R U L E TA. | KOOKV

Prólogo.

05 09 21.

Cuando las personas piensan y analizan algún final para el planeta en el que habitan normalmente se imaginan una catástrofe; el mar corrompiendo a la tierra, fuego cremando a cualquier ser vivo que se cruce en su camino, plagas de enfermedades arrebatando vidas e inclusive apocalipsis de muertos vivientes, entre otras cosas tétricas.

Ese no era el caso esta vez, porque el mundo ya estaba llegando a su fin y era como nunca antes nadie lo habría imaginado.

Todos conocemos los regímenes en cada país del mundo, reglas para mantener un control de todo tipo y vivir de cierta manera en paz, claro si lo mirábamos con ojos entrecerrados y a oídos sordos, porque la corrupción que predominaba en la política no era ningún secreto. Donde pareciera ser que los cerdos con dinero alías los políticos, tenían más derecho que quienes eran las ciudadanos, aún sabiendo que dejando de lado lo material todos éramos y teníamos lo mismo. Simples mortales. Y a pesar de que por muchas décadas los regímenes cumplieron su papel, llegó un punto en el que se volvió completamente inútil, ¿la razón? ciudadanos inconformes y de ahí acciones contra el gobierno hasta derrocarlo. Toda persona excluida de la política se dejó cegar por la ira que sentía, sin planear lo que vendría después de su victoria y sin saber cómo enfrentarlo. Fueron tiempos oscuros, la única sensación dominante era la tensión, siendo una plaga de maldad pura, que con el paso del tiempo oscurecía cada parte del planeta como una gran nube negra antes de una tormenta.

Era un hecho que en cualquier lugar debe haber quien mandate, quien ponga todo bajo control, por el bienestar de todos. Algo que los ciudadanos no pensaron cuando estaban en busca de su libertad y tampoco se detuvieron a hacerlo, ya que a sus ojos la victoria fue su única solución, fue la razón del por qué vivieron varios años en tranquilidad y paz, fue lo que aumento su ingenuo y lo que los volvió débiles. Su victoria nunca les enseñó como combatir a un golpe de estado el cual se preparó durante años y fue más aterrador que cualquier otro hecho en la historia. El mundo tornandosé de un color carmesí lleno de horror. Todo volviendo a la normalidad exceptuando los valiosos regímenes, los cuales fueron botados y remplazados por algo mucho peor; La Ruleta. 

La ruleta sólo traía sufrimiento a la vida.

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"No voy a parar de buscarte nunca, lo prometo". Dijo con el corazón en la mano y las lágrimas no parando de rodar por sus mejillas. El castaño frente a él soltó un sollozo desgarrador.

"Estaré esperando por tí". Se deshizo suave y lentamente de la mano ajena que sostenía la suya, mientras que con todo el dolor de su ser daba media vuelta para comenzar a alejarse, dejando atrás a un azabache destrozado y no parando de gritar su nombre entre lamentos, mientras poco a poco caía de rodillas al frío suelo.

Dos almas rotas, con un reparo en la incógnita.