan horrible, ella tuvo que ver con que Henry no creciera con ella. También con la vida tan miserable de Regina, ese bastardo se tenía ganado un pase directo al infierno el infeliz. Ella se encargaría de que pagará todo lo que hizo pasar a la morena y a la pequeña Sara.

Emma salió de sus pensamientos cuando escucho hablar a su hijo mientras pasaba la mano frente a sus ojos.

-Mamá, ¿En qué momento dejaste de prestar atención? -se ríe- eres muy distraída señorita Swan.

-Disculpa, me quedé pensando algunas cosas -se rie- ¿Que tal si van a ver qué preparó su madre? Mientras yo me baño -sugiere-

-Claro, vamos Matt -le dan un beso cada uno a la rubia y salen de la habitación-

Emma se había quedado ahí, procesando ese momento tan bonito que le acababa de pasar.
Estaba soñada al fin. Solo probablemente podrían ahora sí seguir con sus vidas y regresar a la normalidad e intentar sobrellevar las muertes que ha traído tanto secreto a sus vidas.
Eso esperaba ella solo tener un poco de paz, poder vivir normal como cualquier otra persona. Porque su vida había sido tan ajetreada desde que nació que no miraba fin a su maldición.

La rubia se levantó y entro al baño que estaba cerca de la cama, entró al cuartito llegando primero al espejo. Al verse provocó una mueca en su cara, estaba pálida con ojeras, sus cabellos estaban bastante descuidados. Se empezó a quitar el vendaje que traía en la herida suspiro antes de darse la vuelta para ver cómo iba progresando.
Al darse la vuelta se topo con una herida pequeña pero nos unos cuentos hematomas alrededor, le había dado 10 puntadas para cerrar. Aún no tenía completa movilidad en su brazo, cualquier brusquedad que hiciera podía reventar los puntos y todavía le faltaban días para que se los retiraran.

-¿Necesitas ayuda? -Al escuchar la voz dio un brincó, levantó la mirada y se topo con Regina parada en la puerta con una pequeña sonrisa en sus labios-

La rubia asintió ya que le quedaba un pedazo de gasa en la piel la cual no alcanzaba y le vendría bien un poco de ayuda.

Regina la condujo hasta sentarla en la taza del baño y con un trapo húmedo empezó a mojar la cinta para que fuera menos doloroso al despegarla.

-Vas progresando bien, tu herida está sanando poco a poco -toca al rededor sin llegar a lo morado de la piel causando un escalofrío en la rubia- lo siento, creo que estoy un poco fría-

-Esta bien, pero no están frías están en una temperatura agradable -siente un poco de dolor cuando Regina tiro de la cinta-

-Perdón, esta cinta estaba agarrada a uno de los moretones -sobo con suma suavidad el lugar hasta que Emma se relajó- listo ese era el último pedazo pegado y el que más dolió por lo visto.