--Contando hacia atrás--

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Sería complicado el tener más de cinco dedos en tus manos, cuando aquellos pensamientos son más de 10...11...12 ¿Seguía 13? Ya la cuenta no importa, lo que si confirma es que vaya mierda has tenido que vivir, otro puede ser que, la comparación te ha estado ahogando en ese mismo vaso por casi una década, que incluso te miras a la espejo ¿Qué ves? un borroso espectro ¿Dé quién se podría tratar? Oh, eres tú mismo...

Todo esa desperación se le puede poner una edad... ¿Te parece si iniciamos primero por como llamarte lector?

No sé quién podria preguntar eso al iniciar un monólogo de esa forma, pero, es probable que te vea más de una vez... ¿Te parece si te llamamos, sanador? Es un nombre... tal vés tan manipulado que no suena tan genial como "estrellitas" ó "queridos lectores" pero, tendrá su función más adelante. Por lo que será una ayuda si me sigues querido sanador, el camino se vuelve tan extenso a medida vaya poniendo pie por pie sobre ese exterior que da escalosfríos como si se entrará a un iglu ¿Nos convertiremos en pingüinos? No lo creo, pero si... se podrá congelar esos recuerdos, que se verán una y otra y otra vez.

Todo podría iniciar desde... los 6 años. Quién podria pensar que a esa edad no tendría significado las cosas que le rodean, que solo es un simple juego, que hasta el mismo suelo, se convierte en un gran paraíso que las carreteras con enormes pistas que te llevan hasta la lejanía, como si fuera todo una fantasía, esas tardes cuando salías de casa a encontrarte con tus amigos y se la pasaban horas y horas eternos de diversión que llega la hora y rogabas por que tu madre o padre no te metiera a casa... ¿Las recuerdas? Más de alguno posiblemente sí, era lo más perfecto de la vida, pero... ¿Y si cambiamos ese fragmento? poniendólo totalmente opuesto a el final de una sonrisa y acostarse pensando en que despertarte para empezar el día como el anterior y ser tan igual al pasar de las semanas.

Pues este será así, el despertar será el más decepcionante, imaginá levantarte de tu cama y lo primer que escuchas es una voz tan autoritaría regañandote tan solo por descansar unos minutos más ¿Los niños necesitan eso para crecer? Habló del dormir de más, un crio a ese momento, puede ser un pilar, veas por donde lo veas, puesto en este caso, los gritos de: "Las máscaras de papel" cambian cada momento sus expresiones, disfrasandóse como simples humanoides, pero, en el interior, no queda más que un hueco oscuro y profundo. Son dos y existe un tercero, pero cuenta como si fueras tu mismo en excepción de la edad, si, es mayor. La "Mascará de papel que entre flores se esconde" tiene dos de sus lados, uno puede llegar a ser amable y protectora, pero, su lado más 《auténtico》 es aquel, egoísta, burlona y controladora. És la que este caso acaba de despertar a "Él chico de pecho de cristal" y si te preguntas de quién se trata; es el que te narrá esta historia en un día de semana que por la luz de su ventana se puede reflejar un poco la luz, ese resplandor que es cálido, pero ni eso puede descongelarte de estado tan frío en el que esta estancado ahora, querido sanador.

"Él chico de pecho de cristal" se levantó de su cama, con esos ojos tan cristalinos por un bostezo que hizo que hasta sus músculos se tensarán, sus piernas buscaban comodidad y sus brazos abrazaban la nada cuando se estiraban; puede ser algo bueno al iniciar, pero no es así. Todo era por que en esas mañanas tenías que ir a escuela que tanto odiabas, pero solo por el hecho de que necesitabas nutrir tu mente o eso quieren hacerte entender, cuando puede ser que solo hagan lo que se te dice y tu quedes callado. Seguramente es alguién timido que cualquier cosa le pone nervioso, cuando en todo caso es normal ver tantos soles en la tierra e inocencia de los mimos infantes, que alguién le iban cortando las plumas de un ave que solo estaba en su jaula escuchando las palabras de esos dueños, agradeciendo que existas, pero no por el hecho de que te amen totalmente ¿Por qué te tienen en una celda? ¿Y su moral dicem que es protección? El mundo exterior es malo como: "La marcará de papel que entre flores se esconde" te queria hacer entender.

Luego de nisiquiera comieras por el hecho de que tu cuerpo no tolerá el desayuno por lo temprano que es, puede ser una señal de que nada va en el camino correcto, todo se va desviando poco a poco, pero era simple, nada estuvo bien desde que llegó ese dia, será más adelante querido sanador, no desesperes en saber ese día, llegará. Luego de colocarse el uniforme y una lonchera en donde se llevaba en desayuno que en un par de minutos dejaría de estar tan delicioso, era el sosten único que se podía tener en esas circunstancias, eras un niño, todo era bueno si no le ponian verduras, salío como nada, sin darse cuenta de los detalles para tomar un transporte público junto a "La mascará de papel que entre flores se esconde" y llegar a tu destino esperado por el resto, pero agobiante para tí. Ése colegio contaba con niños con pequeñas raíces en sus mentes que poco a poco iban creciendo sus tallos y al alcanzar sacar frutos significaba el éxito total, iban por niveles como videojuegos que si no salías de esa sección, repetías nuevamente, que difícil... pero por suerte "Él chico de pecho de cristal" fue afortunado que no repitió ningún nivel, iba pasando poco a poco, sería en esos instantes que a lo mejor sus raíces y tallos iban menores a el resto, no eran tan frondosos, verdes o amarillos o manifestandóse en colores más vivos, estos eran pequeñas hojas algo maltratadas, incluso, cuando se avanzaba no pasaba de tamaño, considerando que debería de crecer y dar frutos en el último nivel. Es decepcionante mencionaría, pero merecedor en sus aspectos comunes.

No tenía amistades que fueran de provecho, mayormente se la pasaba cultivandóse a si mismo, pero si llegaban algunos, le era necesario conservarlos, fue cuando aparecio uno de esos cultivadores de conocimientos, que le recuerda por tan solo esas etapas, ahora es como un manchón de tinta en tu hoja de apuntes, que no puedes volver a ver el significado de lo que antes escribiste, la llamaremos: "La niña de las mejillas de azúcar" su nombre no es por cualquier cosa, pero este chico, las recuerda por las risas que pudo darle hasta que todo se fuera abajo, suena dramático inclusive, pero jugo un rol que puede ayudar a su desarrollo, se la podía pasar con "El chico del pecho de cristal" horas, entre conversaciones de programas de dibujos, tareas ó incluso... sueños. Era lo más normal, le llenaba de esperanzas, eran tan buenos amigos que incluso, por esa vez, uno de sus tallos crecío tan vivo sin pensarlo antes. No podía creerlo, alguién lo logro, algo que ni el mismo pensaba imaginable, era ese algo que necesitaba, que ocuparía y que no queria perder nunca, que penuria más perjudical era.

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⏰ Última actualización: Sep 07, 2021 ⏰

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𖦹༆Camino de cicatrices༆༄Donde viven las historias. Descúbrelo ahora