Único

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Mi vida estuvo llena de oscuridad hasta que conocí a la estrella más brillante del cielo.


  ☆

Wang Yibo trabajaba en un edificio ubicado en el centro Beijin donde se dedicaba a ser desarrollador de software, hacía poco tiempo que se había mudado a un departamento nuevo y fue ahí cuando lo conoció.

Una mañana Yibo había despertado tarde para ir a trabajar, ni siquiera le dió tiempo de buscar algo para desayunar porque salió corriendo hacia el estacionamiento. El recorrido en el ascensor se sentía eterno hasta que las puertas se abrieron y al correr nuevamente chocó con alguien tirándolo al suelo.

La persona que Yibo había arrollado estaba en el suelo sobando su cabeza y tratando de levantarse. No se quejo, no dijo nada, otro en su lugar se hubiera alterado y comenzaría una discusión pero no fue así, sólo se puso de pie levantando la cabeza, viendo a Yibo con esos hermosos ojos oscuros con dos puntos tan brillantes que parecían contener una galaxia en ellos.

Lo siento, ¿estás bien?, ¿te has lastimado? ─el chico no dijo una sola palabra, siguió su camino como si nada y dejó a Yibo desconcertado.

Luego de ese suceso las cosas marchaban normales, hasta que una tarde Yibo regresaba de hacer compras y observó al mismo chico que había tirado al suelo accidentalmente pero ahora estaba sentado en una banca del parque alimentando a las aves.

Se quedó de pie a una distancia prudente visualizando la escena, el chico había tomado entre sus manos a un pequeño pajaro que tenía su patita lastimada y comenzó a cantar. Su voz era melodiosa, capaz de hacerte sentir tranquilidad y recobrar tus fuerzas.

A parte de eso, Yibo sintió la necesidad de pedirle disculpas por ocasionar que se cayera, aunque el chico no lo haya dicho pero ese golpe debió haberle dolido y él lo mínimo que se merecía era un insulto por ser torpe. Fue así como se acercó para hablarle, tenía nervios de que ahora sí recibiera un golpe pero también quería volver a ver los ojos que lo cautivaron desde el instante que los vió.

Hola otra vez, ¿puedo sentarme? ─el chico no volteó a verlo porque ya sabía quien era, solo se movió un poco para hacerle espacio al sujeto recién llegado y siguió cantando.

Mi nombre es Wang Yibo, ya sabes, el tonto que te hizo caer. Créeme que no fue mi intención pero iba demasiado rápido y...

No hace falta que te disculpes, está bien. ─el chico dejó al pajarito en el suelo para que comiera con los demás y para sorpresa de Yibo ya tenía sana su patita─ Yo soy Xiao Zhan, mucho gusto.

El resto de la tarde se la pasaron conversando para conocerse mejor, aunque el que terminó contando sobre su vida fue Yibo. Mientras él hablaba, Xiao Zhan escuchaba atentamente dándose cuenta que el chico parecía un niño grande, no tenía muchos amigos y gracias a su trabajo podía rentar un apartamento y sobrevivir, también supo que tenía una enfermedad respiratoria que mantenía controlada.

Ese fue el inicio de su corta amistad.

Meses después Yibo conoció a un chico, su nombre era Seungyoun. Rápidamente se volvieron amigos pero su relación con Xiao Zhan seguía siendo más sólida, hasta el punto que el chico se terminó enamorando de Yibo pero no era capaz de decirle.

Xiao Zhan sabía muy bien que no debía tener esos sentimientos, para él Wang Yibo era la persona más importante que tenía, siempre estaba ahí para cuidarlo pero sabía que no podía enamorarse.

Una noche Yibo tuvo un accidente. Seungyoun llamó a Xiao Zhan para avisarle y este rápidamente salió en dirección al hospital. Llegó minutos después, encontrándose a Seungyoun en la entrada para guiarlo hacia la sala donde estaba Yibo, no los podían dejar entrar a verlo porque estaba en cirugía, según las enfermeras había sufrido un fuerte golpe en la cabeza y perdió mucha sangre.

Horas más tarde el doctor salió del cuarto y les informó sobre el estado de salud de su amigo, habían hecho todo lo posible pero no tenían esperanzas que sobreviviera.

Solo uno de ustedes puede pasar. ─los chicos se miraron y Seungyoun dicidió que fuera Xiao Zhan.

El cuarto era totalmente blanco, habían varias máquinas encendidas y una de estas le brindaba oxígeno a Yibo. Con pasos lentos Zhan caminó hasta quedar al costado de la camilla, el cuerpo sobre ella estaba lastimado y tenía una venda en su cabeza. El pulso era débil, quizá el doctor tenía razón, para ellos no había esperanzas en que sobreviviera pero Xiao Zhan sí la tenía.

Por primera vez se permitió llorar, cada lágrima descendía por sus rosadas mejillas hasta desaparecer en el suelo. Él sabía que Yibo tenía una oportunidad más, estaba dispuesto a darle su vida.

Xiao Zhan tomó la mano de la persona que más le importaba en ese momento y comenzó a cantar entre sollozos, a medida que el tiempo pasaba el pulso de Yibo se hacía más estable hasta que todo quedó en completo silencio. Xiao Zhan retrocedió y en ese momento entró el doctor, el señor revisó a su paciente quedando asombrado por la milagrosa recuperación, para cerciorarse le hizo unos exámenes y todos reflejaban que el joven estaba en perfecta salud.

─Te amo Yibo, pero no podemos estar juntos.

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Wang Yibo despertó al día siguiente, su amigo Seungyoun estaba dormido en un sofá cerca de él. Estiró su cuerpo sin hacer mucho ruido para no despertarlo, sentía una agradable tranquilidad como si hubiera dormido por mucho tiempo y hasta ese momento abrió sus ojos.

El cuerpo de Seungyoun se removió y al abrir los ojos miró a un Yibo sonriente.

No quise despertarte, perdón. ─Seungyoun no respondió, solo se levantó y abrazó al contrario.

Me alegra que estes bien, me preocupaste mucho ayer. El doctor dijo que tu salud es excelente pero debes cuidarte más. se separaron del abrazo y Yibo suspiró.

Una enfermera entró a la habitación para checar si el paciente había despertado, revisó las heridas pero estas ya estaban casi cicatrizadas. La enfermera felicitó a Yibo diciéndole que era un chico realmente fuerte, el accidente que había sufrido pudo haberlo matado.

Esa misma noche fue dado de alta, se despidieron de todo el personal que lo había atendido y salieron del hospital. En cuanto Yibo puso un pie fuera sintió una cálida brisa que lo motivó a mirar el cielo nocturno, ahí entre tantas estrellas estaba una en especial brillando espléndidamente.

¿Sucede algo? Yibo negó y subió al auto de su amigo.

Creo que me enamoré de una estrella.

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Una estrella no puede enamorarse y Xiao Zhan lo sabía.

Sabía que estaba destinado a dar su vida por ese lindo chico llamado Wang Yibo, desde el instante que lo conoció supo cual sería su final. Puede que nadie recordara al precioso chico, pero en el fondo Yibo tenía presente a alguien especial que siempre lo acompañaba silenciosamente.

Esa era la estrella más brillante del cielo, una estrellada llamada Xiao Zhan.

Espero que este one shot les haya gustado ^^
Es un poco triste pero, necesitaba escribirlo y mostrárselos.

LSD

The brightest star in the Sky💫 |YiZhan|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora