Me pierdo en tus ojos (Madelaine Petsch y tú)

C A P Í T U L O 14

____ Williams.

21 de septiembre 2021

Ha pasado un mes desde que hice paracaidismo con Madelaine, desde ese día no he respondido sus mensajes, también le he dicho a Davina que diga que no estoy, he faltado al trabajo y las pocas veces que voy la he evitado por completo; no sé absolutamente nada de ella.

Hoy, es el día, el día en el que perdí un pedazo de mi alma, un día donde mi corazón se rompió, el día en el que empecé a sentir tanta culpa, hoy se cumplen cuatro años de la muerte de mi adorada hermana menor. Allison.

<<¿Como me siento?>>

Ni siquiera yo lo sé, creo que es un dolor tan indescriptible, cada vez que sus lindos ojos verdes o su angelical sonrisa vienen a mi mente se siente como si me estuviera ahogando en el océano y no haya manera de salir a la superficie, la culpa me invade y más me voy hundiendo.

<<¿Así se sentirá estar en el infierno?>>

Tal vez.

Mis lágrimas salen por si solas, el dolor invade cada nervio de mi miserable ser, estoy en la cabaña a fueras de la ciudad tirada en el suelo con una fotografía de Allison.

Me pregunto, ¿cómo una niña tan feliz como Allison tuvo que terminar así?

La vida es tan injusta en ocasiones, es un verdadero asco. Ella tenía toda una vida por delante, ella merecía ser feliz.

Quizás si yo no me hubiera ido de esa casa, tal vez si yo hubiera aguantado un poco más, ella seguiría conmigo.

Mi teléfono empezó a vibrar con desesperación, lo saque de mi bolsillo.

Llamada: Davina❤

Decidí apagarlo, se que esta preocupada pero no quiero hablar con nadie, en especial con ella.

Vendrá a buscarme aquí, eso es seguro, ella es tan predecible.

Me levante del suelo con dificultad, mis manos temblaban y todo en mi dolía, limpie las lágrimas que bajan por mis mejillas con mi antebrazo, coloque mis típicos lentes oscuros y salí de ahí.

Camine hasta que encontré una carretera, no traía auto ni nada, logré agarrar un taxi, pase por unas flores y fui directo al cementerio.

Me adentre a él, camine hasta que encontré la tumba de Allison, mi pecho se oprimio al volver a leer su nombre, me deje caer poco a poco hasta tener mis rodillas en el suelo; con delicadeza deje las flores a un lado.

Tome una gran bocana de aire y solte despacio—Hola, espero que estes muy bien—sonreí a medias,—¿Sabes? Nunca pensé admitirlo pero no sabes cuanto te echo de menos, Alli.

Quite mis lentes dejándolos a un lado también.

—Aún no puedo asimilar que perdí a mi alma gemela—mi vista empezó a nublarse,—Extraño tu fastidiosa voz, esa que me estresaba tanto—solloce.

Mi alma duele tanto que solo quiero que pare, su sonrisa boba viene con mayor fuerza a mi mente y me quema demasiado.

—Es una lástima que este empezando a olvidarla—mi voz se quebró y las primeras lágrimas empezaron a rodar por mis mejillas,—No sabes cuanto lo siento. Estoy intentando ser fuerte, seguir adelante pero no se hacerlo—hice una pausa—No se hacerlo sin tí.

Coloque la palma de mi mano encima de la piedra que tenía al frente.

—Debí ser yo, tú tenías que ser feliz, de verdad lo siento, Allison—empecé a llorar a mares, creo que en este momento hasta respirar duele,—Nunca dejaré de amarte, pequeña fastidiosa.